Zelda entró en su habitación. Se sentó en su silla, delante del tocador. Link entró poco después.
_ Princesa…_ le dijo Link, deprimido_ No quería empujarte, en serio. Solo fue un acto reflejo.
Ella no contestó. Siguió viendo hacia su reflejo del espejo.
_ Lo que menos quiero es hacerte daño, querida. Si estaba peleando con Anker, era para defenderte. Él se me echó encima cuando se enteró de nuestra relación. ¿Quién sabe que podría llegar a hacerte a ti?
La joven no dijo nada. Agarró su peine y se lo pasó a Link.
_ Aún recuerdo_ dijo el rubio en voz baja_ La primera vez que te hice enojar._ comenzó a cepillar el pelo de su princesa con cuidado_ Llevaba poco tiempo en el castillo, era mi segundo día. Teníamos 13 años, tú cumplidos de hacía muy poco. Iba a presentarme ante ti, cuando me tropecé y caí en un pequeño charco de barro. Aún recuerdo tu expresión cuando te salpicó. Comenzaste a llamarme cosas bastante feas.
Link sonrió al ver que Zelda dibujaba una sonrisa en su rostro.
_ Ese fue el día en que te conocí. Después de salpicarte me sentí fatal, y te olvidaste por completo de tu vestido y viniste a ayudarme a levantarme. Recuerdo que te pedí perdón siete veces. Me dijiste que un caballero puede pedir perdón, pero no arrastrarse por esa persona. Después de ese día nos hicimos muy buenos amigos.
_ Y mira como estamos ahora_ continuó Zelda_ Esa pequeña mocosa nunca se imaginaría que acabaría siendo raptada por su amigo, y después se enamoraría de él. Son dulces recuerdos los que pasé a tu lado.
Link soltó el suave pelo de su pareja.
_ Y habrá más recuerdos juntos. Tú eres mi princesa, y no permitiré que te hieran nunca.
_ Eso es muy bonito._ sonrió.
_ Zelda. Sé que es muy repentino lo que voy a decir, pero con Anker pululando por ahí e intentando matarme. ¿Qué mejor momento que este?_ se acercó a Zelda, abrazándola mientras ella aún seguía sentada. Acercó sus labios a la oreja de la joven y susurró_ ¿Te casarías conmigo?
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_ Juro que lo mataré.
Anker hizo una mueca de dolor cuando el guardia que lo estaba sanando le tocó donde tenía un moratón.
_ Anker. Debes calmarte_ le dijo_ Link y la princesa son pareja. ¿Y qué? Las cosas pasan, joven. Todos tenemos desengaños amorosos, y no intentamos matar al otro.
_ Pero este se lo merece. Le haré daño, le dejaré sufriendo envuelto en su sangre. Así verá lo que estoy sufriendo yo.
El guardia se asustó.
_ Eso es bastante exagerado.
_ Nada es exagerado. No debió traicionarme, y además, ya me dijo cosas hirientes queriendo. No se lo perdonaré.
Comenzó a reírse mientras el guardia terminaba. Después lo dejaron solo.
_ Supongo que tendré que utilizar mi última idea._ se dijo_ No pensé que tendría que usarla
Se levantó de la silla donde estaba sentado y fue hacia su habitación. Rebuscó entre el equipaje de Link.
_ Tiene que estar en alguna parte. Vamos…
Agarró algo del equipaje de Link y comenzó a reírse. Sacó el gancho fuera.
_ Nadie me creerá al principio…_ susurró_ Pero unos guardias me vieron hablar contigo, el encapuchado. Este gancho es una de las pruebas que necesito, ya que dejaste una marca en un árbol al huir. Pero la capucha sería lo necesario para demostrar que lo eres realmente.
Quitó la ropa del armario de Link, buscando desesperadamente algo.
_ Me imaginaba que no ibas a ser tan estúpido, pero sé bien que hacer.
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No sabían cuánto tiempo había trascurrido desde que se abrazaran. Link aún recordaba la palabra más bonita que había escuchado en su vida, dicha por Zelda unos cuantos minutos atrás.
“Sí”
El silencio del momento hablaba por ellos. Se sentían felices, uno en los brazos del otro. Nada ni nadie podría interrumpir ese momento.
O sí.
La puerta de la habitación se abrió, y unos guardias apartaron a Link de Zelda.
_ ¿¡Qué está pasando!?_ Le preguntó enfadado Link un guardia, mientras le sujetaban.
_ Sabemos cuál es tu verdadera identidad, encapuchado. Será mejor que bajes sin oponerte.
Link sintió como se le heló la sangre al oír aquello. Podía ver a su recién prometida intentando apartarse de los guardias que le impedían el paso.
_ ¡Os estáis equivocando! ¡No soy el encapuchado!
_ Anker nos ha contado todo. Su explicación es razonable, así que no te resistas, Encapuchado.
_ Le digo que yo no soy…
No pudo terminar la frase. El guardia le golpeó en la nuca, haciendo que perdiese el conocimiento. Lo último que pudo oír era el grito de Zelda llamándolo.
Una hora después despertó debido a un cubo con agua fría que le echaran encima.
_Veo que estás despierto.
Al oír esa voz intentó con todas sus fuerzas zafarse de las cadenas que le agarraban los brazos al suelo.
_ Eres el peor amigo del mundo_ le dijo Link, viéndolo con ferocidad.
_ Empezaste tú la guerra, amigo._ Anker le sonrió, acercándose a él_ No te gustan las cadenas, pero no te queda más opción que aguantarte. Mañana es tu juicio, y sé que tienes todas las de perder.
_ ¿Dónde está Zelda?
_ ¿Mi princesa? Está arriba, llorando. Quería bajar pero no se lo hemos permitido, ya que eres peligroso.
_ Aquí el único que es peligroso eres tú.
Anker le dio con su puño en la mejilla del joven encadenado.
_ Puede que sí, pero un hombre puede hacer cualquier cosa por amor, ¿no?
Link sintió que todo su cuerpo ardía de rabia. Quería destrozar a ese hombre que se encontraba delante de él.
_ Te soltarán las cadenas para que puedas pulular por la celda. Bueno, yo debo irme.
_ ¿Cómo…?_ escupió sangre_ ¿Cómo lo supiste?
_ ¿Te crees que la relación cercana a la princesa era creíble mientras que hacía cinco años que no os vierais? Sé que el rey te despidiera y te fuiste enfadado. No deberías ser cordial con la princesa, aunque al ser el secuestrador, y al ella desgraciadamente enamorarse, ahí sí podría encajar.
Anker salió de la celda y cerró la puerta. Se giró hacia Link, con una mirada seria y sin arrogancia.
_ Nunca engañes a tus amigos, Link. Nunca.
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trifuerza corrupta
Fanfiction(Zelink) Debido a un acontecimiento de hace cinco años, Link busca venganza hacia la familia real de Hyrule, incluyendo a Zelda, pero en lo que no cuenta es en los antiguos sentimientos que volverán a nacer tras volver a verla