Capitulo 29: Duelo

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"¿Mamá? ¿Que haces aquí?", pronunciaba aquellas palabras una vez que entraba a mi apartamento y la veía sentada en el sofá junto a Sebastián.

"Solo pasaba a ver a mi hijo, ¿Acaso no puedo ver como se encuentra mi hijo después de cinco años de no verlo?".

Yo no sabia exactamente que decir, solo me senté a su lado, sentia las manos temblorosas, ¿Que podría decirle a mi madre después de todo lo que le dije la última vez que la vi?.

Sentía que las palabras estaban a punto de brotar de mi ser, cuando de pronto... solo desperté.

Abrí los ojos poco a poco, percibía un delicioso aroma a tocino a medio freír, café hirviendo y... ¿Limpiador de pisos?.

-¿Sebastián? -Pregunte al levantarme de la cama, luego sali del cuarto.

-Asi que ya despertaste, siéntate hermano, hice el desayuno -Me dijo aquel chico con su pequeño delantal puesto.

-Gracias, no tenias porque hacerlo, aun así... -Me interrumpió algo abrupto.

-No hagas esperar a los huevos con tocino, están esperando por ti -Me dijo sonriente aquel muchacho.

Él se parecía a mi de joven, cualquiera diría que es un clon mío, aunque la diferencia era que él salió más normal.

Solo disfrutamos del desayuno tranquilamente, crei que me preguntaría por Valerio, sentía su curiosidad, pero al parecer tenía vergüenza de hacerlo y quizás era lo mejor.

Por otro lado aun percibía ese olor como a limpiador de pisos, era extraño ya que nadie había limpiado el piso o al menos eso creí.

-¿Que huele así? -Pregunte al darle el ultimo sorbo a mi café.

-Limpie un poco, sentí que debía ayudarte un poco más con las tareas del hogar -Me dijo mientras levantaba la mesa.

-Ya veo, lo agradezco, pero no tienes que hacerlo, al final del día eres mi invitado -Le respondí levantándome para darme una ducha e irnos al trabajo.

Después de un rato ya estaba preparado para partir, pero algo sucedió.

-¿Crees que me pueda quedar Hoy en casa? Solo seria hoy para asear un poco, ya que últimamente tienes más responsabilidades -Me dijo en un tono muy tranquilo, aun así percibía que estaba algo alterado, lo notaba en sus ojos.

-De acuerdo, pero si pasa cualquier cosa corre con la vecina de enfrente y llámame al celular -Le dije algo preocupado, me daba un poco de ansiedad dejarlo solo.

-Si, no tienes de que preocuparte, incluso si llega Valerio yo te avisaría -Me dijo mientras estaba sentado en el sofá mirándome directamente.

Quizás también ya se había aburrido de acompañarme diariamente a mi trabajo, era entedible ya que cualquier chico de quince años se aburriría de eso.

Así que salí de casa con algo de incertidumbre por la situación, aun así debía mantener la calma aunque mi vida poco a poco estuviera volteandose.

Cuando llegue al café todo estaba bastante normal, Kevin estaba atendiendo los pocos clientes que habían.

La verdad me sentía sin ganas de nada, no saber nada de Valerio me carcomia un poco por dentro, dejar a mi hermano solo en casa también me angustiaba.

Aunque todo eso se calmo un poco cuando lo vi entrar, Taylor iba llegando tan sensualmente imposible.

-Llegaste, crei que podría llegar antes que tu -Me dijo sonriendo, sintiéndose tan genial como siempre.

Lazos De Sangre (BL) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora