Liberación

#26. Él o París

Foxred saltaba por los tejados con maestría y rapidez ya que estaba retrasado. Chat Noir le mandó un mensaje que decía que se encuentra mal y necesita hablar con él, el punto de reunión no lo conocía así que se encontraba siguiendo las indicaciones de su GPS.

Cuando se encontró en el lugar se extrañó de que fuera una casa deshabitada y totalmente abandonada al punto del derrumbe, lo peor es que los edificios aledaños estaban casi igual, no entendía porque Chat Noir escogió tan horrible lugar en vez del edificio que acostumbran a frecuentar.

-¿Chico gato?- preguntó abriendo la puerta cautelosamente.

-¿Dónde diablos estás?- murmuró caminando con cuidado porque sentía que el suelo se derrumbaría si pisaba mal.

-¿Chat?- en el lugar se filtraba poco la luz del sol, así que no sabía si la sombra que estaba de espaldas a él era su amigo.

-Foxy- el mencionado se giró con una media sonrisa en su rostro.

-¿Estás bien Chat Noir?- caminó con más confianza al confirmar que sí era su compañero.

-No estoy para nada bien Foxred- la sonrisa se borró y los ojos verdes del felino mostraron un sentimiento que Félix jamás pensó ver en él, odio.

-Pensé que éramos amigos pero fuí un iluso; jamás debí de confiar en tí maldito traidor- el de traje anaranjado se tensó.

-No- murmuró, Chat Noir los había visto.

-Sí, los miré como se besaban, como si sólo ustedes dos existieran ¡Te dije que la amaba y no te importó!- Foxred negó, tratando de buscar las palabras correctas para calmar a Chat Noir.

-Pero no importa, porque ambos pagarán por esto- la malicia brillaba en los ojos del chico gato y la sonrisa malvada que esbozó le dió una mala señal a Félix, nada bueno estaba por venir.

Sintió a alguien rodear su cuello con fuerza y lo elevaron del suelo, trató de soltarse porque se estaba ahogando.

-Por fin nos reencontramos Foxred, me has causado muchos problemas mocoso- reconoció esa voz, era Shadow Moth.

Así que determinado a salir de aquí con vida mordió el brazo del mayor que lo soltó de inmediato, cayó de pie al suelo y se alejó de ambos.

-¡Maldito mocoso!- no pudo evitar sonreír con altanería al ver el enojo del hombre.

-Chat Noir, dale una lección- observó al chico con tristeza, no podía creer que esto estuviera pasando, tenía la esperanza de que Chat Noir reaccionara mejor.

-¿Qué has hecho chico gato?- murmuró, habían pérdido a Chat Noir por no ser sinceros con él.

El joven no respondió y se puso en posición de ataque, no esperó mucho para empezar a lanzar golpes que Félix esquivaba ágilmente.

-Acabaré contigo- Félix no quería lastimarlo por eso lo único que hacia era esquivar los ataques que se volvían más rápidos y certeros con el pasar de los segundos.

-Chat Noir por favor...

-Cállate, no quiero escuchar nada- el chico fuera de sí le dió un fuerte golpe en el estómago con el báculo que lo lanzó a la pared, está se quebró y le cayó encima al de traje anaranjado.

-Bien hecho hijo- lo felicitó Shadow Moth acercándose a los escombros, esperaba encontrar a un Foxred debilitado debajo de ellos pero antes de poder buscar, varios clones del joven llenaron la ya no tan oscura habitación, gracias a que la pared se derrumbó ahora se filtraba la luz del sol.

-Maldita sea- jamás debió subestimar a ese maldito mocoso.

-No te preocupes padre, no saldrá de aquí- ambos se pusieron a golpear a las ilusiones que se movían velozmente dificultando así que puedan desaparecerlas tan fácil.