Siento como la luz traspasa mis párpados y me cubro con la manta
- me duele la cabeza..., la luz no me ayuda...- me hago una oruga- necesito dormir más
- chica...
- cállate por favor, normalmente tu voz me molesta, pero hoy se ha multiplicado por cien.
- llevas durmiendo muchas horas- dice, momento que me doy cuenta que no sé donde estoy. Me siento con los ojos cerrados
- ¿ qué pasó ayer?- pregunto- ¿dónde estoy?- escucho la risa del humano.
- voy a cerrar las cortinas primero..., ¿no recuerdas nada?- niego con la cabeza- esto va a ser interesante- noto que cierra las cortinas, abro mis ojos poco a poco hasta que la vista vuelve a la normalidad pero los cierro de golpe, vuelvo abrir.
- esta...esta es...- hago una mirada panorámica- ¿qué hago en su habitación?- siento como sudor frío, el humano suelta una risa.
- chica, chica, no te sienta bien el alcohol- dice
- esos chupitos no se que llevaban, porque soporto el alcohol- me despeino- lo último que recuerdo fue decir que necesitaba descansar unos minutos...- vuelve a reír- ¡no te rías!- digo molesta
- menudo espectáculo el de ayer- abro mis ojos.
- ¿está aquí?- siento que me está empezando a doler el estómago de los nervios- esto es mucho para mi...
- te has salvado, me dijo que venga a verte porque tenía que hacer algo del trabajo y se ha ido hace unos diez minutos- me tapo mi rostro con las manos
- ¿qué pasó ayer?- digo.
- solo te digo una cosa- le miro- de una manera indirecta y luego muy directa le dijiste que aún sientes algo por él
-¡no!- grito- ¿¡qué hice!?- me pongo de pie, me miro y llevo todo puesto- habla
- ve a lavarte la cara y sal que te hice café- sale de la habitación. Me quedo de pie durante unos segundos y veo a mi alrededor- está todo como lo recuerdo, necesito salir de aquí cuánto antes- voy al aseo, me lavo la cara y arreglo un poco el cabello. Salgo de la habitación.
- vamos a tu casa por favor, no puedo estar en este piso
- ayer no decías lo mismo- levanta las cejas y le miro con odio.
- vamos a tu casa y me cuentas todo- cojo el café y salgo rumbo al piso del humano. Entramos y me siento en el sofá- suelta todo
- después de hacer nuestra competencia- guiña uno de sus ojos- que gané- pongo los ojos en blanco- decidí llevarte a mi casa para que duermas, te puse en mi hombro y no dejabas de moverte, parecías una loca hasta que...
- ¿qué?
- apareció el amor de tu vida y dijo; "¿está bien?"- imita su voz- pasaste de moverte como loca a callarte, de un momento a otro te bajaste de manera ágil y te encaraste con Luke...
- ¿y?- sigo nerviosa
- "¡te odio idiota!"- intenta hacer mi voz- y...
-¡habla!- grito
- eres una atrevida chica- levanta sus cejas y tengo un flaskbak de ayer
-¡no!- grito y me tapo la boca- lo besé- el humano asiente con su cabeza.
- te aseguro que disfrutaste- vuelve a levantar las cejas- luego...- le miro expectante- te separaste y le pegaste
-¿qué?
- le diste un puñetazo y gritaste; "¿vas a largarte otra vez?", "¡yo no me pienso ir!" , le volviste a besar y...
-¡habla!
- te desmayaste, eres malísima bebedora- dice, me cubro la cara con el cojín- así que por eso Luke te llevó a su casa y yo fui a la mía.
- no vuelvo a beber nunca más, que vergüenza, ¿ahora cómo le miro a la cara?, trabajamos juntos en un proyecto
- no es para tanto- dice tranquilo y le miro con odio.
- con todo lo que ha pasado, le he demostrado que aún siento algo por el y ese no era mi plan- pataleo como berrinche.
- ve a ducharte y te dejo algo de ropa hasta que lave la tuya, porque hueles a muerto- dice con cara de asco y le hice caso. Me deja un conjunto deportivo.
- parezco una bolsa con lo grande que me queda- me mira y se ríe.
- solo será para un rato, vemos una película mientras esperamos lo que he pedido para comer
- ¿ y eso que no cocinas?
- ayer tuve una competencia, aunque haya ganado, me he despertado fatal.
- es mi turno de elegir la película- le quito el mando
- no, siempre son películas súper aburridas, películas de gente mayor- le miro y le tiro un cojín.
- no te metas con mi edad, en un par de años vas a estar en los treinta, aparte no son aburridas- levanta los hombros
- seré un treintañero sexy- hace una pose- ya soy guapo ahora y en los treinta estaré mucho mejor, soy como el buen vino- sonríe, lo peor de todo es que tiene razón, el humano es guapo y conquista a cualquier chica. Solo pasa a lado de ellas y se quedan observando.
- serás un viejo arrugado- dice
- no voy a ser como tú- me señala, justo suena el timbre, cuando de pone de espalda aprovecho para tomar impulso y me cuelgo en su espalda.
- deja de meterte con mi edad humano, ahora no me bajaré de tu espalda hasta que me pidas perdón.
- vas a morir en mi espalda- me aferro más, el camina hacia la puerta porque vuelve a timbrar.
- ¡pídeme perdón!- levanto la voz
-¡nunca!- abre la puerta, mi corazón empieza acelerarse.
- tu no eres el repartidor- digo, el humano se hace un lado para que pase.
- ¿has terminado con el trabajo?- pregunta, el sigue de pie en la puerta, su mirada pasa del humano hacia mi , no entiende lo que estaba pasando- ¿Luke?- sale de su trance. Asiente- pasa, en un rato llega la comida- entra y seguido nosotros.
- ¿vas a pedirme disculpas?- le pregunto.
- chica, he dicho que vas a morir en mi espalda
- tendrás que darme de comer en la boca- noto que levanta los hombros- te puedo manchar la ropa y se nota que es cara- levanta los hombros- ¡discúlpate!
- ¡nunca!- escuchamos un carraspeo.
- ¿quieres un caramelo para tu garganta?- le miro y siento su mirada.
- ha llegado la comida- dice.
- vamos humano a comer- digo emocionada.
- lo siento- dice
- no te he escuchado bien
- perdóname chica- dice- ahora bájate
- espera, tengo que ir soltandome poco a poco- lo hago.
- ¡era una disculpa falsa!- grita y se ríe- que inocente eres.
- esto no se quedará así- le señalo
- Nanya tenemos que hablar lo de ayer- dice el individuo serio. No me esperaba esto, el ambiente se puso serio al instante.
