ᴘᴀꜱᴏ ᴄᴜᴀᴛʀᴏ

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Paso cuatro: Hicimos un minucioso inventario moral de nosotros mismos sin miedo. Permitimos mirar hacia adentro y juzgarnos, culparnos pero no decaer saber que eso nos ayudaría a levantarnos

Se me había hecho costumbre todos los martes caminar con Valentín hasta la parada y quedarnos charlando hasta que llegaba el colectivo, nos habíamos hecho más cercanos y de a poco compartiamos más cosas, sobre todo nuestro avance en el tema que nos involucraba.

No pasaba más que charlas, chistes, recomendaciones de películas aunque yo ya había empezado a verlo con otros ojos, había empezado a prestar atención a su sonrisa de lado y como ladeaba tiernamente su cabeza al hacerlo, al fruncir sus cejas tomaban una forma divertida y los lunares que salpicaban su rostro estaban perfectamente ubicados

Ya había pasado casi un mes desde que el empezó, y cinco desde que estaba sobrio, esa noche dijimos que íbamos a festejar con una coca cola en la plaza, el lugar donde últimamente nos refugiaba. Fuimos hasta un kiosco, compramos la gaseosa y una papitas para sentarnos luego en el banco de la plaza y "celebrar" esos meses de sobriedad que tanto sacrificio le habían dado

—Me gustaría estar tomándome un Fernet pero esto zafa - dijo dándole un trago a la gaseosa haciéndome reir mientras comía una papita

—Uy si, unas ganas de tomar un champagne, que rico - cerré mis ojos como pensando en eso y el soltó una risotada fuerte que me hizo mirarlo

—Sos tan cheta que me das asco - dijo haciendo arcadas de mentira, rodé los ojos y lo empuje por el hombro suave

—Callate villero - me miro como ofendido y nos volvimos a reír hasta que no nos dió el aire y suspiré largamente mirándolo con una sonrisa —Te traje esto - metí mi mano en el bolsillo y saque una chapita de color que tenía el número 5 el la tomó y la observó con detenimiento

—¿Que es?

—Es la chapita de los cinco meses sobrio, Juan me pidió que te la diera, era mía, pero yo ya pasé los 7 - le mostré la que tenía en el llavero sacando las llaves de mi bolsillo—Te la doy yo porque fuiste con la que más formó un vínculo, es como un voto de confianza, que se yo, algo así dice Juan - dije riendo y el sonrió de lado sin dientes, siempre se veía tan hermoso cuando hacía eso, hacia tiempo que el me había empezado a gustar tanto como su compañía, creo que eso ya lo dije pero no podía sacarlo de mi cabeza

—Gracias - guardo la chapita en su bolsillo y nos quedamos mirando unos segundos, acomode mi cabello detrás de mi oreja, vacilo apenas, se acercó un poco más hacia mi, note que el corazón se me aceleró al sentir su cercanía, ladeó su cabeza un poco casi como si fuera a besarme, pero mi celular corto el momento haciéndome suspirar

—Hola pa, si, ya salgo para ahí, te dije que llegaba tarde - suspiré pesadamente —Dale si, si ya entendí - corte guardando el celular y me pare, el hizo lo mismo —Me tengo que ir

—Nos vemos el martes ¿Te acompaño a tomarte el colectivo?

—No, no me tomo un taxi - dije señalando la calle, el momento fue incómodo, como que todo se había vuelto raro después de eso

—Bueno - dijo rascando su nuca y me acerque a dejar un beso en su mejilla apoyándome en su hombro

—Que descanses - deslice mi mano que aún estaba en su hombro por su brazo hasta su mano sintiendo cosquillas cuando nuestros dedos rozaron, camine unos pasos sin querer hacerlo, pensando en que en realidad me hubiera gustado chaparlo, pero su voz me detuvo

Adicciones~ WosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora