Me congelé al verlos ahí. Todos, pero todos se quedaron viéndome. Visión, Steve, mi hermana y Wanda.
-Cariño, ¿dónde estabas? - Dijo mi hermana. Yo todavía tenía la mano entrelazada con la de Clint.
-Primero, qué te importa. Y segundo, ¿cuántas veces te he dicho que me dejes de llamar así? -Dije y empecé a subir las escaleras con Clint.
Entramos a mi habitación y empecé a buscar el cd.
-¿No fuiste algo dura con tu hermana? - Dijo Clint sonriéndome.
-Mi hermana, ¿La que me deja en la escuela porque tiene cosas más importantes que hacer con sus amigos y me toca irme caminando sola a casa? ¿La que trae chicas y chicos a la casa para follar y tengo que escuchar sus gritos? ¿La que toma en cuenta a todos menos a mí? ¿La que me habla sólo para pedirme favores? No. No lo creo.
-Ojalá tuviera una hermana como tú. - Sonreí.
-Mi hermana es buena chica... Sólo que se comporta como una imbécil. Al igual que sus amigos.
-Cuando estés en esas situaciones incómodas de escuchar gritos - Empieza a reír y yo lo aniquilo con la mirada. - Deberías llamarme y hacemos cualquier cosa como ir a cine o a comer. Lo que sea.
-¿Dónde has estado? ¡Siempre he necesitado eso! - Dije y el empezó a reír. Encontré el cd de Simple Plan y se lo entregué.
-Natasha, definitivamente eres un ángel. - Dijo bromeando.
-Lo sé Clint, lo sé.
-Ya me tengo que ir, mis padres deben estar preocupados.
-Aw, pero si eres todo un chico consentido de papi. - Dije riendo.
-Estoy seguro que tú también lo eres. - Dijo y mi sonrisa se esfumó. Maldita sea, sí que le había dado a mi punto débil. Pero no lo culpo, él no sabía nada de eso. Me alejé de él y me senté en mi cama.
-Era... - Dije a lo que él entendió y se sentó a mi lado.
-Lo siento mucho Nat... Yo no tenía idea. - Dijo y me abrazó. Yo le respondí el abrazo enseguida.
-No te preocupes, no es tu culpa.
-¿Sólo viven aquí tu hermana y tú?
-No, vivimos con mi mamá pero ella casi nunca está en casa. Es doctora, ya sabes cómo es...
-Me imagino las fiestas que hará tu hermana.
-No tienes idea. Es horrible.
Luego de hablar un poco más, acompañé a Clint hasta la puerta. Ellos seguían ahí. Sólo los ignoré y le di un beso en la mejilla a Clint despidiéndome, sin antes darle mi número. Iba a subir las escaleras cuando mi hermana me llamó.
Mierda, ¿ahora qué quería?
-¿Qué quieres Yelena? - Dije seca.
-¿Me puedes explicar quién mierda era ese y por qué subió a tu habitación? - Dijo con un tono de voz que me molestó muchísimo. Así que decidí jugar con ella.
-¿Yo no puedo tener una noche de diversión como las tuyas, hermanita? - Yelena se levantó del sillón con rabia y me cogió de la muñeca con fuerza.
-¿QUÉ MIERDA ACABAS DE DECIR? - Intenté soltarme pero ella era mucho más fuerte que yo.
-Déjala, Yelena. - Dijo Wanda, empujándola fuerte.
-¿Qué te pasa Wanda? ¿La vas a defender ahora? - Dijo Yelena acercándose a ella.
-Está más que claro que Natasha sólo estaba bromeando. - Dijo seria.
-Espero que sólo haya sido una broma. - Dijo acercándose a mí. - O juro que...
-¿Qué Yelena? ¿Qué me vas a hacer? - Dije acercándome peligrosamente a ella y mirándola fijamente.
-Voy a decirle a mamá que su hija es una... - La abofetee con todas mis fuerzas. Sí, lo hice. ¿Quién se cree para hablarme así? Las lágrimas no tardaron en aparecer, odio ser tan débil. Lo odio.
Wanda me agarró del brazo y me llevó afuera. Yo sólo me deje llevar, estaba llorando como una estúpida. ¿Qué le pasa a Yelena? ¿Por qué es así? Sólo miraba abajo mientras las lágrimas caían. Si hubiera sido otro momento, estaría feliz de estar caminando de la mano con Wanda. Pero no, eso era lo último que podía pensar. Wanda y yo nos sentamos en una banca. No era capaz de mirarla, no era capaz de decir nada.
-Tu hermana fue una imbécil. - Dijo y se acercó a mí - Ven, pequeña... - Wanda, ¿me estaba abrazando? ¿Y me llamó pequeña? Sólo quería olvidarme de todo. Me escondí en su pecho mientras lloraba. - Tu hermana no lo dijo en verdad, sólo fue un impulso. - Dijo mientras sobaba mi cabello.
-Ya no sé ni en qué creer. - Dije alejándome. - Simplemente todo es tan confuso ahora.
-¿Por qué?
-A veces extraño como eran las cosas antes.
-Nada nunca será como antes. Pero puedes hacer un mejor presente. -Dijo sonriéndome. Amaba ese lado de Wanda.
-Pues deberías decirme como. - Dije sonriendo.
-Puedes empezar por eso. Sonreír. Te ves mucho más hermosa cuando lo haces.
-¿Quién eres y qué hiciste Wanda? -Dije y ella se empezó a reír.
-Te extrañaba. -Dijo, así, sin más.
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Eres mía, rubia; Scarletwidow [ACTUALIZACIONES LENTAS]
FanfictionNatasha Romanoff y Wanda Maximoff. No tenían muchas cosas en común, sus edades eran distintas, sus maneras de caminar no coincidían y mucho menos la estatura. Nunca pensaban igual, tenían ideas muy diferentes y actitudes contrarias. Wanda era dueña...