#22. Se acabó

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Chloé caminaba apresuradamente para dirigirse a la cafetería en donde sabía que sus amigos la estarían esperando, sonrió al pensar en cuanto había cambiado su vida últimamente y estaba más que satisfecha con ello.

-Fijate enana- se detuvo al ver que Kim empujó a Alix, pensó que estaban jugando entre ellos como normalmente hacían y siguió su camino.

-Deja de estar jodiendo Kim, ve a besar el suelo que pisa tu ama y déjame en paz- Chloé negó con la cabeza, esos dos son un caso especial.

-No pensé que fueras igual de patética que Marinette para llegar al punto de decir calumnias de Lila- la rubia se detuvo de golpe al escuchar eso.

-Es la verdad, Lila no es la santa paloma que ustedes creen, admito que me cegué y me arrepiento porque perdí a una amiga tan maravillosa como lo es Marinette- Kim soltó una carcajada.

-Entonces ve detrás de ella ¿O qué? ¿Tu tan maravillosa amiga no te perdonó? Bueno que se puede esperar de alguien que es amiga de personas como Chloé y Félix- la rubia apretó la mandíbula sintiendo el enojo fluir.

-¿Qué maldito problema tienes con nosotros idiota? ¿Por qué hablas a nuestras espaldas? Eres un maldito cobarde al igual que Lila- intervino la rubia dejando sorprendidos a ambos ya que no se habían percatado de su presencia.

-No perderé mi tiempo en esto- Kim rodó los ojos y se fue dejando a ambas solas.

Alix incómoda con la situación iba a irse pero Chloé la tomó de la muñeca.

-Espera ¿Tú sabes que todo lo que Lila dice es mentira?- la de baja estatura asintió.

-Sí, sé que Lila quería ponernos a todos en contra de Marinette y me alegra que no lo halla logrado completamente- la rubia asintió con una leve sonrisa.

-Vamos- Alix frunció el ceño, le parecía curiosa la actitud tan ¿Amable? Sí, sorprendentemente esa era la palabra con la que describiría la actitud de Chloé.

La chica vió alarmada como la rubia la dirigió a la mesa en la que se sienta Marinette y todos sus amigos, ya esperaba algún trato tosco o comentario sarcástico pero sólo fue observada con curiosidad por algunos, por otros como Félix, Marc y Nathaniel (que hablaban entre ellos sin percatarse de su alrededor) fue ignorada.

-Bueno, tenemos a una nueva integrante- avisó Chloé capturando la atención de todas las personas en la mesa.

-Alix- Marinette le sonrió amablemente y la chica se llenó de valor, no había querido acercarse a Marinette porque sentía que no merecía ser perdonada después de haberla abandonado por una mentira.

-Hola, yo...disculpame, fuí una tonta por no creer en tí, eras mi amiga y aún así le creí a alguien con la que ni hablaba diariamente- la azabache suspiró, de todos su grupo de amigas Alix siempre fue de las que le confiaría la vida y en verdad la extrañaba.

-¿Cuándo lo descubriste?- Alix se encogió de hombros.

-Como hace dos semanas- respondió dejando a todos sorprendidos.

-Les advertí a los demás pero claramente no me creerán hasta que lo vean con sus propios ojos- la de dos coletas asintió.

-Ok, bienvenida a nuestro pequeño grupo- la chica abrió los ojos a tope sin poder creerse lo que escuchó.

-¿De verdad?- la azabache asintió viendo a cada uno de sus amigos.

-¿Todos están de acuerdo verdad?- todos respondieron con un asentimiento de cabeza.

-Una advertencia, traicionas a Marinette y juro que la pasarás mal- Alix observó a Félix sin saber que decir, la mirada del rubio la intimidó un poco pero jamás lo iba admitir.

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