Dos personas de baja estatura veían a un azabache con el ceño fruncido y sus brazos cruzados. Uno con unos rebeldes cabellos oscuros, portando unos brillantes ojos café y borrando cualquier rastro de una infantil sonrisa. El otro también tenía sus cabellos alborotados, pero de una tonalidad naranja, con sus ojos del mismo color que su hermano mayor; pero este no hacía esfuerzo por ocultar su expresión de disgusto en su rostro.Tobio sólo suspiró al ver la escena y como sus dos hijos lo miraban de mala manera. Shoyo, sentado a lo lejos, se mordía el labio aguantando la risa.
— ¿Quién de los dos..? — Inició el más alto de la familia, logrando que (otra vez) los niños negaran rápidamente con la cabeza.
— ¿Por qué nos estás echando la culpa a nosotros? — Preguntó Ichiro, frunciendo aún más el ceño.
Kageyama Ichiro, su hijo mayor de tan solo siete años. Lamentablemente para el alfa de la familia, era muy parecido a él en algunos momentos.
— Eso, ¿por qué papá nos juzga sin saber la verdad? — Cuestionó entonces su otro hijo, con una mueca posiblemente peor que la de su hermano mayor.
El omega mayor de cabellos naranjas, soltó una pequeña risa al oír esas palabras. Kageyama Katsuro, era el más parecido físicamente a su figura materna, pero su actitud en sus cuatro años de vida era peculiar.
Sí, los dos niños eran igual a su padre en aquel aspecto.
— ¿Tal vez por el simple hecho de que son los únicos en esta casa después de mí que toman una gran cantidad de leche? — Acusó finalmente Tobio, haciendo el mismo semblante que sus hijos.
— Pero a nuestros hermanitos también les gusta — Se defendió Katsuro, asintiendo.
— Los bebés no saben abrir un refrigerador, pequeños idiotas.
— ¡Mamá, papá acaba de decir una mala palabra frente a los niños!
El único alfa de la habitación se puso pálido al oír una diminuta risa infantil venir desde dos sillas para bebés. Giró su rostro con cautela, detallando como Hinata le miraba con una ceja arqueada, para luego desviar su vista hasta sus dos hijos más pequeños.
Kageyama Hiroshi y Kageyama Hitoshi. Gemelos de cinco meses de vida, con un abundante cabello azabache y profundos ojos azules. A diferencia de sus otros dos hermanos, estos reían más a menudo.
Todos sus hijos habían heredado la maraña de cabellos de su esposo.
— Tobio.. — Susurró el omega mayor, frunciendo los labios — ¿qué hablamos sobre decir malas palabras delante de los niños?
Katsuro e Ichiro se rieron. Oh, con que era jugar sucio..
— ¿Qué acaso Ichiro no te dijo sobre quién se comió tu chocolate, Shoyo? — Interrogó Kageyama.
El mayor de sus hijos se puso rojo como un tomate.
— ¡Yo no fui!
— Si dices mentiras te crecerá la nariz como a Pinocho — Siguió el más alto, alzando los hombros.
Hinata, por segunda vez en el día, aguantó una risa.
— ¡Pero yo no fui!
— Ah, ya te veo la nariz más grande..
Ichiro abrió los ojos lo más que pudo, totalmente aterrorizado. Su hermano menor imitó su acción, creyendo la mentira de su padre e inocentemente tocando su propia nariz.
— ¡Bien, bien. Sí fui yo, lo siento! — Admitió el de cabellos azabaches revueltos.
Los gemelos en sus sillas infantiles miraban a su familia sin entender muy bien qué estaba pasando.
Kageyama Shoyo se sentía feliz al ver eso; su esposo discutiendo con sus hijos como si fueran de la misma edad, estos negando todo hasta que sacaban el tema de "Te crecerá la nariz como a Pinocho" y Tobio tanto como él mismo hacían el esfuerzo para no reírse a carcajadas. También amaba las tardes donde todos jugaban vóleibol (o lo que sus hijos entendían de ese deporte), reían y se divertían.
Tan sólo eran ellos. Una pareja de idiotas y sus cuatro hijos.
Tobio y Shoyo afirmaban que no tendrían más. Tsukishima lo dudaba y les decía que ellos eran capaces de tener hasta diez hijos.
Aún así y pese a lo largo del viaje, habían descubierto una cosa:
Que era increíble como unas simples notas acabaron haciendo que formaran una familia.
°
¦ Que bonita la familia Kageyama, está llena de amor y diversión :'). ¦
¦ ¡Buenas! ¿Cómo están? ¿Qué tal le pareció el epílogo? Aquí tienen el final definitivo de esta historia, donde vemos a esta pareja ser padres de cuatro niños y lidiar con estas aventuras. Además, ¿notaron el pequeño detalle de "Kageyama Shoyo"? *llora en Kagehina canon *¦
¦ Sin más que decir, nos vemos en las palabras Finales y en los datos y curiosidades de esta historia, donde también encontrarán todas las frases que nuestro querido Tobio usó en sus notas. ¦
Con mucho cariño, lizie. Les mando un abrazo y un beso virtual, los quiero mucho <3.
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Dear Hinata (Kagehina - Omegaverse)
FanfictionKageyama Tobio se describe a él mismo como un alfa centrado que, literalmente, jamás haría algo fuera de lo común o pasaría algún tipo de vergüenza. En serio, nunca. O eso creía hasta que terminó ahogándose entre sus propias palabras y terminó idean...