Adicciones～ Wos

ᴘᴀꜱᴏ ᴏᴄʜᴏ

Paso ocho: Hicimos una lista de todas aquellas personas a quienes habíamos ofendido y estuvimos dispuestos a reparar el daño que les causamos.

No es fácil pedir perdón ¿Para quien lo es?, hay que sentirlo de corazón para que sea sincero y nos sane, me cuesta hacerlo, se que lastime y me lastime, ¿Cómo hacer para cumplir con este paso tan complicado cuando últimamente solo pienso en drogarme? No se lo cuento a Valentín, no quiero atomizarlo con mis mambos, el ya tiene demasiado con los suyos como para que yo le sume los míos que al lado de los de el no tienen sentido. 

Estuve toda la reunión comiéndome las uñas y la carnecita de mis dedos, Valentín quitaba la mano de mi boca constantemente mientras escuchábamos a nuestros compañeros, Juan no quitaba la vista de nosotros, atento a cada movimiento, seguro estaba sospechando, desde hacía semanas venía raro.

—Malena, tu turno - Juan llamó mi atención, me puse de pie intentando tragarme la ansiedad que me producía ese momento, aclaré mi garganta manteniendo el papel que tenía entre mis manos 

—A la primera persona que puse fue a mi padre, porque me alejé de el sin querer o intentar recuperar nuestra relación, la memoria de mi madre, porque me siento que traicioné todo lo que ella hubiera querido para mi y a mi misma, por no haberme cuidado como debía, por todavía sentirme - tomé aire, miré a Valentín un segundo y nuevamente volví mi atención a Juan —A mi misma por todavía, a veces, tener ganas de volver a drogarme 

—¿Nadie mas? - cuestionó Juan a lo cual negué doblando el papel que nos había dado para hacer nuestras reflexiones guardándolo en el bolsillo trasero de mi jean —¿Amigos?

—Mis amigas creen que rehabilitación es una estupidez, casi no tengo contacto con ellas 

—¿Algún novio? - volví a negar tomando asiento bajando mi mirada evitando que así me hiciera más preguntas —Valentín, tu turno - el castaño tomó el lugar enseguida sosteniendo su papel para empezar hablar, seguro iba a tartamudear, lo conocía, cada vez que se ponía nervioso lo hacía

—A mi padre, mis amigos, mi ex novia - quedó callado esperando que Juan hablara, este solo alzó una ceja abriendo sus manos como esperando que siguiera —A nadie más, solo eso

—¿Nos queres compartir algo mas? - negó varias veces y volvió a sentarse enrollando el papel en su mano bajando su mirada —Creo que fue muy productiva la charla de hoy, recuerden que cada martes seguiremos con los pasos que les comenté y les agradezco a todos por su predisposición, nos vemos el martes que viene

Como al final de cada reunión el murmullo era constante mientras nos preparábamos para salir de ahí, para mi era más liberador salir de ese lugar donde me sentía ahogada que concurrir todos los martes a ese infierno, me sirviera o no seguía sin poder tolerar las reuniones, odiaba sentirme vulnerable y tan expuesta. 

—Malena, podes quedarte un segundo - Juan llamó mi atención y aunque me sorprendió asentí, Valentín me hizo señas como que me esperaba afuera mientras el salón se vaciaba, resoplé cuando me pidió que me sentara en una de las sillas así poder hablar —Hay algo que no me estás contando

—No tengo que contarte nada Juan

—Mentir sabes que va en contra de lo que hablamos siempre - resoplé rodando los ojos pasando una mano por mi rostro frustrada al escucharlo —¿Hace cuanto que están saliendo con Valentín? - yo no era ninguna boba, sabía que tenía que ver con eso, las señales estaban claras

—Hace un par de meses - miré mis manos con algo de pena por eso, tampoco era que quería que pensara que me cagaba en todo lo que hablábamos ahí, aunque a veces si lo hiciera pero mentalmente —Ya se que no es recomendable tener trato estrecho con el resto de los adictos