Capítulo XIII

3.6K 310 55
                                    

POV ANDI

Amanecí un poco mejor comparado con la mierda que sentía en el pecho ayer por la noche.
La charla con Luka en parte había resultado reparadora, creo que no hubiese podido tener una conversación así tan... profunda, con MJ o Jana. Quería mucho a las chicas, pero no siento que ambas tengan el grado de madurez que presentó Luka. Espero estar equivocada, puesto que también me encantaría poder contarles todo con lujo de detalle, y así aliviar un poco el tornado de emociones que siento. Las descargas, por más potentes que fuesen y más dolorosas que se sientan, son necesarias para aliviar opresiones que surgen luego y no sabemos a qué se deben.

Estiré mi cuerpo, me coloqué un buzo oversize rojo encima del pijama, y despacio comencé a bajar las escaleras.
MJ se encotraba en el baño dándose una ducha, Jana estaba sentada en el sillón con el celular en su mano.

Apenas me vio se dirigió hacia mí diciéndome -Hey Andi, no escuché ayer cuando llegaste - dejó su celular a un lado -¿Cómo te sientes?

Restregué mis ojos, la luz natural  entrando por la ventana me había encandilado y, sinceramente, aún tenía ganas de permanecer acostada con los ojos cerrados.

-Más o menos a las 3am volví, y pues... Sí, me siento un poco mejor pero me costará unos días digerirlo del todo, sabes? -le contesté.

-Es entendible amiga, apenas pasó un día. -me dijo haciéndome seña para que me sentara junto a ella.

-Tienen razón, igualmente no se preocupen demasiado. Ya pues, me gustaba solamente, y nada entre nosotras iba avanzando así que... Será facil, descuida -dije con un suspiro.

-Andrea Agosti te voy a pedir que ya dejes de menospreciar tus emociones. No viene al caso de si hace poco tiempo o no que te gusta, o si te gustaba mucho o poco. Aquí debes saber que sea como sea, ocultarlo y fingir que no sientes nada es lo peor. -dijo firmemente Jana.

-Joh está bien -protesté y me tomé de la frente. Luego rápidamente cogí un almohadón que había por allí, el más cercano, y me lo puse en la cara para gritar fuertemente sin que el sonido sobrepasara las delgadas paredes de yeso.

Pronto MJ salió del baño, miró con preocupación la escena pero Jana inmediatamente le dijo que haga silencio, que en cambio se una a nosotras.

Las tres me acompañaron, estaba agradecida de poder tener tan buenas amigas. A veces no hacen falta dos mil sermones, simplemente con la presencia y el silencio bastaba.

-Muy bien ya está -dije agotada desprendiendome del almohadón -ahora no lo podré tocar más sin primero recordar que esa cosa fue testigo de mi lado cursi amoroso en plena crisis -lo arrojé rapidamente hacia la otra punta de la habitación, como si de algo desagradable se tratase.

Ambas comenzaron a reír por lo que acababa de decir, yo también lo hice.

Toc toc

-Si? -grita MJ. Le pedí que no vaya a ver sin antes esperar a que la persona que se encontrara detrás de la puerta diga quién era primero. Mis fachas eran fatales, aún ni siquiera me había podido lavar el rostro.

-Colucci, reina -sonó ese tono engreído perteneciente a Luka. El chico se me está haciendo más agradable y divertido que molesto. Creo que a esa actitud despectiva que lleva con todos la termina haciendo a propósito, como si tuviese creado una especie de personaje o identidad artística además de lo que realmente él era.

-Ustedes continúen con sus cosas, chicas -dije levantándome del sillón.

-Están segura? -dijo Jana claramente confundida, pues no estaban todavía al corriente de que últimamente Luka y yo veníamos conversando de vez en cuando.

Querías que todos lo supieran, no? | ENDIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora