La DEA
Lo perdí... he perdió a Tom... ¡soy una idiota!
¡No me di cuenta que lo estaba perdiendo de verdad! ¡Soy tan imbecil!
Lo lastime...
—¡Kylie aquí estás! Te estaba buscando...— Milli se detiene y me mira — ¡¿Que te paso?!
— Lo perdí Milli... se fue... lo eché todo a perder...
— ¿De que hablas?
— ¡De Tom! Ahora si se acabo de verdad... y es mi puta culpa.
— El no se irá de ti, te ama— con eso me echo a llorar otra vez — él no se iría... jamás se apartara de ti...
Me toma de las manos.
— No... Milli... no lo viste, le he roto el corazón, lo he herido... dijo que lo estaba matando... se rindió... ¡me lo dijo!
— p-pero...
— me odia...— lloro en sus brazos y ella acaricia mi cabello.
— Kylie...
— ¡Jamás me perdonara que me enamore de Tyler!
Se tensa de pronto y carraspea.
— Kylie... me da coraje que lo estés y que ya lo aceptes... pero... esto iba pasar tarde o temprano.
Me levanto de golpe — ¿Qué?
— Era obvio que te gustaba Tyler, lo noté desde la discusión en la cafetería, y a él le gustabas...se le notaba.
— C-como...
— Kylie, ambos se gustaban, no lo sabían y no era tan fuerte como ahora, pero Kylie abre los ojos por favor, míralo y ve la bestia que es, te trata bien si, te ama si, te cuida si, pero te hizo daño, y le hizo daño a muchas chicas. Es un asesino mafioso.
Asiento— lo sé... pero... dime Milli...¿cómo me quito lo que siento por el? Por favor dime...— limpio mis lagrimas mientras derramo mas.
— Amiga, no lo sé. — besa mi frente — Quisiera tenerte la solución, una respuesta... pero no la tengo.
— Milli perdóname... lo amo...— lloro más fuerte.
Mi pecho se encoge, siento que me desmayare, me duele todo, me siento estupida, les falle a todos y me volví a fallar a mi misma, soy una mierda, no merezco tanto apoyo.
No merezco que esta gente me quiera y esté ahí para mi.
Me quiero morir.
— Se que lo amas, y amar no es un pecado..
—¡No! No me justifiques, ódiame, grítame, di que soy una idiota.
— Kylie, debes luchar contra estos sentimientos, que yo... te diga esas cosas no cambiará lo que sientes por él.
— ¡Es que siento que nada me deja entrar en razón!
—¡Chic!¿Qué carajos te paso?— Alexa entra por la puerta y nos sorprende
— luego te digo— contesta Milli— ayúdame a levantarla y a arreglarla un poco.
Ambas me toman de los brazos y me levantan haciendo que me siente en el escritorio.
— Kylie, se que ahora estás en una crisis pero necesitas recomponerte, tienes una misión y debes terminarla.
— No puedo, me rindo.
—¡No! — grita Alexia — sea lo que sea que te suceda no debe ser más fuerte que tu, eres una perra y debes seguir siéndolo, termina esto y después lloras lo que quieras. Primero Tyler y después lloras como magdalena.
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NADA SERÁ IGUAL
Novela JuvenilNada será igual Kylie una chica de dieciocho años, quien está por empezar la universidad, y sus planes no saldrán como lo esperan, ya que al llegar a los dormitorios de la universidad se da cuenta que es compañera de cuarto de un chico, chico que h...