Veo como se marcha y las personas que tienen que estar en la reunión empiezan aparecer y así da comienzo a otra hora de trabajo. Tomo asiento y respiro profundamente, otro día menos de trabajo y con ganas de que llegue el fin de semana.
Hoy es viernes y lo único que me queda es ir a la reunión en el hotel Lombardi para empezar mi fin de semana.
-¿luego nos vamos a beber algo?- dice Lau.
-claro que si, ha sido una semana de locos y es una buena forma de despejarnos- sonrío y entramos al hotel, nos llevan a la sala de reunión- ¿tendremos al hijo multifacético de la mujer de ayer?- preguntó, le comenté a Lau la conversación que tuve ayer con Camile.
- seguro que es el típico niño de mamá y papá, mira todo esto, se notan que tienen dinero para gastar en esta vida y la otra, ¿Cuántos años tiene?
- veinticuatro o veinticinco según lo que dijo ayer Camile- digo y vemos como entran dos hombres, se notan que son hermanos.
- espero que no hayamos tardado tanto- dice uno sonriente- soy Matías y el es mi hermano Sebastián, como ya sabéis nuestro sobrino se encargará del nuevo proyecto- mira su reloj- dijo que llegaría en unos minutos, por lo visto al ser nuevo proyecto también serán nuevas personas de su empresa, cuando conozcan a nuestro sobrino que no os sorprenda su seriedad, es muy profesional aunque sea joven- dice.
- parece ser- dice mi compañero que elegimos como portavoz- conocemos toda la trayectoria que tienen con nosotros, así que daremos lo mejor como equipo- dice.
Estoy viendo en la tableta algunas cosas de lo que se va hablar en la reunión, salgo de mi concentración cuando Lau me da un golpe con el pie y le miro, pero ella está mirando dirección a la puerta y le sigo la mirada. ¿Que?. Ahí esta el, vestido de traje y muy serio, cuando nuestras miradas se encuentran veo su rostro de sorpresa y a los pocos segundos sonríe.-aquí tenemos a Luke, se encargará con ustedes del nuevo proyecto.
- buenas tardes, perdón por la tardanza... -empieza diciendo, dejo de escucharle y lo único que se me pasa por la mente, ¡tiene veinticuatro años!, veo como sigue hablando y no parece la edad que tiene, no aparenta para nada su edad, ¿por que no me dijo su edad?, me pregunto y caigo en cuenta, nunca se lo pregunté aunque nunca pensé que fuera menor que yo. Siento que alguien coge mi mano y es Lau, vuelve a darme otro apretón para que me tranquilice, me doy cuenta que tenía mis manos cerradas a tal punto que me estaba clavando las uñas.
Creo que fue la reunión más larga que he tenido, el tiempo no pasaba y me alegro que no me tocara hablar.
- eso es todo- dice el portavoz de nuestra empresa- nos vemos en la siguiente reunión- nos ponemos de pie y salimos, no quiero verle a los ojos, me estoy poniendo nerviosa, Lau me toma de la mano para tranquilizare, solo necesito salir de aquí. Logro llegar al aparcamiento pero no pude ir muy lejos.
-Nanya- escucho a Luke, me paro en seco- ¿podemos hablar un momento?- dice, aprieto la mano de Lau y la miro- ¿Nanya?- Lau con su mano me da la vuelta y me empuja, veo como se acerca un poco- la puedo llevar a casa, ¿te molesta?.
- soy Lau y no me molesta para nada- dice- adiós- desaparece.
-¿estás bien?- me pregunta y no puedo decir nada- ¿Niny?- se acerca y de manera inconsciente me alejo.
-tienes veinticuatro años
-¿y?-dice de lo más tranquilo.
-soy mayor por cinco años- lo miro y tiene su ceja levantada- es una locura, ¿te das cuenta que cuando estaba entrando a la universidad tu estabas pasando a segundo año de instituto?.