Capítulo 15

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La presión pareciera sentirse en sus oídos, nada escuchaba con claridad más que los pasos que percibía acercándose a ella.

El sudor la empapaba de la frente, pro su cuerpo helaba.

-¿Quién está ahí? -Giró con debilidad al intentar sentarse, pero resbalaron sus manos sobre el suelo para terminar de regreso al charco de su propia sangre -¿Quién.....Quién eres?

-Estás muriendo -Escuchó con claridad la voz de una desconocida mujer.

Levantó su mirada para ver la hermosa silueta de un ángel contra la luz de arriba lo que la impedía visualizar.

-¿Quién.....-La ojiverde calló inconsciente de nuevo.

Siendo el fin de la meditación de la castaña alada quién usó lo último que quedaba de los polvos dorados de Sandman.

Abrió sus ojos sentada ahí en medio de su habitación, sabiendo que Merida y Elsa estaban en peligro de muerte en aquel sótano donde se escondían ellas y sus dueños.

Y sólo había de necesitar un poco de tiempo para ayudar a sus ex Guardianes.

-Prisión, qué ironía -Dijo Jack sentado frente a Hiccup en la gran camioneta de oficiales que los trasladaba directo a sus celdas.

El peliblanco ya estaba curado gracias a la visita de Rapunzel en la cuál no tuvieron ni tiempo de hablar debido a la presión por llevárselos, ahora estaban esposados con antidones para evitar usarlos.

Miró a su amigo quién tenía la mirada agachada.

-Hey....-Murmuró Jack inclinándose al frente- No......No me has dicho nada respecto a ella.

-¿Quién de las dos? -Hiccup arrugó su nariz cuando le miró – Ambas murieron igual que Elsa.

Provocó que Jack tensara su mentón igual a haber soportado el roce a una herida abierta, bajó su mirada y de nuevo la levantó para verlo con calma.

-Guardando silencio no las traerá de vuelta, Hiccup.

-Si quieres provocarme a llorar, olvídalo -Hiccup se recargó contra el costado – Lloré suficiente y.....

-Cállate, no hablo de hacerte llorar -Jack también recargó su espalda – Ya......Ya antes las habíamos perdido de vista y volvieron a nosotros.

-Y de nuevo nos las arrebataron -Hiccup frunció su ceño -Merida murió dos veces frente a mis ojos ¿Y Elsa? Rapunzel me dijo que te encontraron con costillas rotas y una pierna herida, no me imagino cómo fue con ell.......

-¿Y tú no estabas herido? -Jack enfureció – Porque también escuché que no lograbas levantarte con costillas igual de rotas que las mías o peor, con la espalda sin poder enderezarla y......

-¡No pude salvar a ninguna de las dos!

-¡Ni yo a Elsa aun con mis poderes!

Ambos callaron cuando la camioneta frenó de un segundo provocando que ambos resbalaran al mismo costado y cayeran.

-¡Oigan! -Hiccup se levantó apoyándose del pecho de Jack sin importarle regresarlo al suelo – No es un camión de maldita carga.

Se asomó por la ventanilla de vista a los oficiales, pero le sorprendió no ver a los dos hombres uniformados de Canadá, sino a dos mujeres uniformadas de Guardianes.

-Una disculpa, caballeros -Rapunzel sonrió apoyando su brazo contra la ventanilla -Hubo una pequeña demora, pero de inmediato llegaremos a las antiguas bóvedas.

-¿Punzie? -Jack quitó a Hiccup de un empujón -¿Qué.....¿Toothiana?

-Disculpen, ahora podemos irnos -Dijo cerrando la puerta -Los oficiales estarán bien.

Guardián Reiniciado. Segunda Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora