Lo tuyo es puro teatro

Capítulo III

“LO TUYO ES PURO TEATRO”🎭

CAPÍTULO III: “Una “pretty-Betty”, dos tigres agazapados y la mártir de Armando Mendoza”

AUTORÍA: Patricia Jiménez

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“En el teatro, la palabra alcanza su culmen: estar viva”.

(Alfonso Vallejo)

☆

Un taxi aparcó delante de la casa de los Pinzón y Nicolás salió de él. Doña Julia, atenta desde hace más de media hora a la ventana, corrió a la puerta.

DJ: ¡Nicolás, m’hijo! ¡Por fin llegaron! Ya no veía la hora de… –vio a Betty bajarse del auto– Nicolás… ¿A quién se trajo? ¿Qué hace aquí esta chica? ¡Ya se prendó de ella!

B: Mamá… Soy yo… ¡Betty! –la sonreía– ¿No me diga que no me reconoció en absoluto?

DJ: Betty… –se acercó hacia ella y le acarició la mejilla– ¿Es usted, hijita?

N: ¿Ha visto, Doña Julia? ¿Ha visto al cisne? –reía con su particular risa.

B: No soy ningún cisne, Nicolás… ¡Sólo me acicalé un poquito! –se sonrojaba.

DJ: ¡Mi niña! –la abrazó entre lágrimas– Mi pequeña… ¡Cuánto la he añorado!

B: ¡Y yo a usted, mamá! Me hicieron tanta falta sus consejos… Sus palabras…

DJ: Entremos dentro, niños…

Nicolás tomó las cosas de Betty y en ese momento pasaron por la calle Román y sus amigos.

Ro: ¡Nicolás! Menuda mamcita que se agenció… ¿Dónde la consiguió? ¿La drogó? –ironizó con crueldad.

N: ¡Es Betty, imbécil! –gritó sin mirarle ni siquiera a la cara.

Ro: ¿Qué dice? ¿Está borracho o qué? ¡Jajajaja! –rió con sorna– ¡Betty es la hermana fea de E.T!

B: ¿Por qué no se va molestar a otro sitio, Román? –le espetó enfadada– ¡Qué a gusto estuve sin sus insultos! Aquello era el paraíso terrenal…

Ro: Betty… –la miró sorprendido– ¡Caramba! ¿Se casó con un millonario que le pagó una cirugía estética?

B: No… ¡Me metí a prostituta! Cobro lo mismo que su mamá… –estaba ya harta de tantas burlas y ahora el cambio de imagen la dio algo de seguridad.

Ro: ¡Oiga, Betty! Sin insultar… Que yo no me metí con su mamá… –anonadado– Y para que vea que no le guardo rencor por lo que acaba de decir, la invito a tomar algo esta noche. ¿Qué le parece?

B: ¡Me parece que antes me tiraría desde la Torre Eiffel hacia abajo! ¡Buenas tardes! –entró en la casa y cerró con un portazo.

Ro: ¡Uy! Esa Betty en realidad estaba relinda… Y pensar que la llamábamos fea cuando era en realidad Pretty Betty… Esto lo tiene que saber Miguel… Pero antes de que él la reconquiste, yo también quiero llevármela a la cama.

B: ¿Dónde está mi papá? –quería abrazarle y besarle.

DJ: Fue a hacer unas diligencias, hija. Pero no tardará en volver. Emilio Peña le llamó y le dijo que necesitaba su ayuda para calcular unos presupuestos.

N: ¿Le llevo sus cosas arriba, Betty?

B: Sí, por favor… Déjelas en el piso de mi cuarto. Yo me encargo luego de colocarlo todo.

Nicolás se fue arriba y Betty se quedó a solas con su mamá.

DJ: Hija, tenemos que hablar… –hizo que se sentase– Todo esto me preocupa muchísimo, mamita. Los Mendoza no nos han dejado vivir en paz después de que usted se marchase.