🍀La Hija De Bruno Madrigal🍀

🍀12🍀

Cuarto de T/n.

Al llegar a la casita tanto Bruno como Mirabel tuvieron mucho cuidado para entrar a la casa ya que desde que se reveló la visión, el ambiente en la casa se volvió tenso.

—tenemos que subir las escaleras y de ahí llevarla a su habitación—Mirabel señaló todo el camino.

El problema aquí es, la tía Pepa no se había calmado y llovía por toda la casa no había rincón que estuviera seco.

—yo los puedo llevar.—hablaron a sus espaldas.

Antonio los veía con todos sus animales a lado de él.

—suban a T/n en la espalda de mi jaguar, él los puede llevar.—sugirió.

Bruno colocó a su hija encima del jaguar y este comenzó a caminar en dirección al cuarto de T/n donde Mirabel quito cada una de las tablas que prohibían el paso.

—gracias Jaguar.—agradecieron al animal y una vez dentro, la puerta de T/n volvió a brillar sólo por poco tiempo.

—tenemos que ponerla en el agua.—Bruno se acercó al lago y la colocó dentro de él pero tratando que no se hundiera.

Mirabel también se acercó para ayudar a su tío y de repente al entrar al lago noto que tenía profundidad.

Pero parecía como si estuvieras pisando tierra.

Una ilusión.

—es hora.—Bruno dejó a su hija y salió del lago junto con Mirabel.

Para que el lago absorbiera a T/n y así comenzará una tormenta más fuerte dentro de la habitación de T/n.

De repente, T/n volvió a salir del lago pero está vez cambiada, su ropa ahora tenía lo característico de un Madrigal, su falda hacia conjunto con la ropa de su padre.

—se estabilizó.—y parecía que T/n también había recuperado poder sobre su don.

Al momento de que T/n volvió a estar sobre el lago, una gran ola de agua la rodeo y sus ojos tenían ese color rosa, rojizo y azul pare finalmente volver a su color original.

Un café claro.

—me siento con sueño.—habló T/n una vez que despertó.

Se había estabilizado gracias a su padre, en el momento en el cual les daría gracias.

La puerta de su habitación se abrió de un golpe dejando a ver a la familia de Julieta Madrigal que se mostraban asombrados.

Tenían años sin ver a T/n y en cuánto vieron que la puerta brillo, corrieron para encontrarse con esa escena.

—¿Eres tú?—Julieta no lo podía creer se acercó con cuidado y abrazo a su sobrina.

La había extrañado tanto.

—tía Julieta....—susurro no lo podía creer.

Cuando empezaban a tener un reencuentro agradable, la abuela llegó a irrumpir.

—Mirabel te dije que no debes entrar a este cuarto!!!—

Se quedó sin habla al ver a su nieta.

—abuela.....—fue lo único que dijo T/n.

Mirabel y los demás miembros de la familia notaron que el ambiente se puso tenso así que en su afán de tranquilizar las cosas.

Ocurrió algo.

—ella no ama a esta familia y nunca lo ha hecho!!!—la abuela explotó.

—eso no es verdad, yo amo a esta familia mucho más de lo que tú la amas!—y con eso T/n huyó de su cuarto.

Dejando a la abuela sin palabras.

—ella sabe como cuidar que el milagro siga en pie.—Mirabel trato de explicarle.

—eso no es verdad, ella no sabe nada, Luisa pierde fuerza por tu culpa!! Isabela esta fuera de controlar por culpa tuya!! Ahora T/n vuelve y es todo tu culpa.—

Aquellas palabras resonaron fuertemente en cada una de las personas presentes.

Bruno había ido detrás de su hija sin importarle lo que su madre le dijera.

—nunca te haré sentir orgullosa y jamás podrás a entender a T/n, no importa cuánto nosotras lo hayamos intentado, no, no importa cuánto cada uno de nosotros lo intente, Luisa nunca será lo suficientemente fuerte para ti, Isabela no será tan perfecta como quieras.......—Mirabel ahora entendía que su abuela era la culpable de todo.

—amabas mucho a T/n pero cuando recibió su don, te alejaste de ella, la dejaste ,a una pequeña indefensa que no tenía la culpa de nada, por eso ella se fue de aquí.—

—su don trajo desgracia a la familia.

Eso fue el detonante para que Mirabel no pudiera más.

—así que no lo notaste, ella tiene el don más poderoso de todos, podría ayudar a la gente si se lo propone pero tú nunca lo viste de esa forma.—

La abuela Alma no entendía nada de lo que su nieta le decía.

—te dieron una oportunidad de verlo pero no la tomaste, nunca lo entenderás, ¿cierto?—

Antes de que la abuela Alma logrará decir algo, en el pueblo aparecieron unas grietas, las montañas se partían en dos y la casita empezaba a caerse.

Saliendo todos del cuarto de T/n lo vieron, todo se empezaba a caer y estando en el primer piso lo vieron.

—no, la vela!!—grito su tía Pepa.

La vela estaba intentando caerse para ello, Mirabel corrió para tratar de sostenerla.

No permitirá que el milagro se apagará.

—Mirabel baja de ahí.—su madre Julieta le pedía y casita comenzó a sacar a cada uno de ellos.

Camilo e Isabela trataron de llegar por medio de sus dones pero no lo lograron.

No habían aprendido a vivir sin ellos.

—vamos un poco más.—Mirabel intento subir  para tomar a la vela y la torre de Bruno empezaba a caerse.

Afuera de la casa, los miembros de los Madrigal gritaban a Mirabel que bajara de ahí.

Y no se dieron cuenta de que una persona pasó a su lado para entrar a la casa que se caía poco a poco.

Mirabel logró tomar la vela y con ayuda de Casita bajo sana y salva al suelo pero con la torre cayéndose no sabría si lo lograría.

A punto de ser aplastada por un gran pedazo de roca, alguien la empujó.

Lo último que vio fue negro.