epílogo.

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Tres meses después...

Maxine

Y de vuelta a ir a clase. Era agotador.

Peerooo, veía a Ed y a los Pevensie.

Papá murió en la guerra. Al pasar unas semanas dejó de afectarme, nunca estuvo muy presente en mi vida y cuando estaba solo era para hablarme mal.

Ahora vivía con el abuelo y era absolutamente genial. Cuando le expliqué al abuelo que Lexi estaba en Narnia se lo tomó bien y aceptó en cubrirme con mamá.

Mi relación con Pete, Susan y Lucy se había hecho más fuerte durante este tiempo, Pete y yo nos acompañamos mutuamente después de que Lexi se quedara en Narnia. Susan y Lucy también estuvieron para mí.

Y con Ed...

Era absolutamente fantástico. Mi relación con él iba genial, era como si nunca hubiéramos dejado de estar juntos. También me ayudó mucho con Lexi, aunque yo fuera exasperante.

Debo admitir que cuando volvimos estuve triste durante un tiempo, no salía de mi habitación y luego ocurrió lo de mi padre y en ese momento sí me afectó.

Mucho.

Fue extraño, ¿por qué me afectaba tanto que mi papá muriera si solo me había tratado mal durante toda mi vida?

No salí de mi habitación en una semana. Pero no lloré. Simplemente... existía. Me despertaba, estaba unas horas despierta y volvía a dormir. 

Y como mencioné anteriormente, mamá y Hellen —madre de los Pevensie— eran amigas. Por consiguiente los Pevensie vinieron a mi casa de mi visita, se dieron cuenta de que no estaba ahí y Ed vino a mi habitación.

Flashback

Estaba tumbada en mi cama, tapada completamente aunque en realidad no tenía frío. Mi habitación estaba oscura y llevaba varios días sin salir y comer (aunque mamá había intentado que hiciera ambas cosas).

Oí la puerta abrirse pero no me giré a ver quién era. La simple acción de girarme un poco se me hacía demasiado pesada. Luego oí unos pasos al rededor de la cama. Al fijarme en la figura de la persona me di cuenta de que era Ed. 

Ed subió las persianas para que entrara luz, abrió la ventana para ventilar un poco y se arrodilló delante de mí con un plato de fresas en la mano.

Puso su mano encima de la mía.

━¿Cómo estás, amor?  preguntó en un tono suave.

Y eso sí que me dio ganas de llorar.

Estaba siendo patética.

Tu madre nos contó lo de tu padre comentó, también suavemente. No tienes que hablarlo conmigo si no quieres, pero come algo, por favor.

Ed tenía razón, tenía que comer. Pero la comida me daba arcadas. Aun así me senté en la cama y puse el plato en mi regazo.

Te he traído tus frutas favoritas sonreí un poco. ¿Quieres que me vaya de tu habitación?

Negué con la cabeza.

Quiero que te quedes murmuré. Era la primera vez que hablaba en días y fue algo raro. Mi voz no sonó normal y me dolió un poco la garganta.

Él asintió. 

Después no me presionó para que le contara lo que me ocurría o cómo me sentía.

Ed nunca me presionaba y eso me gustaba.

Flashback.


Las clases se habían acabado y empecé a ir a la biblioteca cuando a mitad de camino Ed me tomó de la cintura por atrás.

━Podrías haberme avisado de a dónde ibas.

━Lo siento, amor, no quise molestarte.

━No podrías molestarme ni aunque quisieras.

Rodé los ojos y le sonreí.

Nos frenamos delante de la puerta de la biblioteca y había varias chicas de nuestra escuela. Lo malo es que la mayoría gustaban de Ed, lo que me ponía un poco incómoda. Algunas habían llegado a ser un poco malas conmigo.

A él también le ocurría lo mismo cuando los chicos de su escuela me miraban, se ponía incómodo.

━¿Sabes? ━dijo de repente━. Me gusta un poco que te pongas celosa, así veo que te importo.

━Primero, no estoy celosa ━contesté━. Y segundo, ¿diez años de relación y aún no sabes que me importas?

━Siempre viene bien que me recuerdes ━sonrió.

Solo había ido a la biblioteca a devolver un libro, tenía como mil para leer en mi casa. Devolví el libro y cuando estábamos a punto de irnos, Ed habló.

━Oye, ¿por qué no les demostramos que somos pareja y que no quiero nada con ellas?

━¿Qu...? ━no me dejó acabar, en cuanto quise darme cuenta nos estábamos besando.

━Espero que hayan captado el mensaje ━murmuró.

━Eres un idiota, ¿lo sabías? ━sonreí.

━Sí, me lo has dicho algunas veces.

━Vamonos —le tomé la mano y me acompañó a mi casa.



Fin del segundo libro, el tercero está disponible en mi perfil.




Dark red -Edmund Pevensie.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora