#3. Akumas

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Marinette Dupain-Cheng

Félix y yo nos asomamos, estando escondidos detrás de un estante al escuchar una explosión y alguien llamándome por mi nombre. Resultó ser la "Princesa Fragancia" con ella estaba Reflekta y Lady Wifi.

-Diablos- murmuré viendo que sus trajes de villanos eran rojos, Scarlet Moth volvió.

-Vámonos, debemos de huir de aquí- susurró Félix tomándome de la mano, nos dirigió detrás de otro estante mientras las akumatizadas derribaban los demás estantes, gritando mi nombre.

-¿No saldrás? Bien, lo harás a las malas- dijo Rosita haciendo que abriera los ojos como platos.

-No respires- le avisé a Félix que asintió algo confundido.

El humo rosado llenó la biblioteca, así que aprovechando que casi no se podía ver nada, jalé a Félix corriendo hacia la salida, a lo lejos pude ver a Burbujeo con Cupido negro.

Esto es muy malo.

-¡Marinette! ¡Espera! ¿Adónde vas?- preguntó Félix siguiendome.

-Oh, es que tengo que ir al baño, ya regreso- él me miró como si estuviera loca, no lo dejé hablar y salí corriendo hacia el lugar dicho aunque no llegué ahí ya que Burbujeo iba por ese camino así que tuve que esconderme en una aula.

-Bien, es hora de salvar el día- le dije a Tikki que asintió en respuesta.

-¡Tikki Motas!- me transformé para luego salir sigilosamente, solté un suspiro aliviado cuando no miré a nadie cerca.

Busqué a los villanos pero al parecer se habían ido ya que la escuela estaba algo destruida, varias personas como Reflekta, en el cielo había otras más en burbujas. Mi yoyo empezó a sonar, era un mensaje de Chat Noir avisando que estaba afuera del museo peleando con algunos.

-Bien- empecé a saltar por los tejados pero cuando subí a un poste de luz escuché a alguien quejarse, la voz se me hizo conocida.

-Estás cosas deberían ser un crimen- me detuve viéndolo con una media sonrisa.

-¿Félix?- él elevó su mirada.

-Ladybug- contestó, su mirada mostraba pura confusión.

Al parecer Reflekta lo había alcanzado y estaba convertido.

-¿Sabes? Ya que te veo, eso me recuerda que no te he pedido disculpas apropiadas por aquel día que te quise besar sin tu consentimiento- recordé aquel día haciendo una mueca.

-Así que te pido mis más sinceras disculpas, en aquel tiempo la muerte de mi padre estaba reciente y bueno eso me afectó mucho, hice varias cosas de las que me arrepiento, en verdad perdón- mi cara se relajó y asentí.

-Está bien, dejemos eso en el...¡CUIDADO!- bajé inmediatamente tomándolo en mis brazos para subir al techo de una casa empezando a correr mientras que detrás venían Princesa Fragancia, Reflekta, Cupido Negro y Burbujeo.

Esquivaba sus ataques a la vez que sentía a Félix aferrarse con fuerza a mí.

-Jurame que no me vas a dejar caer- lo escuché decir y pude percatarme de algo de miedo en su voz.

-Lo juro- le respondí sonriendole amistosamente.

Me dirigí a la Torre Eiffel pensando que había perdido a los villanos pero estos llegaron segundos después.

-Félix, quédate detrás de mí y si ella suelta un perfume rosado no respires- él asintió mientras yo empezaba a girar mi yoyo tratando de dejar fuera de juego primero a Cupido Negro.

LiberaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora