Capitulo 13

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Bajo del tren y frente a ella se encontró con una estación vacía, a lo lejos pudo ver a un grupo de mineros pasar por el camino que lleva a las minas, los sirvientes del tren bajaron sus maletas y detrás de ellos bajo Haymitch, juntos comenzaron a caminar en dirección a la aldea de los vencedores y justo a mitad del camino Yelena chocó contra un joven de cabello rubio y piel blanca que llevaba cargando un costal de harina, el chico bajo el costal y cuando vio quien era la persona con la que chocó entró en pánico
-Yelena!-exclamaron a su espalda
La chica aparto la mirada del joven para ver cómo Hazel se acercaba a ella rápidamente acompañada de dos de sus hijos, Yelena sonrió con mucha emoción y se lanzó a los brazos de Hazel cuando la mujer los estiró para abrazarla
-Mi niña ¿que te paso?-preguntó Hazel viéndola
-Choque con este chico y me lleno de harina-explicó ella
-Yo de verdad lo siento, no me fije por donde caminaba-dijo el chico
Yelena sacudió su pantalón y su blusa mientras escuchaba las disculpas de aquel chico, Hazel también la ayudó a sacudirse y le dijo que lavaría su ropa en cuanto llegaran a la casa
-Tranquilo no pasa nada, solo ten más cuidado-dijo Yelena
-Perdón de verdad-dijo él
-Disculpa aceptada, ahora si nos disculpas debemos irnos-dijo Yelena
El chico volvió a cargar el costal de harina y retomó su camino, Haymitch soltó una carcajada y se burló de Yelena por estar llena de harina, Hazel negó con la cabeza divertida y le dijo que parecía un lindo pastel
-Hazel!-exclamó Yelena riendo
-Perdón mi niña pero Haymitch tiene razón, das mucha risa así-dijo Hazel
-Vamos pastelito... digo mocosa-rio Haymitch-Vamos mocosa-
Yelena levantó una de sus cejas y lo miró seria, Haymitch le sonrió y volvió a cargar su maleta para seguir con su camino a la aldea de los Vencedores
-Gale hijo ayuda a Yelena con sus maletas-dijo Hazel
-No es necesario yo puedo...-hablo Yelena
-Descuida, es un gusto ayudarte-dijo Gale 
Gale Hawthorne el hijo mayor de Hazel, él tenía entre 14 o 15 años, Yelena sabía algunas cosas de él debido a que Hazel solía contarle sobre sus hijos. Llegaron a la casa de Yelena y ella le pidió a Gale que dejara las maletas en la sala pero Hazel se negó y le ordenó a su hijo que las subiera a la habitación principal, la mujer le pidió a Yelena que se cambiara para poder lavar la ropa que estaba manchada de harina, la chica subió a su habitación y después de que Gale dejara sus maletas las abrió y buscó algo de ropa casual, un pantalón de mezclilla, blusa de manga larga color gris y sus botas negras que le llegaban al tobillo, agarro la ropa sucia y bajo al primer nivel de su casa para entregársela a Hazel, entró a la sala y la vio hablando por teléfono
-Justo acaba de entrar, te la paso-dijo Hazel-Toma es para ti-
-¿Quien es?-preguntó ella
-Dice que se llama Daniel... no! Dylan-dijo Hazel-Si se llama Dylan-
Yelena agarró el teléfono y luego lo puso en su lugar colgando la llamada, Hazel la miró con el ceño fruncido y ella rápidamente le explicó que si Dylan volvía a llamar no le dijera nada sobre ella
-Cuando el llame inventa que no estoy o algo así-dijo Yelena
-Pero no fuera una llamada de Finnick porque esas si las contestas-dijo Hazel
-Es diferente, él es mi amigo-comentó Yelena
-No sabía que ahora se le llama "amigo"al hombre con el que se tiene una relación-dijo Hazel sonriendo
La chica abrió los ojos sorprendida mientras sus mejillas se tornaban un poco rojas, se dio la vuelta y salió al patio de la casa para lavar ella misma su ropa, ahí estaban Gale y Posy la hija más pequeña de Hazel. Al caer la tarde los cuatro se sentaron en el comedor y se dispusieron a disfrutar de la comida que Hazel había preparado, Yelena habló con Gale sobre sus salidas ilícitas al bosque y le dijo que ella le compraría una parte de la carne que cazara, el chico se negó de inmediato a recibir aún más dinero de Yelena, él decía que ya era suficiente con el pago que le daba a Hazel así que la carne se la mandaría como agradecimiento por la ayuda que les brindaba, al caer la tarde el teléfono sonó una vez más y Yelena fue la que contesto
-Creí que jamás responderías-dijo Dylan
-Hazel! Atiende esta llamada por favor!-levantó la voz ella
-¿Hola? Oh si era ella pero...-hablo Hazel
Miró a Yelena y con la mirada le hizo saber que no sabía que inventar, la chica comenzó a señalarle la puerta para darle a entender que se había ido
-Disculpe señora ¿sigue ahí?-hablo Dylan
-Si si, como te decía... Yelena tuvo que salir de emergencia-mintió Hazel
Dylan le pidió que le dijera a Yelena que había llamado otra vez, y que esperaba que la próxima vez que llamara ella ya pudiera responderle, Hazel colgó el teléfono y negó con la cabeza mientras miraba a Yelena con desaprobación
-No me digas nada-sentenció Yelena
Hazel regresó a la cocina para terminar de limpiar mientras que Yelena salía de la casa para ir a visitar a Haymitch. Al entrar a la casa de su tutor fue recibida por un fuerte olor a alcohol y un aspecto asqueroso del lugar, entró al comedor y vio a Haymitch dormido en una silla con su cabeza sobre la mesa, lo sacudió un par de veces pero él no reaccionó, Yelena rodó los ojos ya cansada de esa situación pues siempre era lo mismo
-De acuerdo Haymitch no me dejas otra opción-dijo la chica
Se alejó un poco y con su pierna derecha pateo el cuerpo de Haymitch haciéndolo caer de la silla, el mentor abrió los ojos y frunció el ceño al darse cuenta que estaba en el suelo, se puso de pie y sobo su cadera
-Buenos días estrellita-dijo Yelena sonriendo
-No fastidies mocosa, me despertaste de mi sueño embellecedor-dijo Haymitch
-Si claro, mira que bien te a resultado-respondió ella
Yelena solía ser muy sarcástica algunas veces igual que él y eso lo fastidiaba, Haymitch le preguntó qué hacía ahí y ella le contó sobre las llamadas de Dylan, la forma en la que insistía para comunicarse con ella, el hombre se quedó pensativo algunos minutos y después miró a la chica frente a él y con toda sinceridad le dijo lo que él pensaba
-¿Quieres un consejo?-preguntó él y la chica asintió-Bien pues aléjate de él, ese chico no te conviene-
-¿Porque no? Esto es por su origen ¿verdad?-cuestionó ella
-Es el nieto de Snow, tú eres esclava de su abuelo-dijo Haymitch-JAMÁS los dejara estar juntos-
Yelena bajo la mirada y fue entonces cuando se obligó a ver la realidad, Dylan estaba muy lejos de su alcance, aún sin importar que él quisiera algo con ella Haymitch tenía razón, nunca podrían estar juntos al menos no en ese mundo lleno de opresión y injusticias.

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