Capítulo 14: Flaky se libera

28 3 0
                                    

Flaky alza lo más que puede las esposas y alcanza el vaso de la cómoda. Vota la poca agua que había y con todas sus fuerzas golpea el vaso contra el borde de la cómoda, rompiéndolo en pedazos.
Flaky examinó los pedazos y cogió el más mediado que tenía, los otros los dejó caer.
Con sus dedos sujetados al vidrio, lo movió hasta llegar a su muñeca y empezó a rosarlo contra su piel hasta formar líneas amplias de sangre.
Flaky gemía de dolor mientras se cortaba con el vidrio. Cuando dejó de hacer eso,empezó ajalar hacia abajo su mano para sacarla de la esposa. La sangre hacía que su mano se deslizara, pero ala vez jalaba su piel dejando ver sus venas, músculos y huesos.
Jaló más fuerte mientras gritaba de dolor y cuando pensaba que se iba a cortar la mano, logró sacarla de la esposa, pero con la mano destrozada.
Flaky fue hacia un lado saliendo dela cama, sus piernas le pesaban, pero se acostumbraría. Fuee hacia la cómoda, cogió la llave con dificultad y se abrió las esposas.
Inmediatamente después de eso, fue a la cocina y se sació de agua y comida. Después fue hacia una vitrina para sacar un botiquín y unas gasas para curarse la mano. No era muy complicado, su padre ya lo había hecho con ella.
De ahí quiso volver para coger las llaves, pero cayó desmayada.

(-Flaky ¿me oyes? Flaky, ¿me miras?)

Era la voz de Flippy en su cabeza lo que hiso que se despierte. Al hacerlo, vio que el zorro estaba mordiéndole la mano vendada, pero esta le golpeó con la otra alejandolo de ella. Al instante percibió un olor a muerte, uno que parecía al de la popó del inodoro,miro hacia abajo y vio que se trataba de la cara irreconocible de su esposo tirado en el piso. Ella se asqueó y se aparto de él con las piernas débiles. Cogió lasllaves del auto y lo prendió. Se metio después en el pasillo. Sintió una presion grande en la cabezq y la sangre se le heló. El zorro gruñia ¿por qué podría ser?
No podía ser verdad, ahora mismo, justo cuando sus esperanzas de sobrevivir volvieron, lo vio, al fonfo del pasillo. Ese buitre pálido con ojos pequeños, su pico curveado y de alta estatura.
Flaky avanzaba hacia él sin temor.

-Solo estás hecho de luz roja de luna y astros.

Se dijo. El buitre no se movió. Ella se detuvo en frente de el, extendió la muleca y el buitre le sacó delicadamente la pulsera de bodas de Flaky. Flippy estaba presente y puso una cara apenada cuando vio eso. Flaky no lo vio allí. Al terminar de darle la pulsera, esta salió de la casa, se subió al auto y puso las llaves, desde atras Flippy se despedía alzando la mano como un militar. Ella no le devolvió el saludo, solo asintió con la cabeza y de ahí se fue.
Se adentró en la carretera oscura, como su vida. El cielo era oscura, como su alma y el camino era angosto como sus antiguas oportunidades. Era curioso saber que Flaky estuvo como en una carretera oscura, con el cielo oscuro y un camino casi sin espacio para atravesarlo, pero ese era el costo por ocultar todo en un cuarto lleno de problemas.
Siguio avanzando un poco mas, pero cada vez que aceleraba, cabeceaba o se dormía por pequeños segundos. Un bache era lo suficiente para volver a despertar y seguir el curso.

-Un poco más.

Se decia a cada rato, pero era imposible, se durmió.
Unos segubdos después despertó, pero algo había cambiado, la atmosfera era distinta, era como si Flaky hubiera entrado hace poco en otra realidad. El eclipse se reflejaba allí mismo, la hierba parecia susurrarle cosas y atras lo volvio a ver ¿a quién? A ese buitre de cara pálida, pero tenía pupilas como de lunas. Este la abrazó por detrás del asiento y le dijo...

-Despierta... Mosa.

Y...-PUM-... el auto de Flaky llegó a estam parse contra un abeto. Los vecinos oyeron el golpe así que salieron con linternas para buscarla.
Flaky se despertó y miro hacia las linternas. Tocó la bocina de su coche para que la escucharan, y lo hicieron. Corrieron hacia ella, Flaky salió del auto, pero una vez que puso un pie en el suelo, cayó desmayada en la hierba.

Continuará...



EL JUEGO DE FLIQPYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora