Al ver que Stiles caía al suelo, todos los presentes de la manada se sintieron aludidos por el suceso. Nunca llegaron a imaginar como un miembro al que creían el más débil iba a significar tanto.
Scott, Lydia, y Malia se habían dirigido hacia el hospital de Beacond Hills donde ya se encontraba Stiles, después de varios momentos de espera el susto pasó, por suerte no fue nada grave según les informó Mellisa, más bien se debía a una deshidratación leve.
Los días siguientes fueron diferentes a todos, los chicos se habían acercado más a Stiles e incluso Derek lo hacía por momentos cuando notaba las molestias que Stiles tenía, más dudaba en hacerlo cuando Paige se encontraba junto a él. Lo raro de todo es que ninguno había notado el crecimiento que particularmente posee un embarazo en Paige y es más se encontraba a una semana de cumplirse los tres meses para el nacimiento según Deaton les había comunicado.
Narrado por Stiles
Después del incidente que me ocurrió aquella tarde Scotty y Lydia nunca se habían separado de mi lado, se habían vuelto más melosos de lo normal, y en estos últimos días Malia, Kira e Isaac también se habían unido a el nuevo grupo formado.
Hoy me encontraba en la sala de espera de Beacond Hills, en vista de que Mellisa no llegaba y mientras el tiempo pasaba mi desesperación empezó a aumentar.
- ¿Disculpa te puedo ayudar en algo?, una voz misteriosa proveniente de un hombre muy simpático me despertó de mi trance.
- No, nada. Solo espero a la enfermera Mellisa.
- ¿Mellisa?, si es algo urgente que necesites puedo ayudarte.
- Gracias, asentí con una pequeña sonrisa.
- Por cierto mi nombre es Zend Hoyer, soy médico profesional y por ahora estoy en Beacond Hills realizando un aporte en mi especialidad.
- Stiles Stilisnki, respondí algo cohibido por la manera tan elegante de presentarse e imponerse.
- ¿Te puedo llamar Stiles?
Al escucharlo mi menté se congelo un momento, luego asentí a manera de confianza.
- En unos minutos más mi turno terminará, y como soy nuevo en este pueblo me gustaría que acompañaras a recorrer algunos lugares que deseo conocer. ¡Claro si deseas!
- Por supuesto, además no tengo nada más interesante que hacer.
- Gracias Stiles.
No había caído en cuenta que hoy tenia entrenamiento con la manada, pero nunca mi presencia era tan importante como la de ellos, además siempre pasaba sentado intentando descifrar lo que sucedía con ella, así que di por hecho que no me necesitarían, incluyendo que Derek y Paige se encontraban ahí.
La tarde pasó sin ni siquiera darme tiempo a pensar en lo preocupado que podría estar mi padre o Mellisa por no haberla esperado.
Al llegar a casa lo único que hice antes de acostarme y divagar entre mis pensamientos fue revisar mi teléfono tenía varias llamadas perdidas de Scott, Lydia, Mellisa, ¿Isaac?, y las de mi padre. Una vez que vi todas ellas apagué mi celular y me acosté en mi cama.
No podía creer que había pasado la tarde con un completo desconocido, pero su presencia me hacía sentir bien, me sentía protegido y amado a la vez, y no es ese amor que aún le tengo a Derek , es más el amor que un hermano mayor inculca en el menor.