AMANTES DEL DESIERTO [LS AP]

CAPÍTULO 7

– Ya hay conjeturas sobre el señor Tomlinson. Se dice que el bebé se parece mucho a ti.

–¿Tan pronto? – preguntó en un susurro Harry.

Los chismosos del palacio eran más eficientes que cualquier red social de moda.

Debería haberlo esperado, pero se había convencido a sí mismo de que tendría tiempo. Se enfrentaba a un escándalo público cuando la verdad sobre la identidad de Louis y Alex fuese conocida por el público, pero no lo lamentaba. ¿Qué podía haber hecho más que llevarlos a Ankara?

–Cuando el ministro del Interior supo que venías con un acompañante...

–Inventó una razón para ir a recibirme al aeropuerto –lo interrumpió Harry.

El ministro del Interior había sido amigo de su padre y solo estaba en esperaba de que el nuevo rey diese un paso en falso.

Harry no se engañaba a sí mismo. Sabía que los poderosos hombres que formaban el círculo íntimo de su padre tenían esperanzas de que hiciese algo mal y que su hermano volviese a Ankara para ocupar el trono.

Pero eso no iba a pasar.

Las razones de su hermano para rechazar la corona eran privadas. Volvería a Ankara algún día, pero solo de visita. Solo ellos sabían la razón de su renuncia y Harry lo quería demasiado como para traicionar su secreto. Ni siquiera para frenar las maquinaciones de los que intentaban desestabilizar su reinado.

Estaba seguro de que podría lidiar con ellos. La vida lo había hecho más duro y decidido que aquellos que esperaban que fracasase. En cuanto a ser subestimado... ya aprenderían. Nunca había sido suficiente para su padre, pero estaba decidido a ser el gobernante que Ankara necesitaba.

–Si te sirve de consuelo, hemos descubierto quién ha filtrado la noticia. Se trata de un empleado del departamento administrativo.

–¿Lo has despedido?

–No, le he ofrecido otro puesto coordinando la campaña de inmunización infantil en las provincias fronterizas. Así tendrá una oportunidad de usar su talento para diseminar información.

Harry esbozó una sonrisa.

–Solo tú puedes convertir un problema en una oportunidad.

Su amigo era un experto en hacer eso, posiblemente porque la vida tampoco no se lo había puesto fácil.

–Para eso me pagas.

Él hubiera despedido al empleado sin pensarlo dos veces porque, como su padre solía decir, era demasiado impulsivo. Aunque había cambiado con el paso de los años. En el ejército había aprendido a pensar estratégicamente, pero a veces su deseo de acelerar los cambios hacía que tomase decisiones apresuradas. Como ir a territorio de bandidos con un solo guardaespaldas.

Harry se pasó una mano por el cuello.

–La noticia está contenida por el momento –siguió Liam–. Nadie sabe quién es el señor Tomlinson, solo que ha venido de visita a Ankara con su hijo.

–Quiero que siga siendo así durante el tiempo que sea posible.

El tiempo que necesitaba para convencer a Louis de que debía casarse con él.

–Nadie debe saber cómo nos conocimos.

–Por supuesto. Admitir que tienes un hijo con un hombre extranjero y peor aún, que fuiste secuestrado en tu propio país sería...

–Lo de tener un hijo con un hombre no me preocupa, sigue siendo mi hijo, sangre de mi sangre y tienen que aceptarlo. Lo que no quiero es que Louis sea avergonzado y el mundo entero lo señale, tampoco quiero que sepan cómo concebimos a nuestro hijo.