Prologo

700 74 5
                                    

Y un sentimiento de abandono le peso en el pecho. Cada que recuerda las palabras de su abuelo, cada que ve esa foto en su cuarto, cada vez que Mira y Daewi se van y lo dejan solo.

Su mirada se cruzó con un Alfa de sudadera gris, ojos azules medianoche y mirada astuta. Y de pronto el peso de la soledad se volvió un deseo, el deseo de desaparecer ese asentimiento y pasar sus días con él. Su estómago dio vuelta, sus mejillas se ruborizaron, y aunque él no lo sabía, sus ojos brillaron en anhelo por el alfa.

La fuerza de Ilpyo Park era descomunal, y lo hizo estremecer de emoción, es perfecto, justo lo que él buscaba.

El más hermoso omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora