Félix confirma su peor miedo en la velada llevada a cabo en la mansión de su tío, lo que lo lleva a tomar la decisión de quedarse en París sin que Gabriel supiera.
Planea todo meticulosamente, está totalmente seguro que en menos de lo pensado tendrá...
Me encuentro caminando por las calles de París ya que mi auto lo anda usando mi nana, además la casa de Marc me queda cerca, el cual es mi destino, ya que ahí quedamos en reunirnos para hacer el trabajo que nos dejó la maestra Bustier.
Supongo que Marinette ya debe de estar en casa de Alya, resulta que la supuesta reportera y su bobo novio actuaron maduramente, aceptando trabajar con Dupain-Cheng sin rechistar, así que no tuve que amenazar a nadie. Sentí mí teléfono vibrar, es una llamada de Marinette.
-¡Félix! Dios, que alegría que respondiste- sonreí de medio lado, ya sabe mí mala costumbre de andar en teléfono en vibración y dejarlo en cualquier lado pasando horas sin acordarme de su existencia.
-¿Qué pasó?- pregunté al percatarme de que usó un tono alarmado.
-Mira, estoy atrapada en una burbuja que está elevada a varios metros. No puedo transformarme porque todos me van a ver, necesito tu ayuda- me quedé de piedra.
¿Un akumatizado?
-¿Pero cómo pasó eso?- cuestioné temiendo por la seguridad de ella.
¿Y si se revienta esa maldita burbuja?
-Cuando llegué al departamento de Alya, unos minutos después toda su familia junto conmigo y Nino fuimos atrapados en unas burbujas. De donde estoy puedo ver que Shadow Moth hizo un sentimonstruo de Burbujeo y habló con Alya, no sé exactamente su plan, pero después de la charla de ambos ella empezó a gritar "Ladybug ayuda" Creo que es una trampa, Rena Rouge acaba de traicionarme- tomé una profunda respiración, por un momento pensé que mí tío había descubierto que Marinette es Ladybug pero si fuera así no hubiera dejado que la encerraran en una burbuja, conociendolo se enfrentaría a ella.
-¿Rena Rouge sabe tu identidad?- su respuesta negativa logró calmarme.
-Bien ¿Qué tengo que hacer?- no dejaré que Gabriel se salga con la suya.
-Necesito que vayas a mí casa y tomes el miraculous de Trixx...diablos, te llamaré luego- y sin darme tiempo a preguntar más colgó.
Tomé un taxi y en unos minutos llegué a la casa de Marinette.
-¡Félix! Bienvenido muchacho- el padre de Marinette me saludó desde el mostrador.
-Gracias señor, a Marinette se le olvidó algo y me mandó a buscarlo ¿Puedo subir a su habitación?- inventé rápidamente.
-Por supuesto- le sonreí y corrí a la habitación de la chica.
-¡Trixx! Te necesito- dije y los Kwamis salieron inmediatamente.
-¿Qué pasó chico?- preguntó acercándose a mí en compañia de los otros.
-Marinette está atrapada en una burbuja, me dijo que usara tu miraculous- él asintió, después de decirme la clave tomé el collar.
-Así que después de todo si serás mí portador- los otros Kwamis rodaron los ojos.
-Sí ¿Cómo me transformo?- él empezó a explicarme todo lo relacionado a su poder, casi me transformo pero recordé que supuestamente vine por algo que se le olvidó a Marinette.
-Bien, vamos- él se escondió en mí chaleco, me despedí de los otros y corrí escaleras abajo.
-Gracias señor Tom, nos vemos- salí apurado de ahí, yendo a esconderme a un lugar.
-Trixx, transformame- dije las palabras clave, el pequeño Kwami entró en el collar, cerré los ojos mientras mi ropa era cubierta por un traje de superhéroe.
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