Voyeur² +18 ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ

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Una mañana, tras mil indecisiones,
llamo por teléfono a las oficinas y hablo con Gerardo. El hombre, encantado de hablar conmigo, me indica que esperaba mi llamada. Le pregunto por Jackson y me dice que está de viaje regresa el lunes. Después hablamos de trabajo y me pregunta qué día me voy a reincorporar.

Es miércoles.

Decido comenzar a trabajar el lunes. Él acepta. Cuando cuelgo, el corazón me late
acelerado. Voy a regresar al lugar donde
todo empezó.

El viernes voy al local de tatuajes de
mi amigo Lay. Cuando me ve en la
puerta, abre los brazos, y yo corro a su
encuentro. Esa noche nos vamos de fiesta y terminamos a las tantas.

El domingo por la noche no duermo.

Al día siguiente regreso a la oficina.

Cuando el despertador suena, me
levanto. Me ducho y después cojo mi auto y me dirijo a la empresa. En el parking mi corazón comienza a bombear con fuerza, pero cuando, tras pasar por personal, regreso a mi despacho, el corazón se me sale por la boca. Estoy nervioso. Muy nervioso.

Varios compañeros, al verme, corren a saludarme. Todos parecen felices por
el reencuentro y yo les agradezco esa
deferencia. Cuando me quedo solo,
miles de recuerdos llegan a mí. Me
siento a mi mesa, pero mis ojos vuelan a
mi derecha, al despacho de Taehyung, de mi loco y sexy señor Kim. Sin
querer remediarlo me dirijo a él, abro la
puerta y miro a mi alrededor. Todo está
como el día que me fui. Paseo mi mano
por la mesa que él ha tocado y, cuando
entro en el archivo, siento ganas de
llorar. Cuántos buenos, bonitos y
morbosos momentos he pasado con él
aquí.

Cuando escucho ruido en el despacho de al lado presupongo que ha llegado mi jefe.

Con cuidado salgo del archivo por el antiguo despacho de Taehyung y regreso a mi mesa. Me estiro la chaqueta de mi traje azul, levanto el mentón y decido presentarme. Llamo a la puerta y al entrar con los ojos como platos susurro:

-¡¿Jackson?!

Sin importarme quién nos pueda ver,
me acerco a él y lo abrazo. Esa sorpresa
sí que no me la esperaba. Mi antiguo
compañero, el guapo Jackson, ¡es mi jefe! Tras el efusivo abrazo que nos damos, Jackson me mira y en burla dice:

-Ni lo sueñes, precioso. Yo no tengo líos con mi secretario.

Eso me hace reír. Me siento en la
silla y él se sienta al lado.

-Pero ¿desde cuándo eres el jefe?
-pregunto, alucinado.

Jackson, que sigue tan guapo como
siempre, responde:

-Desde hace un par de meses.

-¿En serio?

-Sí, precioso. Tras echar a la jefa y, a los dos días, a su tonto hermano, tiraron de mí porque era el único que conocía el funcionamiento de este departamento. Y cuando vi que los tenía comiendo de mi mano, les pedí el puesto y, por lo visto, el señor Kim accedió.

Eso me sorprende. Taehyung nunca me lo

comentó. Pero feliz por Jackson,

murmuro:

-Dios, Jackson, no sabes cuánto me

alegro. Estoy muy feliz por ti.

Mi amigo me mira y, tras pasar su

mano por mi cara, susurra:

-No puedo decir lo mismo yo de ti.

Sé que te marchaste a vivir a Múnich

con Kim. -Eso me vuelve a

sorprender. No tiene por qué saberlo

nadie, y me aclara-: Tranquilo. Me

encontré un día con tu hermana y me lo

comentó. Nadie lo sabe. Pero ¿qué ha

pasado? ¿Qué haces de nuevo aquí?

Consciente de que tengo que dar una

explicación, le comunico:

-Hemos roto.

-Lo siento, precioso -dice con

pesar.

Me encojo de hombros.

-No salió bien. El señor Kim y yo somos demasiado

diferentes.

Jackson me mira y, ante lo que he

dicho, opina:

-Diferentes son. Eso fijo. Pero ya

sabes que los polos opuestos se atraen.

Eso me hace reír. Es lo mismo que

dijo mi padre.

Diez minutos después estamos en la cafetería. Jackson ha avisado a mis locos

amigos de mi regreso, y los

cuatro, como hacíamos meses atrás,

hablamos y nos contamos confidencias.

Pasamos un buen rato en la cafetería,

donde nos ponemos al día. Cuando ya

estoy en el despacho de Jackson y éste

me está entregando unos documentos,

suenan unos golpecitos en la puerta.

Jackson y yo miramos, y un mensajero

con gorra roja pregunta:

-Por favor, ¿El joven Jeon Jungkook?

Asiento y me quedo parado cuando

me entrega un ramo de flores multicolores. Sonrío. Miro a Jackson, y éste dice, levantando los brazos:

-Yo no he sido.

Cuando abro la tarjetita, el corazón

me da un vuelco al leer:

Estimado joven Jeon:

Bienvenido a la empresa.

Kim Taehyung.

Cierro los ojos. Jackson se acerca a

mí y tras leer por encima de mi hombro

la tarjetita dice:

-¡Vaya con el jefazo! Para haber

roto con él, qué informado está de tu

regreso.

Mi estómago se contrae. El corazón

me palpita enloquecido. ¿Qué hace Taehyung?