A marte ¿o no?

26. ¿Mudarme?

-¿De qué estás hablando Nathan?- exclamé mientras el abría mi departamento para sacar algunas maletas . Se detuvo y giró hacia mi.

-¿No lo entiendes Alex? Yo ocasione esto, y seguirá pasando si estas cerca de mi, intento protegerte, si algo te pasará yo... yo...

Me levanté y me puse frente a el mirándolo a los ojos. - Tu, ¿qué?-  pregunte.

Tomo mi rostro con ambas manos y me dio un beso , lento, cálido y preciso.

-Si algo te pasa Alex, si alguien te hace lo más mínimo, me muero.

Lo rodeé fuertemente con los brazos y susurré en su oído -Me quedó contigo, en las buenas y en las malas, eres la coincidencia más hermosa. Quiero estar contigo.

-Alex...-exclamo, pero entonces... lo besé, lento, mis brazos rodearon su cuello, acaricié su cabello y el tomo mi cintura mientras me apretaba más hacia el. Un gemido escapó de su boca, y mordió ligeramente mi labio, plantó una vez más un beso ligero y sonrió.

-¿Qué sucede? -pregunte algo sorprendida.

-Espera aquí- dijo él, mientras se adentraba a su habitación.- Era de mi madre... es Koh-I-Noor.

-¿de qué hablas Nathan?-dije mientras sonreía al ver esa pequeña cajita.

-Alex...,  Alexandra McGuire , llegué por accidente a este planeta, pero , ¿sabes qué no fue un accidente? , conocerte, enamorarme de ti, estoy perdida y locamente enamorado de ti, tanto tiempo busque la manera de regresar a mi planeta, Livy, todo este tiempo estuvo detrás de todo esto para que no regresara, se alió con mi primo, se llevó al amor de mi vida, y ahora que mi primo no está, puedo volver en su nave, pero honestamente, no quiero volver, quiero estar contigo, quiero seguir dejándome llevar por este amor tan humano o inhumano , este amor tan puro que siento por ti, es por eso que te entrego esto.

Y aquí es donde te pregunto, Alexandra McGuire, ¿aceptas casarte conmigo? - se arrodilló y me abrió una pequeña cajita con un diamante enorme, un diamante morado que brillaba ...brillaba más que mi futuro.

-Sí- dije y lo besé.