Hyunjin no se levantó por una alarma para ir a clases o una llamada de sus amigos avisándole que ya se le hacía tarde como comúnmente sería.
Se levantó por el golpe de una almohada.
—Arriba Hwang—dijo su madre dándole otro almohadazo—Ya me tengo que ir, te dejé el desayuno hecho.
—Mmnh—gruñó con el cabello desordenado, volviéndose a tapar.
—Me voy entonces, cierras bien la casa, llegó en la noche.
—Si, si...—dijo con sueño sacando la cara de entre las cobijas para mirar a su madre con un puchero.
Ella le mandó un beso y se retiró, dejando a Hyunjin nuevamente solo en la casa.
Hyunjin se levantó media hora después solo para desayunar algo, darse una ducha, arreglarse bien, tomar dinero y salir rumbo al centro comercial. Tenía que ver la tienda con sus propios ojos a pesar de que la pagina estaba constantemente siendo actualizada, por lo que si el local ya hubiera cerrado ya no saldría.
Pero, aun así, tenía que comprobarlo en persona.
Tomó un taxi obviamente, no iba a caminar por 3 horas solo para ahorrarse unos wons; en auto el viaje fue de escasos 20 minutos, así que cuando llegó, pagó y se adentró al edificio, no se quedó bobeando como normalmente haría, se ajustó la gorra y el cubrebocas para evitar que le vieran la cara, no quería que alguien lo fuera a reconocer o si quiera ver a donde se dirigía.
En teoría no tendría por qué avergonzarse, pero la comunidad coreana siempre juzgaba muy rápido.
Llegó al tercer piso luego de tomar el elevador, buscó un rato hasta que encontró la tienda de helado de yogurt y para no verse tan obvio primero se compró un helado y después pasó muy lentamente por enfrente del local.
Pudo ver las oficinas donde varias chicas y chicos hacían papeleos y contratos con otras personas que ya estaban consumiendo el servicio, miró a los chicos dentro de "cajas de cristal" , cada uno acomodado en lindos sillones o pufs haciendo cualquier actividad dentro de sus pequeños cuartos de cristal, en la pared frontal se podían ver los datos de cada chico, nombre, edad, tarifa y quien podía alquilarlo.
También logró ver el enorme letrero de que había vacantes disponibles para ser uno de los novios de alquiler, o "muñecos" como decía ahí.
Se acercó otro poquito solo para poder ver a los chicos, si, en su mayoría eran bastante guapos y se veían cómodos dentro de sus habitaciones de cristal, empezó a preguntarse cuanto ganaban por estar prácticamente haciendo nada y saliendo con chicos o chicas que requerían el servicio, comió un poco más de su helado y decidido alejarse, pero un gritito desde dentro del local y unas finas manos lo detuvieron.
Una chica estaba frente a él, mirándolo con ojos grandes y analíticos.
Casi parecía que le estaba escaneando el rostro y después el cuerpo entero.
Sintió el escalofrió.
—Eres guapo ¿no quieres trabajar aquí? Estamos buscando chicos como tú—soltó sin más la joven y Hyunjin se sintió intimidado.
—Eh...—miró el agarre en su muñeca, incomodo, ella lo notó así que rápidamente lo soltó.
—Lo siento ¿me permites explicarte? Será rápido, entra por favor—pidió la bonita pelinegra con ojos de súplica.
Unos ojos bastante bonitos a los que no se les podía decir que no -y esa es la razón por la que muchos chicos terminaron ahí-. Hyunjin suspiró y la siguió dentro ¿Qué más daba si empezaba de una vez? Ya tenía la intención de trabajar ahí, tal vez no directamente hoy, pero si tal vez la siguiente semana cuando se asegurara de que no iban a sacarle los órganos ni traficar con él para pasar drogas ilegales que estuvieran en su estómago y así...

ESTÁS LEYENDO
NOVIO DE ALQUILER
FanfictionHyunjin necesita dinero y rápido, de lo contrario su madre lo terminara sacando de la casa. Desesperado, intenta buscar un empleo por todos lados, pero no encuentra nada lo suficientemente bueno, o al menos, lo que le deje el suficiente dinero. Resi...