Peter wyman
Los nervios me empiezan a carcomer cuando escucho la palabra jefe.
—Estarás bien —dice al notar que mis manos tiemblan —. Es una buena persona.
Sus intentos de calmarme no sirven de mucho y estoy a punto de echarme a correr.
—¿De cuánto es la paga? —pregunto para calmar mis dudas.
—¿Conoces a las Kardashian? —pregunta y asiento —. Si trabajas por lo menos seis meses aquí, podrías ser tan millonario como ellas.
Mis ojos se abren de forma exagerada, mi boca se abre a voluntad propia y me paralizo.
—Conseguiré el trabajo —digo con confianza.
No sé en que mundo me estoy metiendo, ni que va a pasar si me quedo, pero lo que si sé es que sería estúpido rechazar un trabajo con tan buena paga. Por esa cantidad de dinero soy capaz de matar si el jefe lo desea.
—Iré por el jefe —informa Giselle para luego marcharse.
Mientras la veo retirarse me acomodo nuevamente en el sofá y saco mi celular para esperarla.
El lugar se comienza a vaciar poco a poco, y solo quedan tres personas aparte de mí, acomodando la ropa que esta es el suelo.
Pasan quince minutos desde que Giselle salió, y me coloco de pie para salir, pero antes de poder abrir la puerta aparece alguien delante de mí.
—¿Eres nuevo? —pregunta.
—Se podría decir que si —contesto nervioso.
—Ayúdame —pide.
Cruza la puerta, me toma de la mano y me lleva de regreso al sofá.
—¿Qué necesita? —pregunto.
Él toma asiento, pero yo me mantengo de pie.
—Tengo una reunión con la líder de la subdivisión, la Golden Mafia —responde.
No entiendo de lo que habla y lo miro con confusión.
—Cierto, eres nuevo —recuerda —. Busca algo elegante para mi y te explicaré todo.
Dudo un poco ya que no trabajo allí, pero sería mi oportunidad para practicar antes de que llegue el jefe.
Observo atento para saber que buscar y sin darme cuenta el chico me parece atractivo.
Tiene el cabello oscuro como la noche, ojos rasgados, rasgos asiáticos, una piel entre amarilla y blanca, un notable tatuaje en su cuello y uno pequeño en la mejilla.
—¿Qué sucede? —pregunta al ver que no dejo de mirarlo.
—Nada. Ya voy por su atuendo —respondo.
Me alejo y recorro el lugar rápidamente para no hacerlo esperar. Abro un armario y encuentro varios trajes de hombre y saco algunos que llaman mi atención.
Pienso que él no puede ser mucho mayor que yo y escojo algo elegante, pero cómodo y juvenil.
Me acerco a él luego de elegir y le muestro.
—Creo que quedarían bien en ti —expreso —. Una camisa blanca, liza —se la entrego —. Una chaqueta overside para el frio de la noche y unos pantalones clásicos para mantener la formalidad.
—Es una mezcla extraña, pero creo que funciona —comenta.
—También si gusta puede utilizar esta corbata de satén para que a la hora de quitarse la chaqueta siga viéndose elegante —agrego y él toma la corbata.

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Dark Mafia
Teen FictionDespués de recibir una oferta de trabajo, Peter se muda a su ciudad de nacimiento y empieza su vida desde cero. En el camino tiene que enfrentar grandes dificultades y su trabajo no era lo que imaginaba, pero su amor por el dinero lo hace aceptar el...