¡CORRE!

127 11 28
                                    

Me acuerdo perfectamente de esta noche de Julio. Hacía frío en mi habitación, y yo trataba de dormir sin lograrlo. Era medianoche y yo tenía clases por la mañana. Estaba cansado, lo recuerdo muy bien. Sólo quería cerrar mis ojos y empezar a soñar. Se me fue imposible, esta noche no pegué un ojo. Eso es porque, más o menos a la una de la madrugada, empezaron a escucharse muchos ruidos en la calle y después de unos minutos muy cortos, se escuchó un disparo. Me escondí bajo las sábanas, no quería escuchar eso otra vez. Los homicidios eran desafortunadamente bastante frecuentes por el barrio pero nadie decía nada, nunca. Los policías lo sabían pero tenían mucho miedo. El ajuste de cuentas fue la principal causa de muerte aquí. Como mi padre, que estaba en prisión, tenía malas relaciones y estaba involucrado en asuntos extraños, vivía con el temor constante de que mi madre y yo fuéramos atacados. Sólo tenía nueve años, no entendía bien qué cosa tan horrible podía hacer mi padre para que quisieran matarlo, sin saber que él también mataba personas. Las pandillas eran así, en nuestro barrio. « O te callas, o te mato. Así funciona aquí. », me explicó mi padre hace dos años.

Esta noche, la puerta de mi habitación se abrió lentamente y mi madre se acercó a mí mientras que seguía con las sábanas sobre la cabeza. Solamente retiro las sábanas, y me miró directo a los ojos. En los suyos no vi miedo, paro algo que nunca más he visto en mi vida. Estaba preparada, sabía lo que iba a suceder y lo que tenía que hacer. Entonces, en un tono de voz seguro y dulce, murmuró :

- Nos tenemos que ir.

Yo también entendí. Iban a venir, nos estaban buscando. Lo habían dicho, que no nos dejarían tranquilos. Se lo habían dicho a mis padres. Pero esta noche, sólo esta noche, nos fuimos, sabiendo que nos buscarían.

A mi madre la mataron una semana después, cuando iba de compras, y a mí me dejaron a salvo sólo para que pueda arreglar todo lo que hizo mi padre. Tenía nueve años.

Hoy mi vida cambió, logré hacerla un poco mejor. Sigo viviendo en México pero ahora Tengo un apartamento en el centro. Estoy estudiando negocios, soy el primero de mi familia en estudiar. Me gusta pensar que mi madre estaría orgullosa de mí. Mi novia me repite que también lo está. Bia viene de Brasil. Allí también, conocen las guerras entre pandillas. Afortunadamente, ella no fue demasiado afectada por eso. Su familia vivía en una casa, en una ciudad cerca de Brasilia. Ahora viven en México porque su madre obtuvo trabajo aquí. Así la conocí, su madre era mi profesora. Sé que es extraño pero así es. Ahora estoy muy feliz con ella y trato de serlo en toda mi vida.

 Ahora estoy muy feliz con ella y trato de serlo en toda mi vida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Esta noche soñé con algo malo, lo sé y lo siento. El problema es que no recuerdo qué es. Siento que debo tener cuidado, pero sigo preguntándome por qué.
Tomo mi café sólo porque Bia sigue durmiendo, y trato de recordar mi sueño, aunque sé que mientras más intente hacerlo, menos voy a lograrlo. Así funcionan los sueños, te llegan así en la memoria y si no te acuerdas de ellos, no lo harás nunca.

Bia llega en el living y me da un corto beso en la frente cuando me alcanza.

- Buenos días mi amor.

One Shots →Disney Bia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora