TREASURE - Please Don't Leave Me Now

18

Doyoung caminaba cómodamente por la calle, acababa de salir de la escuela y quería llegar rápido a casa así que se apresuró un poco para no tomar mucho tiempo caminando.

Yedam se había ofrecido a llevarlo pero sabía que sería una distracción para el mayor ya que siempre le proponía pasear en su bicicleta por el pueblo o por algún lugar que él conociera, agradecía eso pero no quería que Yedam se metiera en más problemas con su padre por estar con el, sabía que el no los provocaba del todo porque realmente el problema era del señor Bang, pero también sabía que podía evitar algunas cosas. Ya saldría con el mayor en otras ocasiones en donde nadie los moleste ni haya consecuencias por estar juntos.

- ¡Doyoung! - Escuchó a sus espaldas y se quedó parado, sabía que se trataba de Junghwan. - No me esperaste para ir a casa.

- Tenía prisa. - Mintió y no lo miró.

- Parece que tratas de evitarme. - Soltó una risa y Doyoung solo suspiró, lo había evitado para no discutir de nuevo con el.

- Solo he estado ocupado. - Empezó a caminar sin esperar alguna reacción de su amigo.

- Te he visto con Bang, claramente no estás tan ocupado. - Dijo en tono molesto, cosa que notó Doyoung.

- Justo cuando tengo tiempo libre estoy con él. - Contestó de golpe.

- Wow. - Murmuró y dejo de caminar ocasionando que el pelirrojo también lo hiciera. - Sinceramente no sé que le ves, digo, es gay y todo eso pero no le veo otra cosa que resalte en el.

- Eso es porque te limitas a lo que dices los demás, hablas por las opiniones de otros y no por las tuyas, Junghwan. - Volteó a verlo un tanto molesto.

- ¿Cuál es tu problema?

- No. ¿Cuál es TU problema? - Se acercó señalando, se podía notar su claro enojo en sus ojos. - Te la pasas hablando siempre del mismo tema, que Yedam es esto, que Yedam lo otro. Me tienes cansado y molesto con todo lo que dices sobre el, ya basta y métete en tu propia vida.

- Es que no entiendes que lo quiero lejos de ti, no quiero que te contagie de sus cosas y los demás te lastimen. - Alzó la voz tratando de justificarse.

- Ay, por favor. Es más probable que tú me contagies de tu estupidez y que me lastimes, como lo estas haciendo ahora. - Recibió un empujón por parte del menor.

- No soy estúpido solo te cuido. - Doyoung solo le devolvió el empujón con más fuerza, el menor empezaba a cansarlo.

- ¡Yo me sé cuidar sólo! - Gritó con enojo.

- No, no lo sabes. Te conozco, Doyoung. Vas por el camino confiando en todo el mundo, sin juzgar y siendo un iluso y estúpido con cualquiera que te hablé bonito o sea amable contigo. Te encariñas rápido con las personas pero sufres si te tratan un poco mal o diferente a los demás días, como con Haruto, hace días no te contestó dos mensajes porque según tu el estaba enojado, además de que te haces dependiente de las personas que están a tu alrededor y apuesto que ya lo eres con Yedam. - Dijo alzando la voz con coraje. - Tengo miedo de que te haga daño, de la forma que sea, porque sé que no puedes cuidarte sólo, eres incapaz de hacerlo, Doyoung.

Se relajo mirando al mayor cabizbajo, Doyoung no quería mirarlo, en su lugar, tenía los ojos en dirección al suelo, tomando sus lentes para que no cayeran y no sabía que hacer al sentir sus ojos húmedos.

- Eres un mal amigo. - Susurró, pero fue lo suficientemente alto para que Junghwan lo escuchará.

- Solo quiero protegerte. - Intentó tocar el hombro del pelirrojo pero el golpeó su brazo. - Doyoung, somos mejores amigos.

- No, no soy el mejor amigo de alguien que me llama inútil e incapaz. - Al ver qué el menor seguía insistiendo con acercarse, el solo opto por la primera opción que se le vino a la mente, golpearlo.

Doyoung nunca había sido alguien violento pero era la forma de defenderse cuando sabía que iba perdiendo. Junghwan solo sintió su mejilla arder por el golpe del mayor, el menor lo empujó e hizo que Doyoung cayera y lastimara sus manos.

- Yo no quiero herirte, Doyoung. Sabes que no soy de ese tipo de personas. - Se agachó para estar a su altura y siguió. - Pero no me tienes alternativa, o te alejas de Yedam por las buenas o veré qué hacer para que lo haga por las malas. Haré que vuelvas a mí, Doyoung.

- No me voy a alejar de él. - Contestó con la voz rota mientras contenía las lágrimas.

- Bien. - Se levantó de ahí y tomo los lentes del mayor tarándolos al suelo llegando a que se quebrara un lente. - Nos vemos luego.

Doyoung no tuvo el valor de verlo irse así que solo tuvo la miraba baja mientras esperaba unos minutos para ver qué hacía. Después de esos minutos, tomó sus lentes, fue cuidadoso con sus manos y se levantó para después tomar su celular y llamar a la única persona con quién se sentía bien.

» ¿Doyoung? - Yedam respondió confundido después de unos segundos.

- Hola, Yedam. Me preguntaba si podríamos vernos. - Trató de que su voz no sonara tan mal para no asustar al mayor pero no lo consiguió.

» ¿Estás bien? - Se preocupó al instante al no escuchar el tono animado del menor de todos los días.

- No lo sé sinceramente. - Aguantó cualquier lágrima y rió un poco para aligerar el ambiente.

» Envíame tu ubicación, voy por ti. - El pelirrojo sintió aún sabiendo que Yedam no iba a verlo.

- Gracias, Yedam. - Agradeció con un tono triste.

» No hay de que, Dobby. - Después de eso, Doyoung colgó y mando su ubicación.

Se sentó en la acera y espero a Yedam mientras pensaba en Junghwan y en como había dejando de ser su tímido amigo que apenas podía hablar con el sin problemas.

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~ elpiruetaslocas