𝑼𝒏𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂 𝒅𝒊𝒇𝒆𝒓𝒆𝒏𝒕𝒆 [Fanfic Trilogía Hidalgo]

09

La mayoría sintió pena por el pobre niño que había salido corriendo, nadie había podido refutar las palabras de Eleanor, Nyx miró con molestia a la castaña antes de acercarse

—Es increíble el poco tacto que tienes con una niña, me preguntó si tus padres jamás te enseñaron algo que se llama delicadeza—Nilsson volteo a mirarle con superioridad.

—Al menos yo tengo padres para tener enseñanza Hidalgo—Nyx le miró abriendo un poco sus ojos.

—Primero que nada mi apellido mi apellido es Montenegro no Hidalgo, segundo Nilsson pendeja, sería un halago para ti. ¿Tus padres son tan pacientes contigo como para calarse cada estupidez que sale de lo que llamas boca?—casi escupió mirándole de arriba a abajo.

Eleanor calló en ese momento al no saber que decir.

—Para tu información Nilsson Ara y yo tenemos los mismos padres, insultarme sería insultar a ella también e insultarnos es insultar a la familia Montenegro. Creo que tus padres ya tiene suficiente problemas para que llegues y acabes con lo poco que les queda para mantenerte—la castaña terminó con la cabeza baja rojo de la ira y vergüenza.

—¿Alicia puedes ir a ver a Manchado?—pidió y preguntó Ara a la Longbotton.

Haciendo una mueca Longbotton asintió y corrió en busca del pobre jaguar que había sido herido.

—Espero que puedas mantener tu boca cerrada la próxima vez Nilsson—Nyx se retiró con los demás para estudiar en el comedor.

—Te dijimos que meterte con Montenegro era una estupidez. Ara será una cosa pero Venus es otra y aunque suene mal, tiene razón Ellie—la castaña miró a Alba con incredulidad, no se podía creer que ella de todas las personas defendiera a los hijos de arpías.

Se sintió traicionada en ese momento que salió corriendo de ahí.

***

La ahora de la cena había llegado, los alumnos estaba en el comedor, ya consumiendo lo que estaba en sus platos, Nyx miraba el lugar a su lado pensando en el vacío de ahí, hizo una mueca al recordar que Alicia estaba con Manchado aún.

—Alice tarda demasiado—se quejó Bárbara a su derecha.

—La envíe por Manchado, jamás creí que tardaría tanto en regresar—comentó Ara.

Los amigos miraron al lugar vacío, pensando en lo solitario que era sin las quejas de Alicia o sus opiniones sobre temas un poco interesantes.

—Jamás pidas de nuevo que se vaya por bastante tiempo—volvió a quejarse Bárbara.

Los chicos rieron en voz baja, Cartaya sin poder evitarlo, golpeó a Aarón para que convenciera a Jack de ir a buscar a Alicia. El chico se negó y Bárbara se comenzó a quejarse, preguntando porque no podía cumplir su pequeño capricho de buscar a su amiga

Castro busco ayuda de los chicos, sintiéndose traicionado en cuanto de las dos miraron a otro lado como si estuviera desaparecido del mapa.

—¡Aarón!—exclamó Bárbara.

—¡No quiero!, pide eso a alguien más—el chico se hizo bolita en su lugar negándose a hablar, solamente con su hermana Gabriela.

—Pero Aarón...—antes de que pudiera decir algo más, la puerta del comedor fue abrupta, por esa misma entró corriendo una mujer bastante conocida para muchos.

Damus corría gritando algo como un troll en las mazmorras.

Ahí fue cuando la mayoría se dió cuenta de que Damus no había estado en la mesa del profesorado, ignorando su falta de presencia muchos miraron al director y a sus jefes de casa.