❝Capítulo 1❞

538 43 27
                                    

—¡______, vamos tarde! —regañó su hermano.

—No me apresures, tú eres quien no se quería bañar —salió molesta de su habitación junto a otra chica, acomodaba despreocupada un mechón hacia atrás.

—Pero si lo hice, y fue rápido.

La rubia rodó los ojos, claro que lo había hecho... de manera forzosada por ella.

—Gracias a ________ —sonrió María, su prima, quien venía tras ella.

—Estoy agradecida de que lo notes.

—Ay, que lindos mis niños —apareció su madre, Catalina.

—Lo sé, soy muy guapo —presumió Juancho.

—Eso es todo, tigre —llegó Francisco, su padre.

El señor traía una taza entre sus manos, ______ rápidamente se la arrebató.

—Deberías de dar el ejemplo a tu hijo, menos cafeína por favor.

Francisco siguió la taza con sus ojos, —Eres una hija muy malvada.

—Es por tu bien —suspiró.

—Concuerdo con ella—Cata la apoyó.

—Un hombre contra dos mujeres es imposible —se rindió el señor.

—Confirmo —Juancho habló—. Incluso sólo con una.

Luego de eso los cinco fueron a la casa Madrigal, hoy era la revelación del don de Antonio el hijo del matrimonio de la señora Pepa y Félix.

—Se ven muy lindas —habló la señora, quien iba a lado de su hija—. Quizás y hoy es su noche de suerte —habló de forma traviesa.

La rubia sonrió forzosa, haciendo que en sus mejillas aparecieran esos huecos que eran únicos en ella, —Quizás.

Fue lo único que dijo, no quería comenzar a hablar de ese tema justo en este momento.

—Ojalá y sea así —María suspiró de forma soñadora—. Sería un sueño.

—Más bien una pesadilla —susurró _______.

Catalina estaba a punto de decir algo pero alguien más se adelantó.

—Estoy ansioso de ver que nuevo don habrá —sonrió el niño, _______ agradeció mentalmente de que hablara—. Antonio me dijo que esperaba que su don fuera de gran ayuda, su abuelo espera mucho de él.

—Es comprensible, no hay muchos hombres en la familia —habló su padre.

—Aún así, es sólo un niño —María hizo una mueca.

—Conociendo al señor Pedro, hará lo que él piense mejor y eso significa que lo hará madurar muy rápido —ladeo su cabeza la rubia.

—Eso es verdaderamente triste —habló Francisco.

Y si, el señor Pedro Madrigal solía hacer eso con los varones de la familia. Primero con su hijo, Bruno, él cual desapareció (algunos dicen que fue por el estrés que sentía por todas las tareas que tuvo); y después con su nieto, Camilo (desde que obtuvo su don siempre intentó ver hasta donde podía llegar, según el anciano su don no tenía límite); y ahora posiblemente haría lo mismo con Antonio, sea cual sea su don.

A pesar de eso, la familia parecía estar bien. Siempre lucían felices.

Entraron a la vivienda que ya estaba repleta de gente, el olor a comida y pirotecnia inundaron las fosas nasales de la chica, pésima combinación pero a pesar de eso su estómago gruñó.

Real you [Camilo Madrigal] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora