Camilo.
Apreté mis labios soltando un ligero suspiró mirandola. Solo espero que por lo que diré no me vaya a odiar más o algo así, realmente desde que comencé a conocerla más quería ganarme su amistad y confianza.
— lamento si no te dije la verdad... tenía algo de miedo, más que nada por que nos conocimos en un lugar que esta prohibido. Creí que eras alguien que me acusaria con mi familia por estar ahí. — levante mi vista notando que aún tenía sus brazos cruzados. — no sé en qué estaba pensando... creí que la magia quizás la reacciones mal o te asustes. Por eso no me transforme cómo soy realmente.
Bueno, mentí en la última parte. No iba a decirle tan pronto que siento algo por ella.
— ¿entonces también tienes un don?...
— mmm bueno, lo tenía pero antes de contarte todo ¿no quieres ir a buscar un par de zapatos? Para que estés cómoda.
Ella oculto su pie en su pierna un poco apenada. Reí un poco... no tarde en conseguirle un par de zapatos con alguno del pueblo que amablemente me los pudo regalar, lo único malo es que le quedaban grandes a _____ ya que eran zapatos de hombre.
— entonces por la vela ¿ya no tienes casa ni don? — preguntó ella mientras caminábamos por el parque, creo que ya no está tan molesta después de todo.
— así es, la vela era muy especial para la familia... mi abuela siempre nos cuenta la historia, quizás deba contártela después.
— tal vez.. aún no sé si realmente deba seguir hablando contigo.
— lo entiendo... te daré tu espacio para que pienses las cosas. — le sonreí muy apenas. — debo irme a cas.. bueno, a reunirme con mi familia.
— gracias por conseguirme unos zapatos.
— no es nada... si llegas a ver a mi prima. Por favor dímelo.
Le había contado lo que pasó y por que buscábamos a Mirabel. Ella solo asintió y comenzó a caminar hacia dónde estaban sus hermanitos. Bien hecho Camilo... la única amiga que tenias y lo arruinaste.
Mientras caminaba hacia lo que quedaba de casita oí las campanadas de la iglesia lo que me hizo correr hasta llegar a casa encontrándome con mi familia y Maribel que había regresado.
— había abejas en todas partes. — mencionó mi tío Agustín. — estaré bien...
— mmm no si no tenemos una casa. — mencioné algo obvio y mi padre me dio un golpe con su codo para que me callará. — ¿qué? No la temenos ¿no quieres que diga la verdad? Eso de ahí, no es una casa.
Señalé los escombros de lo que alguna vez fue nuestra casita.
— mira este hogar, aun guarda esperanza. Cimientos nuevos podemos vislumbrar y esta familia, constelación que estalla. Esperara su momento de brillar. —
Mi familia y yo comenzamos a entrar por la puerta de la casita que aún seguía en pie.
—Mas ardiendo han de alumbrar y cambiar de dirección. Debemos despertar.
Son más que solo un don —
Mi prima Luisa comenzó a levantar algunos pedazos de madera y la familia comenzó a ayudarle hasta que vimos a la abuela llegando igual, mi madre y mi tía Julieta se acercaron a ella.— y yo me aferraba y fue un error. Mi gran temor los alejo Aprendo la lección, la magia no es un don... —
Notamos la presencia de alguien más que se escondía en lo que restaba de pared apareciendo poco a poco...
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𝐌𝐢 𝐄𝐧𝐜𝐚𝐧𝐭𝐨 | Camilo Madrigal
خيال (فانتازيا)Camilo, deja de cambiar tu apariencia ya noté que no eres Mariano.