capítulo 8

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Wen Yuan se despertó al escuchar varios ruidos, por lo que al percibir que estos eran extraños se despertó rápidamente y comenzo a mirar a su alrededor, mirando a su Papá el cual descansaba tranquilamente, la medicina había echo efecto y también observó a su Mama quien todavía seguía inmóvil.
Se levantó y trato de buscar el lugar donde provenían todas esas voces y ruidos, no fue asta que atravesó un poco la barrera con su manita por accidente, al ver esto se asombro y lentamente asoló parte de si carita pero por una de las esquinas de la barrera, una vez que pudo observar bien sintió el terror estremecer todo su pequeño cuerpo al ver a los cultivadores, reconocía las túnicas eran las mismas que algunos hombres utilizaron cuando atacaron a su familia y hablando de ella pudo verlos a la distancia en aquel estanque rojo y al igual que su Mama ninguno estaba despierto, su abuela, sus Tíos, su familia......

Rápidamente escondió su rostro y regreso junto a sus padre al cual aún que pudiera no quiso despertarlo así que con lágrimas en los ojos agarró la navaja que momentos antes encontró en la caja de madera, busco entre las cosas de su Mama y encontró tres flechas las amarro y las colocó en su espalda amarrandolas con un lazo, y con paso firme salió de la barrera tenía miedo o mejor dicho terror por esos hombres pero lo que más tenía es que le quitaran de nuevo a su familia, se escondió atrás de una piedra grande y observó un momento asta que pudo ver a tres hombres grandes y con túnicas de diferentes sectas, su Mama y su tia Quing se habían encargado de enseñarle la vestimenta de las diferentes sectas por su propia seguridad.

Al dar un paso hacía tras no vio una pequeña rama la cual pizo y por consecuencia se rompió provocando un ruido que alertó a los tres hombres que rápidamente se voltearon con sus armas en mano.

A-Yuan al ver las espadas y sable sintió miedo y sus ojos se llenaron de lágrimas pero aún así sacó su pequeña navaja y la sostuvo entre sus dos manitas en posición de defensa mientras miraba fijamente a los tres hombres los cuales parecían estar en trance.

Wen Yuan: Vallance

Los tres hombres delante de aquel pequeño niño no sabían que decir no que hacer dos de ellos estaban en desconcierto al ver al pequeño y otro sentía su corazón latir fuertemente pues delante de el estaba aquel pequeño que un día se abrazo de su pierna pero lo más sorprendente es que podía ver delante de  el no sólo al niño si no a quien llamo una vez su hermano, aquella posicion, su expresión, sus ojos su mirada, no podía hablar y sentía su cuerpo temblar, e inconcientemente dio un paso adelante siendo seguido por los otros dos.

A-Yuan al ver como los tres hombres dieron un paso adelante se aterro y dio un paso atrás, mirándolos fijamente a los tres en eso sus ojitos se desbiaron al estanque donde estaba toda su familia y regreso su mirada a los tres hombres, reconoció a uno de ellos fue el mismo que una vez fue a visitar a su Mama al igual que fue quien lo irio, como no lo recordaría su Mama estuvo muy grave debido a la herida y fiebre que tuvo esos días a los otros dos jamás los había visto pero uno se parecía a su Papá pero aún así no era su Papá así que con gran valor y coraje volvió a  dar el paso que retrocedió.

Wen Yuan: Vallance (dijo en vos normal)

Lan Xichen: T-Tu... (no podía articular palabra alguna)

Wen Yuan: ¡¡QUE SE VALLAN!! (grito), no dejaré que vuelvan a lastimar a mi familia (sus ojos estaban rojos por las lágrimas), ¡¿QUE  MÁS QUIEREN?!!!!, ¡YA ACABARON CON TODA!, mi abuela, mis tíos, mis amigos.... (sollozo dolorosamente), ¡QUÉ MÁS QUIEREN!!!, ¡¿A MI MADRE A MI PADRE!?, ¡NO LES BASTÓ CON LO QUE LES HICIERON!!!, ¡NO DEJARÉ QUE LES AGAN DAÑO!!, no importa si me hacen lo mismo que a mi familia, ¡NO DEJARÉ QUE ME QUITEN LO UMTIMO QUE ME QUEDA!!! (grito desgarradoramente).

Los tres líderes que escuchaban lo que decía el pequeño sentían sus corazones doler y sangrar, lo que tenían delante de ellos no era un cultivador, no era un traidor, no era alguien peligroso, era sólo un niño el cual a su corta edad tubo que ver la crueldad de este mundo y de lo que ellos mismos provocaron.

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