Rey De La Mafia #2

CAP. 18

Perdón por desaparecer estos días, aquí les dejo su capitulo ❤️

Me encamino hasta la entrada el supuesto hombre que tengo como suegro está al frente de mi casa escoltado por dos hombres.

_Dame a mi hija_ se va acercando pero mis hombres evitan que de un paso más.

_Sabes que eso no será tan fácil, necesito algo a cambio primero_ me cruzo de brazos y llevo mi mirada a uno de los hombres.

_Pide lo que quieras solo no le hagas daño_

Sonrío y pido que me traigan a la chica.

_Necesito 3 millones de dólares en este mis instante_ me entregan a la chica y le apunto en la cabeza_ o tú princesa muere.

Con mala cara se dirige a su auto, espero con paciencia hasta que otro auto blanco se detiene en la entrada, un hombre baja con un maletín en la mano y se lo da a uno de mis hombres.

Abro el maletín y observo los dólares de 100.

Tomo uno entre mis manos y siento la textura demasiado suave para que sean billetes reales.

_Son falsos_ no borro mi sonrisa y presiento como sus bellos se ponen de punta.

Preparo mi arma y arrojó el maletín y todos los billetes falsos salen volando.

Aprieto más el arma en su cabeza y veo al hombre perder color.

_O me buscas ese dinero en este instante o despídete de ella_

_Si ya por favor, ya_

Hace otra llamada y dura más de lo normal, cambio el arma hacia su garganta y el solo se apresura hacer lo que sea que hará.

Momento más tarde por fin tengo el dinero pedido.

_Vez como se arreglan las cosas_

La lanzo a sus pies y sin más le disparo rompiendo su cráneo en mis de pedazos, el césped se mancha con el líquido rojo y le apunto al supuesto suegro.

_Ultimas palabras.

_¿Por qué la mataste?_ su pregunta sale mientras tiene la cabeza gacha.

_Crees que soy imbecil para no darme cuenta que cuando te dejará libre me buscarías por mar, cielo y tierra.

_Eres un imbecil!_

Intenta sacar el arma pero en el intento ya está lleno de balas por mi hombres, los dos que lo acompañaban no pudieron hacer nada ya que los mate sin piedad.

Limpio a mi pequeña ya que está caliente y vuelvo a cargarla nuevamente.

_Preparen mi equipaje, tengo un viaje a París por terminar_.

La servidumbre hace lo que le pido, mi jet privado me espera y abordo con dos de mis hombres.

No necesito tanta protección.

Para cuando llego ya es de noche. El rastreador me indica que Pao está en un departamento.

El chófer maneja por la hermosa cuidad de París, se detiene frente a un hotel 5 estrellas con una vista hermosa a París.

Entro por el asesor luego de preguntar un durar casi una hora tratando de que no le dijeran a Paulina que estoy aquí.

Camino por los pasillos largos y mis hombres se quedan a una distancia prudente de la habitación de mi amada.

Toco su puerta y escucho su grosería con un " No ven la puta hora".

Al abrir la puerta se queda perpleja y yo solo sonrío.

Narra Paulina.

Nunca me había sentido tan mal al extrañar a alguien, ángel es una de las personas que te hace mucha falta.

El es todo lo que necesito en este mundo, me hace demasiada falta tenerlo cerca.

Extraño sus besos y sus abrazos, extraño que me toque y que me haga sentir sulla, extraño todo de el, me gusta tener que abrazarlo y poder hundirme en su pecho.

Al caer la noche llegó hasta el apartamento, tomo una ducha y me lanzó en la suave cama.

Quedo dormida al instante.

El desesperante Tintín de la puerta hace que me queje cada vez que me muevo de un lado a otro.

Me levanto echando groserías pero la persona en la puerta me deja sin palabras.

Mi corazón se detiene y no me quiero imaginar la cara que tengo, pierdo el color y mi cabeza da vueltas por unos segundos.

_¿Cómo sabías donde estaba?_ logro articular.

_Te puedes ocultar en el fin del mundo y siempre te encontraré_

Me acerco a el y lo abrazo, su aroma me recibe y sus labios también.

Me besa con suavidad lo recibo gustosa y lo invito a qué pase.

_Enserio ¿Como lo supiste?_

_Un mago nunca revela su secreto_

Sonrío por el comentario y mis ganas de verlo desaparecen.

Ya lo tengo aquí conmigo algo que nunca pensé que sería posible, por más que intente ocultarme el siempre me encontrara y me hará sulla.