𝐂𝐎𝐁𝐑𝐀 𝐊𝐀𝐈 , Johnny Lawrence.

OO5. Cobra Kai

Capitulo Cinco. Cobra Kai

Maggie observaba todo en silencio, no había compartido con nadie aquel encontró con su tío, y por el momento así seguiría.— La plataforma quedó asombrosa.— admitió Nathaniel observando el lugar.— Oye podría contratarte para mi empresa.

— ¿Enserio?— preguntó eli con una sonrisa.

— Desde cuando trabajas? — preguntó Jughead riendo.

— Oye, soy arquitecto no te burles de mi.

— Tu turno campeona.— dijo Johnny con una sonrisa. Reese subió confiada, haciendo una reverencia frente a Sam.

— Bueno, vayan despacio chicas.— dijo Daniel.

— ¡Pateense el trasero!

— Johnny! — gritó Daniel.

Reese río era el primer entrenamiento de ese estilo luego del accidente que la dejó en el hospital, sabía que Sam no daría el primer golpe así que fue ella quien inició, Larusso la esquivo. Desde allí todo precio ir en cámara lenta, cuando Sam se abalanzó a golpearla el rostro de Tori se apareció en su mente, retrocedió asustada perdio el equilibrio, y cayó fuera de la plataforma, golpeándose contra la valla.

— Reese!

Sam saltó para ver si Reese estaba bien, se quedó en su lugar al verla retroceder asustada.— Papá creo que tiene un ataque de pánico.

— Reese, espera despacio.— exclamó Nat tratando de llegar a ella.

— Estoy bien, estoy bien.— repitió poniéndose de pie.— Creo que no...— Reese se encaminó hacia el interior del dojo.

— Reese, cariño espera...— pidió Maggie.

— Estoy bien Mama, solo necesito... necesito respirar si.— la rubia tomó su maleta y salió corriendo de allí.

Los tres decidieron darle espacio a Reese, quien volvió al dojo por la noche para no enfrentarse a sus hermanos. Logró pasar la guardia fronteriza de Maggie y llegar al patio, dio de permaneció toda la noche intentando borrar aquella imagen de su mente.

— Reese? — la chica se sobresaltó.— Qué haces allí?— se enteró observando a Eli, fue el primero en llegar y por consiguiente el primero en encontrar dormida en la plataforma flotante.

— Dormir? Sabes... me iré a cambiar para el entrenamiento.

— No espera.— el chico negó y entró al estanque.— Habla conmigo, no te veo bien.

-

[...]

Dio un suspiro pesado y abrió aquella puerta, la última vez que estuvo allí fue en 1987 y no había vuelto a entrar para no remover los recuerdos. Pero al entrar se sintió como en aquella época, soltó una sonrisa al ver la caja con el logo de las cobras, tal vez había cambiado, pero aún así las memorias de aquellos tiempos eran buenas.

— Un Gi de seda.— río Maggie revisando la caja.

— Ohh, tu Gi es de seda... yo quiero un Gi de seda. La seda negra se vería genial.

— Ay Maggie, tu no cambias.— apretó las mejillas de Maggie.— Pero lo que sea para mi niña... ¡Oye! Prepara dos Gi, Maggie se los llevará.

— Terry Silver, extravagante como siempre.— río, algo dentro de ella la llevó a probarse aquel gi, pese a cuatro embarazos su cuerpo siempre volvía a ser igual de delgado que siempre.— Amo la seda.

Se observó al espejo detenidamente, se había vuelto extraño verla a ella en colores así, de hecho hacia años que no compraba una prenda oscura, verse así misma con el Gi negro la hizo sentir diferente.

Un recuerdo volvió a su mente, las palabras de su tío previo a su primer All Valley. "Detrás de esa sonrisa bonita, de tu aspecto inofensivo y muy dentro de tu corazón bondadoso, sabes qué hay una Cobra, una que no tiene miedo al éxito."

— Una cobra.

— ¿Maggie? — la rubia se giró, Daniel la observaba algo confundido.— ¿Y eso?

— Es un gi de seda, Terry me lo obsequió en mi primer All Valley.— río.— Intentó convencerme de ir con el.

— ¿Y tu que le dijiste?

— ¿Que piensas que le dije?

— No lo se, Maggie... me cuesta pensar qué hay otro camino que no sea Miyagi-Do, pero entiendo que tú tienes ambas perfectivas y se que lo amas, pero debo protegerte de ellos, entiendo que no puedas soltarlos, pero no son buenas personas y no quiero vuelvas a sufrir.

Maggie sonrió levemente, dejando que Daniel la abrazó, cerró sus ojos disfrutando del abrazo.

— Aunque tengo que admitir que la seda se siente muy bien.— musitó acariciando la espalda de Maggie.— Y te queda asombroso el negro.

La rubia se alejó un poco, aún con las manos de Larusso en su cintura río.— Ya tengo que sacarme esto.

— Yo puedo sacártelo si quieres.

Próximamente ¡Revenge!
Dentro de muy poco les estaré comunicando la publicación de una nueva fic, espero recibir el mimo apoyo que siempre me dan ❤️

Aprecien esta hermosa portada hecha por Mimesis_1111 , gracias por tu apoyo bro ✨💕