17. The club.

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Fubuki se sentó en el booth al centro del club. A su lado estaban Goenji, Endo, Fudo y Tsunami.

— Nos han dejado muchas bebidas — sonrió feliz Fudo — Qué agradable lugar.

Kazemaru llegó junto a sus amigos, cortando la llamada en su móvil.

— Los otros no podrán venir — informó — Su vuelo se atrasó.

— Es lo malo de tomar dos vuelos diferentes — se quejó Tsunami — La mayoría venía ahí.

Menos de la mitad del grupo había llegado a Tokio la noche anterior.

— Nos tocará divertirnos sin ellos — dijo Fudo, siviéndose un poco de licor.

Habían sido todos invitados a la inauguración de un club en el centro de la ciudad, pero debido a la diferencia de intinerarios, el grupo entero no pudo asistir.

— Este lugar es muy cool — comentó Fubuki, saludando a unas chicas que lo miraban — Pero hay muchas chicas en todos lados.

— Es porque es ladies night — informó Fudo, a lo que los chicos lo miraron confusos — Los promotores invitan a las chicas lindas para sacarnos más plata a los hombres, comprando más bebidas para ellas y nosotros, claro.

— Estás muy informado.— le dijo Goenji, tomando un shot de alcohol — Aunque no me sorprende que sepas todo esto.

— Esta no es mi primera vez en el club — le dijo — ¿La tuya sí?

Los otros tres asintieron.

— Yo una vez fui a uno en Okinawa, pero me aburrí mucho. — sus acompañantes rieron, ya conocían al chico — ¿Cuándo regresan los demás? Me gustaría ver a Tobitaka en este ambiente.

— Su vuelo aterriza a las seis de la mañana de mañana. — dijo Kazemaru, mirando su reloj inteligente — Apenas son las díez de la noche.

— Bueno, bueno — se levantó uno de los castaños — Fubuki, veo que eres muy popular entre las chicas, ¿por qué no invitas a ninguna a bailar?

Fubuki miró a un grupo de chicas que lo saludaba, les sonrió amablemente.

— No me sentiría cómodo. ¿Por qué no vas tú?

— ¡Anda, Fubuki! — le tomó Tsunami de los hombros — Vamos a la pista a bailar que tengo mucha energía, hombre.

— ¿Y tú de donde has sacado esa energía? — Goenji tomó otro sorbo a su copa, y pidió comida para todos por medio del menú computarizado en la mesa — ¿Quieren alas de pollo con barbacoa?

— Eso suena bien — dijo Fubuki, tratando de zafarse a Tsunami del brazo — ¿Por qué no bailas con alguien más, Tsunami?

— Es que Fudo es muy tímido y si no vamos tres, no irá conmigo — se quejó el moreno. — ¿Kaze, vienes conmigo?

El peli-azul se negó. Bailar no era lo suyo.

— ¿Y tú, Endo?

Endo se atragantó con su cerveza al ver unos rostros conocidos sentándose en el booth VIP frente a ellos.

— Pero Endo, ¿que no habías bebido ya? — se quejó Fudo — Veintiún años y te atragantas con una cerveza light.

El moreno negó y con su dedo apuntó al frente.

Ventajas y desventajas de salir con un jugador de soccer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora