Si pudieras cambiar algo de este mundo... ¿Qué sería? | Yoonmin

Capítulo 22: El Santo rojo.

Amapola roja: Placer y lujuria.

...

¿Ese tipo es siempre tan raro?... Por la madrugada había llegado un curioso hombre a su cabaña, era muy extraño ya que nadie nunca pasaba por ese lado del reino Park. Estaba tan confundido porque había llegado con una bolsa llena de monedas, realmente necesitaba el dinero pero no sabía muy bien que tenía que hacer para poder ganarlo.

-Mi señor simplemente solicita algo muy tonto. -Mencionó aquel sujeto. -A cualquier persona que pase por aquí preguntando en donde queda el reino Kim, debe decirle lo contrario.

-No entiendo... -Respondió el dueño de la cabaña. -Además ni siquiera se tu nombre y tú no sabes el mío.

-Que irrespetuoso soy, me disculpo por mis bastos modales... Mi nombre es Byun Baekhyun, mucho gusto. -El chico hizo una ligera reverencia mientras que en su rostro posaba una sonrisa algo perturbadora. -¿Y su nombre cual es?

-Me llamó Choi Beomgyu, mucho gusto señor. -Respondió mientras hacia igualmente una reverencia.

-Ahora si le explicó señor Beomgyu. Verá, justamente aquí yace la frontera entre los tres reinos, hacia el lado norte se encuentra el reino Kim y por el lado sur encontramos el reino Min. -Comenzo explicando Baekhyun. -Ninguna persona se asoma a está parte del reino y muy pocos saben de esta intersección.

-Eso es verdad, en todo lo que llevó viviendo aquí no se ha asomado ninguna persona. -Comentó Beomgyu.

-Y probablemente nunca lo hagan... Pero si alguna vez llega alguien pidiendo la ubicación para ir al reino Kim usted debe decirle lo contrario. Osea, debe decirle la dirección hacia el reino Min.

-Eso parece sencillo, ¿podria preguntar el por qué quiere que haga eso? -Preguntó Beomgyu quien estaba recibiendo las monedas por parte del contrario.

-Algunos fugitivos escaparon y seguramente van a venir por estos lados, como el reino Park esta aliado con el reino Min ellos nos ayudarán a capturarlos. -Respondió Baekhyun subiéndose a su caballo. -Muchas gracias por su colaboración... Ah si, se me olvido decirle algo, si me llegó a enterar que les dio la dirección correcta, puede darse por muerto... Yo mismo lo mataré con mis propias manos, ya que habrá cometido traición contra la familia real.

-O-Oh claro... N-No se preocupe por eso. -Beomgyu hizo una reverencia perfecta, sus manos estaban sudadas y su respiración estaba agitada. El chico presente le causaba mucho temor y sabía que podría cumplir su palabra. -Tenga un buen viaje...

Sin nada más que decir, Beomgyu se adentro a su casa mientras que Baekhyun comenzaba a cabalgar en dirección al palacio Park, siempre conservando aquella sonrisa sádica y siniestra. Baekhyun, más conocido por todos como "El perro leal del rey Park" o "El Santo rojo" se caracterizaba por hacer el trabajo sucio del rey. El menor estaba obsesionado con su alteza real, pero su obsesión era enfermiza. Él no era ninguna broma, su espada había matado a tantas personas que Baekhyun ya había perdido la cuenta, todo simplemente para satisfacer a su majestad. Chanyeol algunas veces lo maltrataba por simple diversión o porque estaba aburrido, los golpes del rey eran tan excitantes para Baekhyun. Él estaba dispuesto a morir por su alteza, con tal de tenerlo siempre a su lado sería feliz, no importaba lo que esté le hiciera.

Baekhyun estaba cegado de amor. Ese chico era tan enfermizo y masoquista que no se daba cuenta que simplemente era uno más de los peones de Chanyeol, un simple esclavo. Pero no importaba, le excitaba tanto ser el esclavo de su majestad.

-¿Por qué su majestad querría qué hiciera esto? -Pregunto para si mismo.

La misión que le había encomendado el rey Park fue que les dijera a todos los que vivieran cerca de las fronteras que si alguna vez un chico pasaba por ahí le dieran la dirección equivocada, a cambio de eso les iba a dar muchas monedas de oro. Baekhyun no entendía muy bien para que era eso, pero siempre cumplía cualquier misión que le diera su majestad.