[1] I did it for you

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MinHo se quedó parado, mientras veía a su novio sonreír. TaeMin estaba caminando solo unos pasos por enfrente suyo, hablaba sobre la tonta película de terror que vieron en el cine, riéndose cada que recordaba los pésimos efectos especiales.

     —¿No crees que la niña fantasma fue especialmente mala? —TaeMin volteó para mirar a un pensativo MinHo—. Me dio más miedo el especial de Micky Mouse en la casa del horror.

     —¿A ti qué te da miedo? —Cuestionó sin necesidad de respuesta—. Tú y yo sabemos que para ti esa película es de un género de comedia.

TaeMin asintió, retrasó sus pasos acelerados e igualó a MinHo en el camino. Quería colgarse de él, pero odiaba con todo su ser el tener que soportar las miradas curiosas sobre ellos. Para casi todos, los dos eran mejores amigos, y no los chicos que se comían a besos en la soledad.

     —Debe existir algo que pueda al menos hacerme saltar.

MinHo quiso tomar la mano del otro, aprovechándose de la oscuridad que una calle solitaria les brindó, sin embargo, TaeMin escondió ambas manos en los bolsillos del pantalón.

     —¿Qué haces? Alguien puede vernos —susurró—, ya fuiste un poco... en el cine.

     —Está la calle sola TaeMin, solo quería tomarte la mano. ¿No puedo hacerlo?

     —No.

La respuesta tajante lastimó al mayor, por más que intentó sonreír con naturalidad, no lo logró. Imitó a TaeMin, encajando sus manos en su chaqueta. La voz animada de TaeMin se perdió junto a su alegría.

     —Por Dios MinHo, sabes bien porqué no podemos. No es como que me dé vergüenza o que no te quiera, pero haciendo una rabieta por algo tan sencillo me cansa.

     —¿Rabieta? Solo estoy callado, respetando lo que me dices. No puedo tomarte la mano en el cine porque 'Alguien puede vernos' en una maldita sala sola. Si te pongo una mano en la pierna me la quitas, o si quiero contarte algo al oído te haces para un lado —Comentó, hastiado y lleno de frialdad—. Ahora, quiero tomarte la mano porque es la una y nadie nos ve, y si alguien lo hace ¿qué importa? No podemos vivir esperando que todos nos acepten o teniendo miedo.

     —Tú no lo entiendes. —Su voz fue igual de gélida—. Tenemos una vida MinHo. Y tenemos que cuidarla.

Ir al trabajo, hacer bromas de lo bien que se veía la señorita Im en su uniforme, rodearse de otros hombres heterosexuales y fingir que hablar del sexo con mujeres era fantástico. Eso es lo que quiere TaeMin, y no la absurda idea de MinHo con su libertad que nadie mas que él necesita.

Los comentarios de sus padres, los de sus propios amigos, los de una gran mayoría. TaeMin no quiere sentirse dentro de ellos, saber que su ser antinatural está ahí, al lado de su novio. ¿Por qué quiere más cuando le ha dado todo lo que puede?

     —No te estoy pidiendo que salgamos así a todos lados. Quiero hacer cosas tan sencillas como poner mi mano en una de tus rodillas, acariciarte el cabello o darte un abrazo. ¿Eso es mucho para ti TaeMin?

     —Lo es. —Ver el dolor en los ojos de MinHo hizo que su propio pecho se cargara de un peso inexplicable—. Piensa que si alguien nos descubre, ¿qué crees que ocurra? Nuestros amigos nos dejarán de hablar, si es en el trabajo probablemente nos despidan... ¿Nuestra familia? Nos darían la espalda sin dudarlo.

MinHo no hizo nada cuando TaeMin le tomó por las muñecas.

     —Estoy cuidando lo que tenemos. Tu trabajo es seguir actuando como que somos solo mejores amigos, que somos hombres normales y no hay nada diferente en nosotros.

It's Never Time [SHINee]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora