Adicciones～ Wos

ʀᴏᴛᴀ

Vosotros corríais bien, ¿quién os impidió obedecer a la verdad?
Galatas 5:7

Avance en la rehabilitación, ya pasaron tres semanas, casi un mes limpia. Volví hablar con papá, parece que tiene esperanzas, yo también, me hace bien que me acompañe, un par de veces me fue a buscar y cenamos juntos. Empecé terapia, muy a duras penas, pero lo hice, mi psicóloga dice que mejor tarde que nunca, pero yo siento que siempre llego tarde

Me hice más cercana a Juan, ahora siento que yo soy la que atomizo, pero el parece contento cada vez que me quedo un rato más para charlar, siento que me entiende, que puede hacerse de mi dolor, el también fue adicto, sabe lo difícil que es

—¿Qué haces acá? - comentó sorprendida al ver a Tadeo cundo salgo de la reunión, me acerco a darle un abrazo que correspondió enseguida, hacia bastante días que no nos veíamos

—Quería verte, el otro día me dijiste que estabas medio bajón

—Si, estuve mal pero me re ayudo venir a las reuniones, hablar con Juan esas cosas - suspire pesadamente pasando mi mano por su brazo —¿Vos como estás?

—Tranqui, en la misma, ya sabes - hice una mueca con la boca pero agradecí su sinceridad —¿Queres caminar un rato? ¿Fumamos un pucho, tomamos una gaseosa?

Acepte porque estaba libre y porque distraerme un poco no me iba hacer mal, me contó que estaba intentando conseguir laburo, me emocioné un poco, me alegraba que quisiera salir de esa vida, más bien de esa forma de ganar guita fácil, además el no tenía un problema real con la droga, no era como yo o Valentín.

Yo le conté de mi avance, de la psicóloga, de mi viejo, que sentía que a de a poco todo se iba acomodando, lento pero seguro.

Pasamos a comprar una gaseosa y algunas golosinas, no pude evitar acordarme cuando hacía eso con Valentín, el corazón se me achicó un poquito más, pero no iba a dejar que ese recuerdo cagara nuestra salida improvisada.

Tadeo se había convertido en un buen amigo, atento, compañero, entre nosotros no había pasado más nada, quizás a veces sentía que el quería avanzar pero mi cabeza estaba ocupada en otras cosas, sobre todo en que todavía no superaba a Valentín

—Estuve pensando en ir a las reuniones como vos - lo mire con atención al hablar algo perdida por su discurso mientras ocupábamos lugar en un banco de la plaza —Para verte más seguido - fruncí mi ceño al escucharlo

—¿Para verme más seguido? tenes que ir porque realmente queres cambiar Depa, no porque queres verme, a mi me podes ver cuando quieras

Se encogió de hombros haciendo un silencio, desvío su mirada, yo le preste atención porque me resultaba rara su actitud, lo que me había dicho

—¿Hay algo que no me estas diciendo? - ladee mi cabeza para mirarlo, el subió su mirada encontrándose con mis ojos casi que de inmediato

—No, simplemente que te quiero ver más seguido, te extraño - tomo una de mis manos que reposaba sobre mi falda, miro nuestros dedos y luego a mi, como si confesar eso le diera vergüenza

—Tadeo - suspiré pesadamente buscando las palabras en mi cabeza, sentía que el estaba sintiendo cosas que no estaban buenas, ni adecuadas para mi situación

—No me digas nada, ya se, se que todavía lo amas a pesar de todo lo que pasó y se que lo nuestro fue algo del momento, pero a veces no puedo dejar de pensar en vos

—Tu amistad es una de las cosas que rescato entre toda la mierda que me ha pasado

Mi mirada se poso en nuestras manos que aún estaban juntas, mis dedos se movían sobre los de el dejando leves caricias, realmente lo quería, su compañía era la única, que en ese momento me sanaba, pero el tenía razón, yo aún pensaba en Valentín

—¿Supiste algo de él? - pregunté después de un silencio incómodo

—Si, lo veo todos los días

—¿Y como está?

—Male - baje la mirada cuando escuché como me lo dijo, suspiró para luego hablar —Está bien, que se yo, en la de siempre, sale de joda, sigue drogándose como siempre - se quedó callado cuando pareció querer seguir hablando y lo mire

—¿Y que más? Decime - ahora si lo mire acomodándome en el asiento —¿Qué más? - no habló solo desvío su mirada —Tadeo, decime, peor no voy a estar

Alzó la mirada por encima de mi hombro, señaló con su barbilla por lo cual me volteé, a lo lejos vi a Valentín, la panza se me arrugó y un vacío apareció en mi pecho, estaba con Gina, de la mano yendo a su casa.

Me levanté rápidamente dirigiéndome a la avenida, Tadeo no demoro en seguirme, pero no respondí cuando decía mi nombre, simplemente seguí caminando hasta alcanzar la calle esperando que algún taxi se acercara para poder subirme e irme a la mierda de ahí

—Malena para - me tomó del brazo para que me volteara, me solté bruscamente para mirarlo con mi mejor cara de orto

—¿Por qué no me dijiste que estaba con ella? - el nudo en la garganta subió hasta mis ojos impidiéndome contener las lagrimas mientras lo empujaba para que no me agarrara

—Porque no quería que te pusieras así - intentó consolarme pero no lo dejaba, limpié mi rostro bruscamente peinando mi cabello detrás de mis orejas intentando respirar con normalidad, estaba ahogada en ese llanto, ahogada por la imagen de recién 

—No me merezco todo eso - alcancé a decir en un sollozo rindiéndome a que me abrazara y contuviera abrazándome contra el

—No, no te lo mereces, nunca lo mereciste 

Me permití llorar por unos minutos, el respeto mi silencio, pero en mi cabeza solo surgía otro problema, una nueva angustia, aún sabiendo que mi relación con Valentín estaba muerta hacía tiempo en mi corazón todavía tenía un sitio para el, para lo que supimos tener

Todavía me erizaba la piel recordar lo que habíamos sido, lo linda que supo ser nuestra historia en un principio, porque sinceramente creí que era el amor de mi vida, nunca supe cuando ese ser tan especial que se me cruzó para, aparentemente, cambiarme la vida, se transformó en el mismo que terminó por arruinarme por completo, romperme en mil pedazos nuevamente y a pesar de cada herida yo aún lo amaba.

No estoy rota, estoy rotísima 

.

demore pero acá estoy, gracias por leer, pueden compartir asi llega a mas gente, no se olviden de VOTAR y COMENTAR, gracias