Piel Canela. |NamTae|

Capítulo 2.

Verle correr como si el mundo pudiera acabarse. Con solo recordar el ruido que sus zapatos hacían cuando corría, sabía que estaba cerca. Y eso sacaba en él, unas pequeñas sonrisas. Lo admitía.

Aveces para Namjoon, pensar en su secretario, era algo que no elegía el mismo, sólo se daba. Cuando acomodaba sus camisas, cuando le hacía los nudos de la corbata, el como se había acostumbrado al ritmo de trabajo, esa sonrisa bastante extraña pero tierna. A Namjoon le hacía el día.

Pero estaba dejando se hacerlo en este momento. Eran las 9 de la mañana y su asistente todavía no aparecía, no había señal alguna de él. Eso estaba haciéndole perder la paciencia y que su enojo estuviera en aumento.

- ¿No se ha reportado Kim?- preguntó Namjoon por teléfono a la recepcionista.

- No señor, no se le ha visto entrar.

- ¿Han marcado a su teléfono?- preguntó insistente.

- Si. Pero lo tiene apagado.

- ¡Hagan bien su trabajo!- sin más, colgó.

Ahora mismo podría comerse sus uñas debido a los nervios. Pero lo mejor era golpear la pared, su escritorio, aventar a la pared lo primero que encontrara.

El evento de presentación del nuevo celular, sería en una hora, pero no aparecía Kim Taehyung. ¿La iba a pagar?, En efecto, la iba a pagar.

*****

Se había olvidado de todo en estos momentos. En su cabeza sólo estaba Jennie y que todo estuviera bien con ella.

Ahora se encontraba dormido en la fría e incómoda sala de espera del hospital, en espera de informes sobre la menor.

- Guardián de Kim Jennie- vocearon haciendo que Taehyung se pusiera de pié- presentarse en acceso a visitas.

- ¿Pasa algo doctor?- preguntó Taehyung un vez se acercó a dónde fue inficado- ¿Cómo está mi hermana?.

Su semblante era pálido, ojeras, despeinado, ojos rojos y las huellas de las lágrimas yacían en su rostro.

- Está estable- respondió el médico- se le realizó un lavado de estómago. Por fortuna no tomó una cantidad significativa de pastillas.

- ¿Puedo pasar a verla?- preguntó Taehyung.

- Por supuesto. Deje aquí sus cosas y acompañeme. Ella está en piso ahora.

*****

Taehyung entró a donde su hermana dormía. En silencio se sentó en el banco a su lado y acariciaba lentamente su mano izquierda.

Lloraba en silencio, tratando de ser fuerte pero no podía. Ahora acariciaba los cabellos de Jennie. No quería separarse, no sabía que hacer sin ella.

- Eres mi única familia Jennie- decía con lágrimas cayendo de sí. Su nariz estaba roja debido al llanto- no me iré de tu lado. Se lo prometí a mamá, te lo prometí a ti, me lo prometí a mí.

Un silencio se hizo presente en la habitación. Sólo las máquinas que median los latidos del corazón se escuchaban. Taehyung recordó a su madre, recordó aquella canción que les cantaba para decirles que todo estaba bien, que les quería, que siempre estaría con ellos.

Cuando se dió cuenta, ya estaba cantando.

Que se quede el infinito sin estrellas
Y qué pierda el ancho mar su inmensidad,
Pero el negro de tus ojos que no muera,
Y el canela de tu piel se quede igual.

Si perdiera el arcoiris su belleza,
Y las flores su perfume y su color
No sería tan inmensa mi tristeza
Cómo aquella de quedarme sin tu amor

Su voz, con melancolía y mucho corazón que dedicaba esas letras. Sus ojos volvían a llenarse de lágrimas, que no se dió cuenta que su hermana despertaba y también cantaba con él.

Me importas tú
Y tú, y tú, y solamente tú
Y tú y tú, me importas tú
Y tú y tú, y nadie más que tú.

Ojos negros
Piel canela
Que me llegan a desesperar...

Al darse cuenta de que la menor ya estaba despierta, aún con lágrimas mostró una sonrisa y se lanzó contra ella para abrazarla sin intención alguna de soltarla.

- Perdóname Tae- dijo Jennie entre lágrimas.

- No digas nada, no pasa nada...

- ¡Sí!, ¡Si pasa algo!- exclamó Jennie llorando y separándose de su hermano mayor- ¡Tengo VIH!, ¡No voy a vivir como antes!, ¡Me voy a morir!

- ¡No te vas a morir!- gritó Taehyung entre lágrimas, tomando el rostro de si hermana que también lloraba- ¡Es mi culpa!, ¡No te presté atención suficiente!, ¡Si no fuera por mi ausencia no te hubieras juntado con esos!

- Fue la mía, Taehyung- dijo Jennie más calmada, tomando las manos de su hermano- yo ya sabía lo que hacía, y en qué me metía. Pero no me importó...

- Fue de los dos, ¿Si?. No quiero escuchar más...

- ¿Y tú trabajo?

- Espero y el señor Kim lo entienda. ¿Estarás bien si en un rato voy a la oficina a hablar con él?

*****

- Esa presentación pudo ser mejor- el padre de Namjoon dijo fríamente.

- Fue un pequeño error de cálculo- respondió Namjoon.

- Agradece que nadie lo notó. Si tus tíos lo hubieran notado, ahora mismo estarían haciendo un desastre en la junta para quitarte de la dirección y traer a Jisoo de Japón.

- Perdón. Es sólo que mi asistente...- Namjoon pasó sus manos por su rostro- No sé que pasó con él, tenía trabajo. Pero no te preocupes, las va a pagar.

- Espero y también que no se vuelva a repetir.

Antes de que Namjoon hablara, el teléfono de la oficina sonó. Era de la recepción.

- Kim Taehyung acaba de llegar y va por el elevador.

Namjoon colgó. No iba a tolerar ningún error.

*****

¿Estado emocional?, Nervioso, temeroso. Quería que la tierra lo tragara. Sentía su estómago revolverse debido al miedo que estaba experimentando en ese momento.

Podía imaginarse la reacción de su jefe al verle entrar a su oficina. Se imaginaba un gran regaño, que le hiciera llorar... Hasta un golpe pasó por su mente.

- El señor Kim está que no lo calienta no el sol- fue lo primero que dijo la señora Kihee, de aseo al subir al elevador.

Eso no alentaba mucho a Taehyung, que al llegar al piso de su jefe, pensó dos veces si debía bajar o no. Pero prefirió hacerlo, como cualquier persona responsable de sus errores lo hace.

Al estar frente a la puerta, vió como se abría; de ahí salía el papá de Kim Namjoon, que sólo le miro con desaprobación.

Entró. Vió a su jefe mirando a través de la ventana. Respiró profundamente, pero sentía orinarse cuando Namjoon volteó.

- Le dije que no faltara por nada del mundo, ¿O me equivoco?

- Perdone señor Kim. Tuve un gran problema familiar de salud con mi hermana- dijo Cabizbajo y rápidamente, antes de ser interrumpido.

- ¿Qué edad tiene su hermana?

- 19.

- Ella ya está bastante grande para ir sola al médico.

- Pero usted no entiende- dijo Taehyung, que sin pensar, hizo detonar una bomba, que hizo a Namjoon aventar la gran pila de documentos de su escritorio.

- ¡No, no entiendo!, Pero lo que sí, es que la presentación de hoy fue un fracaso. Una sola cosa le pedí, una sola y no pudo ser capaz de cumplirla. Fuí claro.

- Pero señor...

- ¡Pero nada!, Ahórrese sus explicaciones. Está despedido, Taehyung.