ɴᴏᴠɪᴏs ǫᴜᴇ sᴇ ᴏᴅɪᴀɴ |ʷᵃⁿᵍˣⁱᵃⁿ✅

Capítulo 7: Realizaciones

Después de ser consolado por su hermana y finalmente tener que irse debido al regreso de Jiang Cheng (el hombre hizo un escándalo porque la persona que iba a visitar estaba demasiado preocupada por su hermano), Wei Wuxian regresó a los túmulos funerarios, la misma frase resonando en su mente y corazón mientras se distraía, —¿Amo a Lan Zhan? Tal vez amo a Lan Zhan. Creo que amo a Lan Zhan. ¡Amo a Lan Zhan!

Pensó en todas las cosas que Lan Wangji había hecho por él en los últimos días y en los últimos años. En retrospectiva, le había gustado Lan Wangji desde el momento en que lo vio. La incesante necesidad de querer la atención de Lan Wangji, de disfrutar de su presencia, de significar algo para él, siempre se había apoderado de Wei Wuxian, sin que él se diera cuenta de por qué.

Solo ahora se dio cuenta de lo que era: amor. ¿Pero serian sus sentimientos correspondidos? Probablemente no. Jiang Yanli le había dicho que Lan Wangji lo trataba de manera diferente, pero fue solo porque Wei Wuxian lo puso nervioso. Lan Wangji solo lo toleró, porque tenía que hacerlo. No había amor entre los dos.

—¡Wei Wuxian! ¡Deja de pisotear las papas!— Wen Qing gritó detrás de él, sacándolo de su ensimismamiento.

Estupendo. Ahora estaba confundido sobre el estado de sus emociones y las papas. ¡Que día!

También estaba todavía confundido por perderse la boda de su hermana. El Wei Wuxian del pasado, que podía colarse en Cloud Recesses, había muerto cuando cayó en Burial Mound. Todo lo que quedaba era el caparazón de un hombre, que apenas se mantenía unido. Sentía que lo había perdido todo, su propósito, su cordura y su felicidad, e incluso el amor recién descubierto por Lan Zhan estaba condenado al fracaso y a hacerlo más miserable.

Brotando en estos pensamientos, Wei Wuxian regresó a su cueva. Allí, se arrojó sobre la cama compartida con Wangji y comenzó a llorar.

Meses y meses de emociones reprimidas quedaron al descubierto, mientras lloraba a mares. Su caída en los túmulos funerarios, las muertes que vio y alimentó durante la Campaña para derivar al sol, las personas que mató para salvar a Wen Ning, los espíritus lo acosaban y lo hacían responsable. A los espíritus resentidos se les había prometido venganza y Wei Wuxian establecerse pacíficamente y sofocar su impulso de destruir era contraproducente para su mera existencia. Querían que usara estos poderes, obtuviera más venganza y se hiciera cargo de todo lo que les habían quitado. ¡Avanzar y perdonar no era el camino!

Lentamente, un zarcillo de energía oscura se elevó del suelo, sin que él lo supiera, mientras todas estas emociones y voces inundaban su cabeza y salían de sus ojos como más y más lágrimas. Luego un zarcillo más. Luego dos más. Cuatro más. Ocho más. Muy pronto, Wei Wuxian estaba rodeado por una jaula de energía oscura y resentida.

Pero él no lo sabía. Después de estallar como una presa, no le quedaba energía. Completamente agotado, perdió el conocimiento, sin darse cuenta de su entorno.

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—¡Wei Wuxian! ¡Basta! ¡Despierta!

—¡Joven maestro Wei! ¿Puedes oírnos?

—¿Alguien puede llegar a él?

—¡Si tan solo esos zarcillos resentidos dejaran de atacarnos!

Al regresar, Lan Wangji podía escuchar gritos y gritos en la distancia. Al escuchar el nombre de Wei Wuxian, su sangre se heló. Se apresuró hacia la cueva, todavía con un A-yuan adormecido en sus brazos.

A primera vista, la cueva estaba completamente vacía, un poco demasiado vacía, parecía completamente sin luz. Al acercarse, Lan Wangji se dio cuenta de que era aún peor, la boca de la cueva estaba cubierta con una película gruesa y translúcida de energía resentida.