Betty una adolescente que quedó embarazada a los 16 años y a los 17 años tuvo a su bebé, una niña, hermosa, era rubia con ojos verdes, era idéntica a su mamá y nadie lo podría negar. Cuando sus hermanos se fueron a una fraternidad , Betty empezó a...
A la mañana siguiente Betty y Jughead se levantaron un poco más temprano de lo usual.
La noche anterior habían pedido un árbol de navidad con todos los suplementos.
Recibieron el árbol y sacaron todos los detalles de aquel.
-Esto nos va a demorar - suspiro el chico viendo los pinos de diferentes tamaños para juntarlos, además de las bolas, las luces, la estrella, las decoraciones, los regalos y entre más cosas.-
-Empecemos ya, entonces - bufó ella -
Armaron el árbol poniendo todos sus detalles.
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-No quedó tan mal.- sonrió la mayor -
Una sonrisa petulante salió del rostro de Jughead.
-No hubiese sido posible sin mi - afirmó el chico con orgullo -
-Sin mi increíble decoración, esto no hubiese sido posible - aclaró ella con una sonrisa divertida -
-No hubieses decorado nada si yo no hubiese puesto el pino y la estrella - explico el divertido -
-¡Yo no alcanzó! - bufo desviando su mirada -
El se acercó a ella divertido.
-Eres muy pequeña - sonrió él con un puchero divertido, poniendo sus manos sobre los hombros de ella -
-No es cierto.. - murmuró, sus mejillas ya estaban nubladas en un tono rosa palo -
-Aja.. - asintió divertido -
Bajo sus brazos hasta rodearla por la cintura y atraerla a su cuerpo suavemente.
-¿Nos bañamos juntos? - murmuró el sobre sus labios -
-Nada me gustaría más.. - sonrió ella antes de picar sus labios -
El río y la cargo por los muslos para dirigirse al baño de visitas.
Si entraban al suyo, Adeline probablemente se levantaría y no daría mucho tiempo.
Se desnudaron antes de entrar a la ducha.
Él abrió las dos termas regulando el agua, en realidad no tenía mucha relevancia, igual saldrían mojados y calientes.
Literalmente.
Jughead la apego a la pared tomando sus dos muñecas con una sola mano.
Empezó a repartir besos desde el lóbulo de su oreja hasta su cuello y escote.
Mojados besos que la hacían suspirar de placer.
Jadeo cuando lo sintió absorber con mucha fuerza entre sus clavículas, probablemente las marcas se notarían más tarde.
-J-Jug.. - jadeo insistiendo junto con sus caderas -
-¿Si? - indagó como si no supiese lo que causaba -
