El Poder Siniestro

Capítulo 20

Pensaba que los zyrs olvidaban cuando los castigaban que eran mortales.

Más frágiles que ellos, aunque no más débiles.

Rogert no estaba tan familiarizado con los azotes como parecía que Danelle lo estaba.

Apenas había gruñido mientras el látigo le rasgaba los músculos contraídos de su espalda.

Veinticinco azotes no eran algo que se tomaba a la ligera, así que cuando Rogert puso a Danelle en su cama con ayuda de Nanuel, estaba terrible y los demás se les quedaron mirando. Algunos ofreciendo ayuda. Aunque Rogert la negó, pero cuando Armani más se ofrecieron, amigos de Armani. Él al igual negó diciéndoles que volvieran al trabajo para no tener más como Danelle. Solo a una joven le pidió algo que Rogert no logró escuchar.

-Ve por los medicamentos - le dijo Rogert a Armani antes de que empezara a llorar como siempre hacía en las situaciones de estrés.

Danelle estaba saliendo y entrando de la inconsciencia boca abajo en la cama de Rogert, ensuciando las sabanas. Lo habían llevado a la suya porque era la más cercana a la entrada y Danelle era puro músculo pesado. 

Se preguntaba si estaba en tan buena forma por sus anteriores trabajos o por sus propios medios.

Podía ser útil para La Fortaleza. Aunque desde la primera vez había sentido la oleada de problemas que traía, y eso lo confirmaba.

-Necesitamos limpiar y mantenerlo dormido-dijo Freia.

Sabían a qué se refería así que Nanuel lo regresó a ver.

-En un momento llegará Armani, gracias por la ayuda, ve a terminar. No queremos tener otro así- le dijo Rogert.

Nanuel asintió y se fue. Él tenía suficientes secretos para arriesgarse a que lo castigaran. No era estúpido como Rogert, pero a diferencia de Nanuel, Rogert era un cherly. Acostarse con Elaenia tenía sus ventajas. Aunque no era el favorito, pero no se arrepentía de no serlo.

Danelle regresó de la inconsciencia y se movió, quejandose.

-No te muevas- le dijo Rogert y se dio cuenta de que la sangre en la boca de Danelle no era por los golpes, sino de que se mordía la lengua del dolor.

Rogert fue por un calcetín del cajón que compartía con Nanuel y se lo dio a Danelle en la boca, aunque apenas abrió los ojos. Armani llegó con una caja de madera gastada. La abrió y sacó una jeringa y vio el interior de la caja tenso. Rogert también tensó la mandíbula cuando Armani lo miró. Ambos sabían lo que debían de hacer si querían ayudarlo. Los dos se quedaron pensando en la idea.

Drogar a Danelle.

Era ilegal la droga entre los esclavos como casi todas las pertenencias que no se las daba su amo. Era fácil para Rogert conseguirla, ya que se la daba La Fortaleza, pero usarla en Danelle era ilegal tanto en la Ley Zyr como para La Fortaleza. Trataba de mentalizarse en que Danelle tal vez era una buena causa, tal vez y se uniera a ellos. Rogert había estado pensando en eso, en la posibilidad que había. Así que tomó la decisión asintiendo a Armani.

Metió la mano a su colchón y sacó del relleno el frasco de vidrio con líquido amarillento para dárselo, cuando terminó se les quedó mirando a ambos.

-Agárrenlo- les dijo Armani.

Freia y Rogert pusieron sus manos sobre los brazos y cabeza de Danelle.

Danelle se tensó con el tacto y gruño, lo sostuvieron cuando Armani lo inyectó en el cuello, presionando el émbolo para que la droga entrara en su vena. Danelle sintió el piquete y se exaltó pero las manos no lo dejaron moverse. Segundos después Danelle perdió por completo el conocimiento y cayó rendido.