- Recuerdo cuando pusiste tus manos sobre las mías Stiles y llorando me dijiste que nunca me olvidarías. Por favor ahora no lo hagas, trataré de luchar para sanar tus heridas porque quiero sanar las mías contigo, únicamente contigo Stiles.
Empecé a llorar. No sabía que responder, no quería volver a ser defraudado y mucho menos volver a llorar por amor y cuando estaba por empezar a hablar las infinitas frases o ideas que pasaban por mi mente para poder hacerle frente a Derek quedaron en ello “frases en mi mente”, porque después de ver lo que estaba haciendo todo lo que había pensado se esfumó en un abrir y cerrar de ojos, pero no iba a ponérselo fácil aunque me doliese verlo así.
- Derek suéltame por favor…
- No Stiles no te soltare hasta que me perdones.
- Me estoy cansando Derek. Suéltame ahora mismo, porque juro que en donde no lo hagas vas a conocer al Stiles que has venido a buscar, y estoy tratando de controlarme, pero si sigues así no respondo Derek, ¡así que suéltame ya!
- Y yo te he dicho que no te voy a soltar Stiles
- Aaah Derek he dicho que sueltes, pero primero tienes que bajarme.
- No Stiles no te voy a soltar.
- No entiendo lo que tratas de hacer Derek, se suponía que eras la persona más importante para mí, pero no sé si dejaste de serlo. ¡Estoy confundido, muy confundido!... ¡Dios!, si fuera tan fácil de expresar todo lo que siento, ten por seguro que tu presencia en este momento sería innecesaria.
- Stileees, por favor…
- No Derek, no hay un por favor… Cada día que pasaba me mantuve aislado de la manada, agonizando segundo a segundo con todo lo que mi mente imaginaba, y aun así esperaba que reaccionaras y te pusieras de mi lado, que confiaras en mí aunque dudaras de todo lo que hiciera, pero lo importante de todo es que te necesitaba a mi lado. Necesita a mi padre a mi lado Derek, a la persona que por ley natural tenía que amarme y confiar en mí, pero no lo hiso. Necesitaba a Scott, a mi hermano, pero tampoco lo hiso y la “manada” tampoco. Yo siempre fue el humano débil como ustedes me llamaban, pero a pesar de ser un simple humano, siempre estuve dispuesto a cualquier problema que pudiera enfrentar la manada. Siempre lo estuve Derek.
Ustedes para mí eran la familia que siempre desee tener, pero he aprendido algo con todo esto ¿Confiar?, cuando confías en las personas de la manera que yo lo hice con ustedes, hay que comprender que se arriesga a ser decepcionado…
Mis lágrimas rodaban por mis mejillas sin parar, me sentía vacío, frustrado por todo lo que había pasado y aun así tenía la necesidad de que Derek me abrazara y me dijera que todo iba a estar bien.
Derek me bajó de entre sus brazos y me sentó en la única silla de mi habitación, y cuando al fin lo hiso empezó a llorar como nunca antes lo había hecho. Lo que estaba viendo era el lado que Derek había perdido, aquel lado que nunca había permitido que lo conocieran y lo había aislado en la más profunda oscuridad de su mente.
- Stiles, cuando me enteré que tú eras mi compañero me sentía confundido, defraudado conmigo mismo por no ser lo suficientemente capaz para hacerte feliz, por ser yo quien te dañara y corrompiera la inocencia que hay en ti.
Tan solo mírame. Ni siquiera sé que es lo que viste en mí porque aún no logro entender que parte mí te atrae Stiles, sé que soy una persona egoísta por quererte a mi lado, pero no sé qué hacer Stiles. El hecho de imaginar que puedes ser feliz al lado de otra persona me alegra y a la vez me entristece, me hace perder mi humanidad porque caigo en cuenta que debería ser yo quien fuera la persona que provocará tus sonrisas y toda la felicidad que pudiera rodearte Stiles.