CAPITULO 40

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C. del Norte: ¿Perú? - el joven coreano miraba con deseo al sudamericano frente a él.

El mayor mostró una suave sonrisa y se acercó lentamente a la cama, se sentó al borde de esta y no despegó su vista del menor.

Perú: ¿Por qué me mirabas de esa forma? - preguntó con suavidad.

C. del Norte: ¿D-De qué hablas? - tenerlo tan cerca lo ponía nervioso y no podía evitar sonrojarse, su cuerpo temblaba pidiendo atención... quería sentir las caricias del peruano - N-No entiendo...

Perú: - suelta una risa - ¿Enserio quieres que te lo recuerde? - el más joven asintió lentamente - Esa vez de la caminata... - acercó su mano a su rostro y lo levantó del mentón - ...me mirabas con deseo ¿sabes en lo que te estás metiendo, mocoso? - mantuvo una sonrisa ladina.

C. del Norte: N-No me importa... tu maldito y sexy cuerpo me provoca~ - apartó su mano para acercarse lentamente hacia ese hombre - Deseo que me partas en dos~ - era conocido como alguien atrevido en diversos aspectos, así que ahora no sería la excepción - Este "mocoso" te hará sentir mejor que cualquier otro~ - se sentó en su regazo, dejando el cuerpo del mayor entre sus piernas.

Perú: Ya veo... - lo tomó con fuerza de su cintura para presionarlo contra su entrepierna - Si me haces sentir bien me olvidaré de Alemania por completo y solo me centraré en ti~ - acariciaba su cintura con sutileza.

C. del Norte: Si~ - lo tomó del rostro con delicadeza y por primera vez en su vida sonrió complacido, así de la nada - Olvídate del europeo ese... soy mucho más lindo y sensual que el alemán...

ACLARACIÓN: Norte sabe perfectamente del amorío entre Perú y Alemania, tiene sus trucos.

Sin más que decir atacó sus labios con fiereza, el pequeño coreano soltaba gemidos por el enorme bulto que chocaba en su entrada... debido a su poca experiencia no podía seguir el ritmo del beso, le faltaba el aire. Cuando por fin sus pulmones tomaron un poco de oxígeno, el mayor volvió a unir sus labios en un beso aún más lujurioso que antes...

El menor enloquecía ante la forma tan dominante del sudamericano; cuando por fin tendría un respiro, soltó un gemido al sentir una mordida en su hombro... más y más besos en su delicada piel, las pequeñas mordidas que el peruano hacía lo enloquecían... aunque eso era poco, el miembro del peruano se restregaba en su pequeña y virgen entrada...

Perú: ¿Acaso te vas a correr con solo mis besos~? - hasta este punto el coreano estaba por llegar al clímax.

Su pequeño cuerpo temblaba ante cada toque, soltó un chillido al ver que el sudamericano le arrancaba la delgada camisa que siempre usaba para dormir...

C. del Norte: Esp-¡ah~! - un dulce gemido salió de sus labios, el mayor había atacado uno de sus pequeños y azulados pezones - P-Perú~ mgh~ - apretaba sus hombros con fuerza, sentía con claridad la lengua del mayor jugar con sus botones - ¡Perú~! Me voy ¡ah~! - terminó por correrse manchando el short que tenía puesto, uno que sólo era un poco más abajo de sus posaderas.

Perú: No tienes un buen aguante y ya estás cansado con solo esto - se separó un poco, viendo el cuerpo tembloroso y sonrojado rostro del menor - Alemania es mucho mejor en esto que tú... así q- - un beso lo interrumpió.

C. del Norte: ¡No por favor! Soy mejor que él... s-solo... l-lo que pasa... - comenzó a temblar y desvío la mirada - Lo que pasa es que... es mi primera vez... y no sé nada de esto - volvió a mirarlo con unas cuantas lágrimas amenazando con salir - ¡Pero eso no significa que no te haré sentir bien!

Perú: Bien~ - lo tumbó con delicadeza en la cama y volvió a besar su cuello, para esta vez ampliar su territorio... besaba y mordía su torso, cuello y hombros, enloqueciendo al menor.

UN NUEVO CAMBIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora