Dos caminos, un destino

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Mamá se miraba hermosa,  y con toda esa belleza abrió la puerta a nuestros invitados.  Brayni se miraba muy elegante, también Lori, pero me sorprendí al ver a la señora Luthor;  traía un vestido negro,  con un escote que hacía lucir su piel blanca aún más blanca, con sus labios pintados con labial rojo y una mirada demasiado sensual,  tanto que pude ver a mi mamá dirigirle una mirada de complicidad.

Presente a la señora Luthor con mi madre,  y ambas encantadas de conocerse. Empezaron a charlar, mientras Lori, Brayni y yo hablabamos de otras cosas. (Cosas de adolescentes). Todo mientras los únicos dos meseros quense habían quedado servían la cena.

Pasaron alrededor de 15 minutos cuando todo estaba servido. Mi madre me sorprendió cuando le ofreció la mano a la señora Luthor para acompañarla a la mesa.  lori se dio cuenta e hizo un comentario a Brayni,  comentario que no pude escuchar porque fue practicamente un susurro.

Nos sentamos para cenar;  ellas seguían charlando,  se miraban tan bien juntas. Es como si a mi madre le gustara lansenora Luthor y ella le correspondiera el coqueteo. Terminamos de cenar,  y Brayni se levantó de su asiento,  se dirigió a mi madre pero ella no podía dejar de ver a la señora Luthor. Esta vez habló más fuerte, hasta que ambas pusieron atención varón.

B: Señora Danvers,  le agradezco por esta hermosa velada, pero estamos, más bien, estoy aquí por una única razón. Estoy enamorado de su hija y esta noche, con presencia de las mujeres que más amo en mi vida (se dirige a su madre y a su hermana)  le pido permiso para que su hija Nia sea mi novia. 

Mi madre se sorprendió y mirando a la señora Luthor (quien le dirigió una sonrisa)  aceptó.

K: Brayni,  sé que mi hija está en buenas manos porque sé que tu madre los ha criado con buenos valores y modales, por lo que no tengo ningún problema en que ustedes dos inicien una relación.

Les seré sincera, nunca pensé que mi madre aceptara tan rápido y tan fácil. Pero me siento tan feliz que Brayni sea ahora mi novio de permiso, permiso de nuestas madres. 

La señora Luthor le dio su tarjeta a mi madre,  y ambas empezaron a tratarse con más confianza pero no esa confianza de ser consuegras ,sino algo más,  y todos los presentes (hasta los meseros)  se dieron cuenta.