Capítulo 13

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Todo fue muy rápido e increíblemente ahora todo era muy lento.

-¿Qué fue lo que sucedió, Jack? ...... ¿Jackson?

La pregunta de la mujer frente a él quedó suspendida en el viento sin lograr que llegara a su completa claridad a los oídos del peliblanco.

De aquel hombre que tenía fracturas en las costillas y su rostro raspado junto a sus nudillos, sus ojos azulados a pesar de brillar con ese hermoso color siempre, hoy parecieran estar apagados en una mirada triste y dolorosa.

Todo era tan borroso y confuso, que volvió a caer inconsciente de tanto dolor físico y emocional.

Al menos él logró escapar de la conciencia y del presente en un sueño, pues Hiccup estaba despierto con una mejilla vendada, su nariz con vendas a mitad del tabique y algunos otros raspones en su barbilla y frente.

Sus ojos estaban irritados de tanto llorar, si pudiera ahora mismo continuaría llorando, pero en ese instante Hiccup se preguntó acerca de cuántas lágrimas podía liberar el cuerpo humano, porque él se sentía como si ya se le hubieran terminado.

A la puerta de la habitación del hospital donde se encontraba, entró la rubia de su compañera.

Compañera de Guardianes, Rapunzel.

-Buen día, Hiccup -La mujer lo saludó con discreción y con su rostro calmada – En un momento curo tus heridas y Flynn se encarga de traerte un poco de ropa.

El castaño no respondió ni la miró, simplemente tragó un nudo queriendo volver a llorar, pero sus ojos no le permitían más lágrimas.

Pasaron horas lentas y con pesados movimientos de Hiccup bajando del auto frente a aquel lugar donde los agentes de Northuldra caminaban con miradas serias.

Bajó la mirada cuando Rapunzel lo encaminó junto a Flynn para cruzar el edificio hasta la parte trasera, a donde estaban reunidos.

-Estaremos el tiempo que necesites -Rapunzel le murmuró cuando estaban de pie al frente de las personas que guardaban silencio.

Hiccup seguía sin decir una palabra, prefirió levantar la mirada y buscarla, pero sabía que ella sería quien llegaría en poco minutos a donde estaban reunidos.

-Hiccup, sé que tú y Jack no quieren hablar con nadie -La mujer susurró de nuevo mirándolo -Pero de verdad necesitamos saber qué fue lo que sucedió, no los podemos ayudar si no hablan.

El castaño siguió mirando al frente, detectando todo lo que lo hizo recordar suceso por suceso de hace dos noches.

A cuando su corazón se aceleraba cada vez más.

Recordar igual a cámara lenta los sucesos que ambos miraban y no dejaban de recordarlo, deseando haber podido hacer algo a tiempo.

De Merida gritando y llorando con los puños en alto que impactaba con más fuerza contra Drago.

Elsa gritando con el aura azulada creciendo en sus palmas y el brillo de sus ojos irradiando sobre su furiosa cara.

-¡ERET!

-¡GRIMMEL!

Y como el plan dictó con cada uno, Grimmel fue quien disparó un arma de púas metálicas, ocho para ser exactos fueron los que perforaron el cuerpo apuntado.

-¡ELSA! ¡NO! -Jack intentó haber corrido o volado, pero ni pensar en la acción le dio tiempo cuando la miró detenerse justo cuando Hans cayó a protegerse al suelo.

La platinada llevó sus manos temblorosas a su cuerpo, mirando los diferentes puntos de perforación cuando miró las púas clavadas al suelo.

Levantó la mirada a donde estaba Jack atrapado por escombros, llorando y gesticulando dolor por verla a segundos de morir.

Guardián Reiniciado. Segunda Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora