Durante las siguientes semanas Hyunjin y Felix se encontraban todos los días, pasaban la mayor parte del tiempo juntos haciendo cualquier cosa. Aunque la mayoría de veces ayudaban a la madre del mayor a sembrar y recoger la cosecha.
El menor estaba muy feliz de estar en ese lugar, nunca se había sentido de esa forma. Fue cuando Felix descubrió que un hogar no siempre es donde vives, un hogar también pueden ser personas.
Por que un hogar es donde te sientes feliz querido, feliz y seguro. Así es como Felix se sentía estando con Hyunjin. La palabra hogar había cobrado sentido para el pecoso en esas semanas que había pasado junto al mayor.
—Parece que las nubes están cubriendo el cielo— comentó el más alto mirando hacia este.
El cielo estaba oscuro y parecía que iba a llover, sonó un fuerte ruido y eso asustó a Felix, quien rápidamente se agarró al brazo de Hyunjin. Aquel fuerte sonido le hacía recordar a aquel día cuando en entró en este lugar.
Tenía miedo, siempre pensaba ¿que pasaría si en cualquier momento saliera de aquí al igual que entro? Felix no quería dejar su hogar.
—¿Tienes miedo? tranquilo, Felix, estoy aquí— dijo el mayor mientras acariciaba la mano del contrario —tal vez podríamos ir a tu casa, parece que va a llover y la mía queda más lejos, si quieres claro. Si no puedo llevarte y luego irme a casa— comentaba Hyunjin demasiado nervioso, pues no quería hacer sentir incómodo al menor.
Felix negó con su cabeza mientras sonreía de forma leve, tomó la mano del contrario suavemente y entrelazó sus dedos.
—Quédate conmigo, por favor— respondió formando un leve puchero en sus labios.
Hyunjin no podía resistirse a eso, además él lo que realmente quería era quedarse con Felix. Luego de unos minutos al fin llegaron a casa de este, por suerte no había empezado a llover.
Hacía mucho frío ese día.
—Te traeré un pijama para que estés cómodo— dijo Felix y se dirigió a buscar los pijamas, uno para él y otro para el mayor.
Unos minutos más tarde volvió y le dio este al chico. Sin pensarlo mucho comenzó a desnudarse, pues quería ponerse rápidamente el pijama ya que tenía frío. Hasta que sintió una mirada sobre él.
Felix se giró de forma lenta para encontrarse a Hyunjin mirándole. Se sintió muy avergonzado por eso y pudo notar como el calor subía a sus mejillas, por lo que se giró de nuevo, pero esta vez muy rápidamente.
—¿Sabes que eres adorable?— dijo el mayor de la nada, cosa que dejó a Felix sin palabras y con el corazón a mil, si es que ya no lo estaba antes.
¿que te está pasando, Felix? se preguntó el menor a si mismo.
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slumber ; hyunlix
Randomslumber : into the book Felix iba todos los sábados a aquella biblioteca donde podía encontrar libros de segunda mano, le fascinaba la idea de poder leer un libro que hubiera estado en manos de alguna otra persona. Muchas veces cuando se encontrab...