Ya quedan 20 minutos para que la clase empiece, y antes de ir para allí, decido ir a dar un paseo hasta ahí escuchando música. De repente me doy cuenta de que Liam está delante mío y que va a un parque lleno de árboles y bancos. Como tengo curiosidad de a dónde va, decido seguirle. Como dice un refrán, "la curiosidad mató al gato", y me da la sensación de que me va a pasar algo, sea bueno o malo.
-¿Por qué me sigues, Tabla?-mierda, me ha pillado. Yo me hago la tonta y sigo como si estuviera escuchando música y no le hubiera oído, y sigo corriendo como si nada.
-¡¡¡TABLA!!!-me grita a la oreja.
-¡OYE, QUE NO TE HE OÍDO!-casi me ha dejado sorda.
-No te hagas la tonta y dime por qué me has seguido hasta aquí.
-No sé de qué me hablas, Duende.
-Ay, mi querida Tabla, cómo te odio-y me coge el collar que tengo en el cuello con su dedo índice. Es del árbol de la vida, una luna, y una cadenita. Me lo regaló mi hermana, ella tiene uno igual.
-¿Qué haces? No pretenderás romper mi collar, verdad?-pero ya es demasiado tarde, me rompe el collar y me mira para ver mi reacción. Yo reacciono de la peor manera posible, que es irme corriendo y llorando a la academia. Cuando llego, la profesora Lawrence está preparando la clase, y cuando me ve se acerca a mí.
-Reese, ¿qué te pasa?
-Nada...-sigo llorando.
-Nada no, porque estás llorando. ¿Dónde está tu collar?
-De eso se trata, que el chico de ayer me ha arrancado el collar de mi cuello, pero es que no puedo perderlo, me la dio mi hermana...-y empiezo a llorar cada vez más.
-Reese, Reese, tranquila, tranquila, recuperaremos ese collar que tanto te importa. No es justo...
-Gracias...-y me seco las lágrimas, me pongo las zapatillas y empiezo a estirar después de hacerme el moño.
La señora Lawrence desaparece y cuando me doy cuenta, Liam está a mi lado sentado...
-Tabla...Toma el collar. Era una broma pesada, pero ¿por qué te importa tanto el collar?
-Eso no te incunve, ¿me oyes? Ahora déjame en paz-pero él me abraza. Este chico es más bipolar...
-¿Pero qué haces? ¡Que me dejes en paz! ¿Tan difícil es de verdad?
-Vale, como tú quieras. Toma tus collares.
-Es uno, dividido en tres partes Duende...
-Lo que sea. Venga, hasta otra-me da el collar y se va.
-Venga, empezamos la clase-y para cuando me doy cuenta, todo el mundo está en clase preparado.
-Hacemos primera, segunda, tercera, cuarta, quinta...-y así empieza la clase, como ya veo. Ligero, pero preciso.
-Señor Duncan, esas manos bien colocadas por favor...primera, segunda, tercera...señorita White, la mano izquierda más elevada...ahí, quédate quieta y dura 10 segundos ahí... los demás también...-pero me caigo a los 6 segundos al suelo. Una compañera viene a donde mí para ayudarme a levantarme.
-Gracias-y le sonrío.
-No pasa nada por haberte caído, nos suele pasar a todos-y ella también me sonríe.
-Señora Lawrence, quiero volver a intentarlo-y me pongo de puntillas con esos zapatos e intento aguantar lo máximo posible.
-Uno, dos, tres, cuatro...¡diez! Muy bien, señorita. Me da que has conseguido el papel principal. Has demostrado que no te rindes nunca, así que serás la protagonista. Pero...-joder, ya viene el "pero".
-Pero...-digo yo para que continúe.
-No tenemos una pareja adecuada para tí, necesitamos a un chico. Hemos decidido, y me da que no te va a gustar mucho, pero tú piensa que sólo es para bailar, nada más-no digas su nombre, no digas su nombre...
-Liam Jones-¡No! ¡No puedo hacerlo!
-Vale... si no hay otro remedio...-mierda, mierda, mierda. ¡Maldición!
-La cosa es que tú pesas muy poco, pero necesitamos a alguien que tenga la misma pasión que tú al bailar, y él la tiene aunque no lo parezca. Pero si quieres bailar con otra persona...
-No, da igual, ya me acostumbraré a esto...-y le miro a Cam. La verdad es que sí quiero bailar con él, la cosa es que él me odia...bueno...y yo a él también...más o menos...
-Así, vamos a empezar a ensayar. Vosotros, haréis este paso-y lo hace para enseñarlo, y así estuvimos toda la tarde hasta que se terminó la clase.
Cuando estoy yendo para casa, veo que Cam no viene ni detrás mío y no le he visto desde la academia, es raro. Pero bueno, no le doy mucha importancia y sigo adelante, y alguien me coge del brazo. Que no sea él, que no sea él...
-Ey, no me has esperado-es Cam. Menos mal.
-Sí, soy yo. Menos mal, ¿eh?
-¿He pensado en alto?
-Sí... Pero da igual, tranquila. Al menos no has dicho nada malo. Siento mucho lo de Liam y tú... que tengáis que bailar juntos y eso...-pobre Cam. Está preocupado por mí.
-No te preocupes por mí, estaré bien.
-No es eso, es que puedes caer en su trampa y luego...-entiendo que esté preocupado por mí, pero me da que no tengo elección...
-Si te pasa algo con él, tú dime y ya hablaré por ti-me abraza y se va. Es muy majo, es raro que no tenga tantos amigos.
Por fin estoy en casa, y la policía está en la puerta esperándonos a mí y a mi madre.
-Hola, venimos a comunicaros que tenemos noticias de su hija, bueno y de su hermana-en ese momento mi corazón ha dado toda la vuelta, y lo tengo a mil por hora. Tengo miedo de que le haya pasado algo.
-Bueno me gustaría informaros de algo...-me da que es una mala noticia.
ESTÁS LEYENDO
Y todo porque me he mudado aquí
RomanceReese White se ha mudado a un nuevo lugar con su madre para empezar desde cero desde que su hermana despareció. Reese se inscribe en una academia de baile. ¿Le saldrá todo bien en esta nueva vida? ¿Encontrarán a su querida hermana?