The Wayne Family

Capítulo X

Lo observé por unos segundos antes de abrir la puerta del edificio y ambos salimos para ir a la camioneta.

–Tu silencio dice más de lo que crees.

–Damian– llamé abriendo la puerta del copiloto de la camioneta y volteando a verlo –¿Por qué insistes tanto con el tema?

–Intenté hablarlo con él pero lo evitaba con más brusquedad que tú, tengo algunas sospechas pero quiero confirmarlas– dijo mirándome antes de subirse de copiloto y cerrar la puerta.

Lo juro, está familia será mi muerte

Caminé a subirme de conductor y después de verificar que se haya puesto el cinturón de seguridad, encendí la camioneta y conduje al DPCC.

–¿Qué eran ustedes? Eran algo más que un protegido y el mentor, ¿No es así?– dijo mirándome.

–¿Recuerdas lo que te dije en la cueva ese día?– dije mirándolo de reojo -hay cosas que no valen la pena recordar.

–Eso no responde a mi pregunta.

–La historia entre Bruce y yo no vale la pena, es algo que hemos intentado ignorar por años porque sólo así habrá paz.

No volvió a cuestionarme y no tardamos mucho cuando llegamos.

Estacione el auto y nos bajamos para caminar hacia dentro del edificio.

–Te pierdes todo el fin de semana y apareces con un hijo, cada día me impresionas– dijo con burla el Comisonado.

–Véalo del lado bueno, va a tener a dos excelentes detectives trabajando en este mugroso lugar– dije sonriendo con diversión mientras nos acercabamos -Comisionado él es Damian, enano él es el Comisonado Dean.

–Un gusto chico– dijo Dean dándole la mano.

Damian lo observó con el ceño fruncido antes de estrechar su mano con la de él.

–Igualmente.

–Bien, ¿Qué tienes para mí?– pregunté mirándolo.

–¿Es seguro?– dijo lanzandole una pequeña mirada a Damian y asentí –ven conmigo.

Caminamos detrás del Comisonado hasta su oficina, dónde nos dejó entrar primero antes de cerrar la puerta detrás de él.

–Tengo malas noticias– dijo mientras se sentaba en su silla del escritorio.

–¿Desde cuándo me citas a la oficina para buenas noticias?– dije alzando la ceja y sentándome junto a Damian en las otras dos sillas frente a su escritorio.

–El equipo de John va a estar involucrado en tu caso– dijo haciéndome fruncir el ceño.

–Este es mi maldito caso, ¿Por qué ese imbécil quiere meter las narices?– dije enojada.

–Esto comenzó desde los días que despareciste, ahora te pierdes de vez en cuando y los jefes están intentando sacarte del caso– dijo mirándome con seriedad.

–¿Entonces es mi culpa?– dije con burla.

–No, pero creen que no puedes hacerlo sola así que desde ahora el equipo de John trabajarán contigo– dijo pasándome una carpeta grande –esto es sobre los nuevos asesinatos y al equipo ya se le dió la información que se maneja, incluyendo la nueva pero si logras encontrar algo te tocará a ti darles la información.

Agarré la carpeta con enojo antes de darle una pequeña hojeada.

–Es el mismo asesino.

–¿Estás segura?– preguntó mirándome y asentí –bien, recopila la información y luego ordena una reunión para el equipo.